Lo que no se dice sobre el sistema de pensiones
Asa Cristina Laurell
T
odas las autoridades gubernamentales involucradas en el tema han declarado que las futuras pensiones basadas en las cuentas de las Afore serán muy bajas y alcanzarán entre 25 y 30 por ciento del último salario. Dejan entrever que la mejor manera de solucionar el problema sería incrementar la cotización de los trabajadores, aparte de incrementar la edad de jubilación. Alertan además sobre el hecho de que sólo alrededor de 30 por ciento de la población alcanzará una jubilación.
Hace 20 años un reconocido actuario, el doctor Hazas, de la UNAM, demostró que esto iba a ocurrir. Argumentó que la reforma del IMSS, basada en cuentas individuales, era inviable mientras los técnicos del PRI dijeron que evitaría el colapso del IMSS. La reforma fue aprobada por los priístas en diciembre de 1995. Una alianza amplia de académicos, sindicatos, organizaciones civiles y ex funcionarios del IMSS presentó una detallada propuesta alternativa. Ésta no fue rechazada por razones técnicas, sino que se trataba de cumplir las condicionalidades del rescate financiero del FMI. Hoy nos alcanzó el destino anunciado, y de nuevo las autoridades priístas sólo atinan a alertar sobre un próximo colapso. Hay responsables de esta situación, pero están impunes.
En el debate de hoy lo más importante es lo que no se dice. Las autoridades y las organizaciones patronales hablan de la pérdida del bono demográfico (la favorable relación entre la población en edad de trabajar y la población dependiente) mexicano dentro de dos décadas, pero no explican por qué este bono no se ha aprovechado para afianzar un sistema de pensiones viable, que no es el actual. La realidad es que se está desperdiciando por la falta de generación de empleo digno y bien remunerado que, entre otras cosas, significa que los beneficios de este bono se están exportando a Estados Unidos vía la emigración por causas económicas.
Las autoridades y las organizaciones patronales tampoco mencionan que las reformas del IMSS e Issste tienen un costo muy alto para el erario. Es así porque la condición para crear las Afore, que no es otra cosa que la transferencia del ahorro forzado de los trabajadores a los grupos financieros privados durante décadas, es que el gobierno paga el
costo de transición.
Éste significa que el erario paga las pensiones de los jubilados con anterioridad a la aprobación de las nuevas leyes y de aquellos que empezaron a cotizar antes de su entrada en vigor. Según datos del Centro de Análisis y Estudios de Seguridad Social (CAESS), basados en las Cuentas Nacionales, este costo fue de 744.4 mil millones entre 2001 y 2011 o 2.7 veces del presupuesto total del IMSS en 2011, y se estará pagando durante más de 50 años. El IMSS calcula que crecerá alrededor de 6 por ciento anualmente los próximos 10 años y después presentará un crecimiento más lento para tener uno de tipo negativo hasta 2050. El Issste estima el costo de transición de la nueva ley en unos dos billones de pesos. Este subsidio a las Afore, pagado con los impuestos de todos los mexicanos, se va a mantener inalterado a menos de que se cambia a fondo el diseño del sistema y se abandonen las cuentas individuales.
La legislación obliga además al Estado a pagar la diferencia entre el monto de la pensión que resulta de la cuenta individual del trabajador y un salario mínimo en el IMSS y dos en el Issste. El costo de esta disposición va a ser muy alto, precisamente porque la pensión como porcentaje del último salario es muy baja; este costo incrementará mucho cuando aumente el número de jubilados y sólo bajará a largo plazo si se incrementa la cotización.
Tampoco se menciona que los expertos en pensiones coinciden en que el sistema de capitalización individual con administración privada es el más caro y el que menos beneficios da al trabajador.
Entonces, ¿porqué se mantiene este sistema y sólo se propone un incremento de la cotización y de la edad para pensionarse? Hoy el público empieza a percatarse de que los únicos favorecidos con el actual sistema son las Afore y posteriormente las aseguradoras de pensiones, ambos pertenecientes a los poderosos grupos financieros, mientras el trabajador corre todos los riesgos del mercado financiero. El 91 por ciento de los ingresos de las Afore, según CAESS, provienen de las comisiones que cobran por administrar los fondos y los intentos por lograr que sólo puedan cobrar sobre las ganancias han sido bloqueados.
El sistema de pensiones está efectivamente en crisis, pero sólo se resolverá el problema haciendo un cambio de fondo. Lo ha hecho Argentina, nacionalizando los fondos de pensiones, y el gobierno de Bachelet está elaborando una propuesta para bajar las comisiones con una Afore pública y una pensión universal.
- AgradecimientoOmar SaldívarLe agradezco mucho, Dra. Asa Cristina Laurell, por su revelador artículo. Los trabajadores mexicanos necesitamos hacer conciencia acerca de nuestro futuro económico. Su escrito es un medio excelente para ello.
- PensionesArturoEl dinero del fondo de pensiones a nivel nacional se debe invertir en carreteras, puertos e infraestructura. Y la ganancia de esta inversión, debe ir de nuevo al fondo de pensiones. Esto no requiere de intermediarios (Afores). Saludos.
- Decir también queSamuelEl "costo de transición" o el "subsidio a las Afore", que usted dice "pagado con los impuestos de todos los mexicanos" es resultado de haber el Estado, como administador, quebrantado el fondo solidario de pensiones, el cual garantizaba el costo de jubilación de una generación a otra, sin responsabilizarse de ello, y, por otro lado, no haber exigido a las Afore costear las jubilaciones en transición con parte de las ganancias del sistema financiero de las Afore que, como usted dice, no es en beneficio de los futuros pensionados y sí ganancia de las Afore. Cambiar el sistema de cuentas individuales al solidario y un trabajo bien remunerado y digno es la solución.
- Sociedad Civil debemos actuar YA, Abajo AFORESHH.MMeste es un asunto tan importante como para dejarle la solución a los políticos, a la Amafore y la CONSAR. Este sistema debe tirarse ya...y convocar a los trabajadores y académicos serios y preocupados por México para rediseñar POR COMPLETO ESE PERNICIOSO SISTEMA. Si no lo hacemos HOY, la imagen de mañana (de la que TU y YO seremos parte) será la de millones de ancianos POBRES, ENFERMOS e infelices (de otrora clases medias y medias-altas) protestando en las calles con familias fracturadas, sometidos y reprimidos a TOLETAZOS, MACANAZOS, BALAS DE GOMA y GASES LACRIMÓGENOS...ese va a ser el precio de no salir a la calle a plantarnos TODOS (por que nos pega a TODOS y en TODAS las clases sociales). Plantarnos y exigirles TODOS al CONGRESO-EJECUTIVO para derogar las AFORE y su andamiaje institucional por otro nuevo.
- pequeño errorMEn el ISSSTE no son 2 salarios mínimos, es una cantidad fija que en el 2007 eran efectivamente 2 salarios mínimos de ese tiempo. La idea es cunado esa cantidad fija del ISSSTE se convierta en un salario mínimo en 2000 y cacho, unificar IMSSS e ISSSTE. La otra mentira del gobierno es que el presupuesto que da al ISSSTE, la mitad se va en pensiones, ¡NO! el presupuesto del ISSSTE es la otra mitad, por eso no hay medicina, no contratan enfermeras, nuevos médicos,etc. y no es por causa de las pensiones como quieren hacer ver. Por eso mandan al de la CONSAR hacer el trabajo sucio.
- Gracias por el artículoSilviaPara las de a pie este es un tema "algo complicado" pero, intuyo las grandes tajadas que se reparten los capitalistas con los ahorros, jubilaciones o retiros de los trabajadores. Pondré este artículo en mi dependencia, es algo que hay que difundir para los que creen que recibirán millones y millones.
- comentarioSimurisMi única preocupación al nacionalizar las pensiones es que estas se conviertan en caja chica de toda la clase política y las castas gobernantes; preferiría continúen privadas pero reguladas por el gobeirno