EL DELFÍN

Este es un espacio para la difusión de conocimientos sobre Ciencia Política que derivan de la Carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública de la Universidad Nacional Autónoma de México.

miércoles, 25 de julio de 2018

Bajo la lupa

Bajo la lupa
Post-Helsinki: Un muy grave periodo, según Kissinger
Alfredo Jalife-Rahme
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▲ El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, en una conferencia de prensa, en la palacio presidencial, en Helsinki.Foto Ap
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ara realizar un diagnóstico apropiado sobre el impacto en la opinión pública de Estados Unidos (EU) de la cumbre Trump-Putin de Helsinki hay que ser muy precavidos con la masiva desinformación de los multimedia que controlan los omnipotentes servicios policiacos de espionaje.
Una lectura expedita de tales multimedia, en su aplastante mayoría lubricados por George Soros, daría por hecho perentorio que Trump está acabado ya que se encuentra, sino al borde de un golpe de Estado (http://bit.ly/2Ldo7f6), a punto de ser defenestrado después de las elecciones intermedias de noviembre cuando el Partido Demócrata ganaría la mayoría del Congreso.
Los multimedia sorosianos distorsionan la realidad en forma aberrante: dos encuestas, una de Axios, otorga 79 por ciento de apoyo de la base del Partido Republicano a su presidente (http://bit.ly/2uJLhj5), y otra, deGallup, expone que Trump alcanzó la más alta aprobación por su desempeño en el pasado trimestre de abril a julio (http://bit.ly/2Lhhybv).
Hasta el israelí-estadunidense Roger Cohen, del rotativo del establishment The Washington Post, cuyo dueño Jeff Bezos es enemigo acérrimo del presidente número 45, sicoanaliza a su manera simplona las razones por las que la gente quiere a Trump (https://wapo.st/2LmqFrl).
El británico Edward Luce –quien conoce como pocos los dédalos del poder en EU, pero a quien le vence su proclividad en favor del Partido Demócrata por haber sido amanuense de Larry Summers, ex secretario del Tesoro con Clinton– realizó una entrevista a Kissinger un día después de Helsinki (Financial Times; (20/7/18).
Según Edward Luce, Kissinger, a sus 95 años, ahora vigila un mundo en el que China y Rusia desafían el orden mundial de EU, seguido en concierto uno con otro.
Kissinger juzga que la OTAN leyó mal el arraigado anhelo de Rusia a ser respetada: es una característica única de Rusia que un levantamiento en casi cualquier parte del mundo le afecta (nota: como en Siria y Ucrania), le brinda una oportunidad y también es percibido como una amenaza. Vaticina que esos levantamientos continuarán y teme se aceleren.
Kissinger no ve a Putin, con quien se ha reunido 17 veces, como un carácter tipo Hitler, sino que viene de Dostoievski. Considera muy local, sin ser una figura trascendental, a la canciller alemana Merkel cuando un Atlántico dividido convertiría a Europa en un apéndice de Eurasia y a merced de China que desea restaurar su papel histórico que convertiría a EU en una isla geopolítica.
A cada quien su hermenéutica: el influyente portal ruso Sputnik deduce de la entrevista que Kissinger lamenta (sic) que la cumbre Putin-Trump haya sido sumergida por temas domésticos de EU. Para Kissinger la cumbre era una tarea pendiente que debía haber tenido lugar y por la que había abogado por varios años.
Sputnik rescata una frase ominosa: nos encontramos en un muy, pero muy grave periodo para el mundocuando Trump “puede ser una de esas figuras en la historia que aparece de tiempo en tiempo para marcar el fin de una era y forzar a renunciar a sus viejas pretensiones (http://bit.ly/2LmnUX1). ¡Fin de una Era! (http://bit.ly/2v2t9A1)
La inclinación clintoniana de Edward Luce intentó orillar a Kissinger a fustigar el desempeño de Trump con Putin, lo cual, no tiene nada que ver con la genuina postura en favor de Helsinki del ex secretario de Estado y ex asesor de Seguridad Nacional de Nixon y Ford.
Avezados hacedores de la política internacional y analistas, como el británico Alastair Crooke, consideran que el acercamiento de Trump con Putin tiene como objetivo quebrantar la asociación estratégica de Rusia y China para detener, sino relegar, el irresistible ascenso de Pekín (http://bit.ly/2LoxPeU).
Crooke emite la hipótesis de que Kissinger se encuentra detrás del acercamiento con Putin, lo cual ya había abordado en Bajo la Lupa (http://bit.ly/2v2Fch3), sin que Trump ni Kissinger sean demonios de mi devoción.Pero aquí no hablo de ficticias hagiografías ni de demonologías montadas, sino de un abordaje geoestratégico lo más cercano posible a la realidad.
Twitter: @AlfredoJalifeR_
Facebook: AlfredoJalife

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