Irlanda: La crisis permanente
Anne McShane
Kevin Bean
14/05/2022
Las elecciones en Irlanda del Norte, en las que el Sinn Féin se ha convertido en el partido más grande, relegando al Partido Unionista Democrático al segundo lugar y en las que el Partido de la Alianza emergió como una fuerza política importante, han sido aclamadas como un punto de inflexión histórico.
A primera vista, se trata de un cambio trascendental en la política irlandesa y británica, que representa una inversión crítica de lo que había sido el statu quo en Irlanda del Norte desde 1921, cuando se ideó una mayoría unionista de acero para garantizar que los Seis Condados siguieran siendo parte del Reino Unido Según los términos del Acuerdo del Viernes Santo (GFA) de 1998, Sinn Féin, como el partido más grande, podría tomar el timón del gobierno de Irlanda del Norte. El simbolismo es inconfundible.
Sin embargo, este éxito electoral puede no traducirse tan fácilmente en su acceso al gobierno. Según las reglas para compartir el poder establecidas por la GFA, el primer ministro es nominado por el partido más grande del sector ideológico más grande (es decir, unionista o nacionalista) y el viceprimer ministro es nominado por el partido más grande del segundo sector ideológico más grande. La GFA estipula además que el ejecutivo no puede funcionar sin representantes de ambos 'denominaciones'. Desde 2007, cuando se estableció la forma actual del ejecutivo y la asamblea, el DUP ha ocupado el cargo de primer ministro, con el Sinn Féin como vice primer ministro. Ahora que SF tiene 27 escaños, a diferencia de los 25 del DUP, está claro que esos papeles deben invertirse. Michelle O'Neill, vicepresidenta de SF, ahora debería ser nominada primera ministra, con su vice del DUP.
Sin embargo, la transición no va a ser tan suave . El líder del DUP, Sir Geoffrey Donaldson, ha dejado claro que su partido no entrará en el ejecutivo con el Sinn Féin hasta que se resuelvan los problemas de su partido con el protocolo de Irlanda del Norte. En febrero, el DUP ejerció su veto para hacer caer al Ejecutivo en protesta por ese protocolo que, a efectos comerciales y aduaneros, deja a Irlanda del Norte dentro del marco aduanero y de mercado único de la Unión Europea. Según los unionistas, esto debilita el lugar de los Seis Condados en el Reino Unido, por lo que la denuncia del protocolo se convirtió en el punto principal de la campaña electoral del DUP. En las maniobras postelectorales, esta sigue siendo la posición del DUP, por lo que es poco probable, tal como están las cosas, que se forme un nuevo ejecutivo a corto plazo. 1
Si bien gran parte de la atención se ha centrado comprensiblemente en el Sinn Féin, la situación real en la que se encuentra ahora el liderazgo del DUP es quizás más significativa. Esta pausa política podría continuar de una forma u otra hasta el próximo año. La GFA da seis meses para formar un gobierno, después de lo cual tienen que repetirse las elecciones. Desde el Brexit, por el que hizo campaña el DUP, y la controversia sobre la frontera de Irlanda del Norte con la UE y Gran Bretaña, el voto del DUP ha disminuido de manera muy significativa. Pasó de 38 miembros en la asamblea legislativa (MLA) en mayo de 2016 a 28 en marzo de 2017 y ahora a 25 en mayo de 2022. Aunque no se tradujo en escaños ganados, el DUP en esta elección transfirió votos al partido unionista de línea más dura, la Voz Unionista Tradicionalista,2
Está claro que el DUP espera que el gobierno de Johnson cabalgue en su rescate y elimine unilateralmente el protocolo. Sin embargo, lejos de sacar al DUP del agujero que cavó, esta solución simplemente lo enredará aún más en la política interna de los tories y en la creciente brecha diplomática entre Westminster y la UE. Queda por ver si esto es ruido de sables en ambos lados, pero, dado el contexto geopolítico más amplio de la guerra en Ucrania, la importancia estratégica que Washington otorga a la UE y las dificultades políticas que enfrentan los tories, las prioridades políticas del DUP no están en lo más alto de la agenda de nadie. La historia reciente ha demostrado que, cuando entran en juego fuerzas e intereses más grandes, las estrechas preocupaciones del unionismo suelen ocupar un segundo lugar muy lejano en las prioridades de los gobiernos británicos.
¿Al volante?
Junto con la nueva posición del Sinn Féin como el partido más grande en los Seis Condados, tanto en términos de diputados como de votos de primera preferencia, el crecimiento en el apoyo al Partido de la Alianza también es políticamente significativo. Con 17 electos, un aumento de nueve desde la última elección, y el 13,5% de las primeras preferencias, muchos afirmaron que el éxito del partido anunciaba la llegada de una nueva "tercera fuerza" intercomunitaria en el norte que desafia a la antigua política 'sectaria' de unionismo versus nacionalismo.
En el período previo a las elecciones, las encuestas y sondeos de opinión parecían apuntar que un sector cada vez mayor de la población de Irlanda del Norte no deseaba ser designado ni como unionista ni como nacionalista, sino con algún otro identificativo más "neutral". Un examen más detenido del voto de la Alianza, su distribución geográfica y demográfica, y su dependencia de las transferencias en lugar de las primeras preferencias para asegurar los escaños tiende a arrojar dudas sobre algunos de los titulares y afirmaciones más exagerados sobre un gran avance. 3 A pesar de la emoción de los comentarios y el lenguaje optimista, las divisiones comunitarias (que la GFA pretendía gestionar y sigue reproduciendo) siguen siendo el marco definitorio de la política en los Seis Condados del Ulster.
Aunque Sinn Féin solo tuvo un aumento marginal en su voto en estas elecciones y no ganó ningún escaño adicional, siente que está al volante: es el partido que se opuso al Brexit, es pro-UE y está listo para entrar en el gobierno a ambos lados de la frontera. Inmediatamente después de la votación, Michelle O'Neill declaró que las elecciones “abren el comienzo de una nueva era que creo que nos presenta a todos la oportunidad de reimaginar las relaciones en esta sociedad sobre la base de la justicia, la igualdad y la justicia social” 4Este lenguaje estudiadamente moderado e inclusivo se hace eco de gran parte de la retórica moderada de la campaña del partido, pero en los días siguientes ha estado exigiendo, junto con diputados que representan al Partido Socialdemócrata y Laborista, así como al Partido Alianza, que el DUP asuma sus escaños para formar un ejecutivo antes del 13 de mayo. Al presionar al gobierno británico para que respete el mandato electoral de su partido, declaró: “El público aquí no puede ser un peón en el juego de la gallina del gobierno británico con la UE. Es hora de formar un ejecutivo ahora”. 5
La ventaja política y psicológica de la fuerza electoral del Sinn Féin ha incrementado los llamamientos al secretario de Estado británico, Brandon Lewis, para convocar un referendum sobre el estatus constitucional del norte. Ha desestimado estos llamamientos, pero a ambos lados de la frontera, los principales políticos del Sinn Féin continúan argumentando que la dinámica para tal transición esta apareciendo. La confianza que muestran los líderes del partido parece inicialmente justificada por los resultados electorales en el norte y la fuerte posición de SF en las encuestas de opinión al sur de la frontera. Las posibilidades de un primer ministro de SF y de un papel dominante en el gobierno de Dublín en los próximos dos años parecen estar al alcance.
Si bien este optimismo podría ser bueno para sus activistas, existen obstáculos reales en el camino de una estrategia de transición tan gradual. En términos constitucionales, el estado británico todavía tiene el látigo en la mano: las instituciones y los mecanismos electorales de la GFA fueron diseñados para gestionar, no poner fin, al conflicto, por lo que el conflicto básico subyacente de la reunificación irlandesa y la democracia nacional permanece intacto y sin resolver. En Dublín, la burguesía irlandesa y su Estado están aterrorizados por los costes y la inestabilidad que supondría la reunificación. Lejos de dar la bienvenida a la culminación del 'proyecto nacional', todo lo que quieren es estabilidad y una forma modificada del statu quo: retroceden con horror ante la posible interrupción y amenaza a sus intereses que implicaría un nuevo estado de toda Irlanda.
En los Seis Condados la aritmética electoral todavía favorece a los unionistas. Si bien Sinn Féin es el partido más grande, el número total de diputados unionistas aún supera a la suma de los representantes nacionalistas. No habrá referendum sobre la frontera en el futuro inmediato: el gobierno británico no está bajo ninguna presión real para actuar en ese sentido. De hecho, la presión es todo lo contrario. A pesar de los caprichos del ciclo electoral y las tensiones sobre el Brexit y el protocolo, tanto Londres como Dublín quieren estabilidad y la continuación del statu quo en los Seis Condados. Por lo tanto, con algunas modificaciones necesarias y prestidigitación diplomática en los próximos meses, ambos estados continuarán la asociación acordada en el GFA y, por lo tanto, trabajarán para asegurar sus objetivos a largo plazo.
En ese sentido, cuanto más cambia, más sigue siendo la misma Irlanda del Norte: una crisis permanente.
Notas:
El sistema de votación transferible único utilizado en Irlanda del Norte nos permite comprender el patrón de transferencias y cambios de opinión dentro de los bloques de votación comunitaria. Vea los resultados completos y los detalles en www.bbc.co.uk/news/election/2022/northern-ireland/results. ↩︎
La designación del Alliance Party como 'intercomunitario' desmiente su aceptación del statu quo constitucional y su voluntad de aceptar una designación unionista en la asamblea, como ha exigido desde 1998. Véase www.irishtimes.com/news/alliance- partido-confirma-re-designación-de-mlas-como-sindicalistas-1.402409 . Véase también el propio sitio web del partido: www.allianceparty.org . ↩︎
www.independent.co.uk/news/uk/naomi-long-mary-lou-mcdonald-stormont-alli...↩︎
www.rte.ie/news/ireland/2022/0510/1297112-northern-irland-politics. ↩︎
No hay comentarios:
Publicar un comentario