EL DELFÍN

Este es un espacio para la difusión de conocimientos sobre Ciencia Política que derivan de la Carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública de la Universidad Nacional Autónoma de México.

sábado, 24 de diciembre de 2022

Mexico SA

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Reforma energética, fracaso total // Sólo 1.02 % de los contratos produce // Tesoro enterrado, propaganda

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▲ El presidente López Obrador dijo que los promotores de los cambios en el sector energético nacional llegaron a decir que íbamos a estar produciendo ahora más de 3 millones de barriles diarios, pura propaganda.Foto Marco Peláez
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e regalo navideño, pero también como cápsula de memoria, el presidente López Obrador restregó en la cara de los neoliberales vendepatrias la realidad de la reforma energética de Enrique Peña Nieto y los cambios que en la materia promovió la administración de Borolaspuras mentiras, pura propaganda, porque sólo tres de los 110 contratos otorgados por gobiernos anteriores (2.7 por ciento del total) están en actividad productiva y apenas extraen alrededor de 20 mil barriles (1.02 por ciento de los actualmente obtenidos). ¿Y a qué destinaron los 107 contratos restantes? A especular en el mercado financiero, con multimillonarias ganancias para los particulares, y ni un solo centavo para la nación.

De ese tamaño es el enorme beneficio por la reforma energética y los cambios calderonistas. Han transcurrido nueve años de la primera y 14 de los segundos –incluido el oneroso bombardeo propagandístico del tesoro enterrado en el fondo del mar– y el balance resulta deprimente: contratistas privados dedicados a la especulación con bienes nacionales, multimillonarias ganancias para ellos, y, a duras penas, una producción de 20 mil pinchurrientos barriles adicionales.

Originalmente (marzo de 2008, la propaganda pagada con dinero de los mexicanos), el tal Borolas y los directivos de Pemex promocionaban que afortunadamente, como lo han hecho otros países del mundo, México puede establecer alianzas con quienes ya cuentan con la tecnología y la experiencia para explotar yacimientos en aguas profundas. Podemos aprovechar ese conocimiento para sacar el petróleo que es nuestro. Sin embargo, poco después (¡todo un misterio!), como por arte de magia, de esa publicidad oficial se mutiló aquello de las alianzas, pues (creyeron los Goebbels de entonces) el término solo podría fortalecer la idea de que la verdadera intención del tesorito era privatizar el petróleo nacional. Cínicos y pendejos, sin duda.

Por cierto, ese bombardeo propagandístico se dio justo cuando el ahora presidente López Obrador denunció, en febrero de 2008, al gachupín Juan Camilo Mouriño Terrazo –a la sazón secretario de Gobernación– por tráfico de influencias y otros delitos cometidos por el angelito de Felipe Calderón, pues obtuvo varios contratos de Petróleos Mexicanos para su empresa familiar cuando ocupaba cargos públicos.

El consorcio del clan –liderado por el gallego Carlos Mouriño Atanes, promotor de la tenebrosa historia de los astilleros españoles– es Grupo Energético del Sureste (también dueño de la empresa de transportes Ivancar, que daba servicio a Pemex), con sede en Campeche (dueño, entre tantas otras cosas, del mayor número de gasolineras en ese estado, más Yucatán, Quintana Roo y Tabasco) y que creció como la espuma cuando su hijo ocupó (obviamente con Borolas) la Oficina de la Presidencia de la República y más adelante la titularidad en Bucareli. Sin embargo, como suele pasar a la hora de procurar justicia, la denuncia quedó en el éter y ocho meses después el angelito murió en un avionazo.

Dicho sea de paso, no pocos ex funcionarios del sector público (Secretaría de Energía, Pemex y CFE), impulsores de la reforma energética peñanietista y los cambios calderonistas, terminaron al servicio ( Borolas uno de ellos) de las empresas privadas beneficiadas.

En fin, ayer en su tierra natal el presidente López Obrador dijo que los promotores de los cambios en el sector energético nacional llegaron a decir que íbamos a estar produciendo ahora más de 3 millones de barriles diarios, que iba a llegar la inversión extranjera a raudales, que iban a bajar el precio de las gasolinas. Puras mentiras. De esos 110 contratos que entregaron sólo tres están en actividad. ¿Y cuánto están extrayendo esas tres empresas? Alrededor de 20 mil barriles, nada, cuando iban a extraer tres millones. Pura propaganda.

Algo más: ¿qué hicieron con los contratos, con las concesiones? Pues se dedicaron a especular en el mercado, en el mundo financiero, y ahí está; sin embargo, nosotros hemos invertido en exploración, en producción, ha aumentado, repito, la producción de petróleo. Y lo hemos hecho en Tabasco, en Chiapas, en Campeche y en Veracruz, y esto ha ayudado también al crecimiento económico del sureste.

Las rebanadas del pastel

Por mucho que lo perfumen y disfracen, el excremento nunca dejará de ser eso. Por ejemplo, Juan Guaidó y sus dueños gringos… Va un fuerte abrazo para la banda, con nuestros mejores deseos. Felices fiestas.

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