Israel
Planes de anexión de Netanyahu
29/06/2020 | Naim Moussa
El 1 de julio es la fecha en que Netanyahu prometió que completaría la anexión de Cisjordania. Mucha gente piensa que se trata de anexar Ramalá, Belén, Jericó y el resto de la región. Pero nada más lejos de la verdad.
Para entender por qué, es suficiente considerar una sola palabra, que representa la mayor amenaza para Israel, incluso más que una guerra con sus vecinos o Irán: la demografía.
De una población total de 9.2 millones de habitantes, 7 millones de personas israelíes son de ciudadanía judía; los casi 2 millones de ciudadanas y ciudadanos palestinos representan aproximadamente el 20% de la población. Sin embargo, ahora resulta que son la principal fuente de irritación para el gobierno israelí. Y como hemos visto en el último año con las tres elecciones [legislativas] celebradas en el país, ejercen una influencia política importante, que el gobierno israelí intenta constantemente neutralizar.
El contexto del juicio de Netanyahu
Si tenemos en cuenta que una minoría del 20% es capaz de hacer esto, entonces imaginemos lo que sucedería si los más de 3 millones de palestinos de Cisjordania fueran absorbidos por la población israelí. Esto significaría que casi la mitad de esta población sería palestina, una perspectiva que sacudiría los cimientos de todos los partidos judíos de Israel. Cuando se sabe que Israel está considerando "intercambios de tierras" para reducir la proporción de palestinos en el país, es simplemente inconcebible imaginar que el gobierno pueda desear la anexión de toda Cisjordania.
Lo que Netanyahu tiene en mente cuando dice que tiene la intención de anexionarse Cisjordania es algo mucho más peligroso. Esto se debe a dos factores. Primero, con un tribunal israelí que convocó a Netanyahu al comienzo de su juicio por corrupción, convirtiéndolo en el primer Primer Ministro en la historia del país en ser acusado de un delito, este último está decidido a cumplir sus promesas incendiarias, racistas y de odio para obtener el apoyo de la opinión pública israelí; por lo tanto, estará en una mejor posición para deslegitimar el juicio, a las y los testigos y cualquier veredicto que le sea desfavorable. En consecuencia, la perspectiva de verle cumplir su promesa de anexión es muy creíble y debe tomarse muy en serio.
Modificar el marco de legalidad
La segunda razón por la cual esta promesa de anexión es más peligrosa de lo que generalmente se percibe es simplemente lo que realmente produciría. Como se ha explicado, Netanyahu no va sencillamente a anexionar toda Cisjordania, lo que sería desastroso para Israel. Más bien, la anexión tomará la forma de la aplicación de la plena soberanía israelí sobre las colonias ilegales en los territorios ocupados. Si tal situación pudiera parecer mejor que la anexión de Jericó o Belén, sus implicaciones son en realidad mucho más extremas.
Las colonias ilegales anexionadas ya no serían, a los ojos del mundo, colonias ilegales. Se convertirían en ciudades, pueblos y comunidades de Israel, como Haifa o Tel Aviv. Y ahí está el problema. Israel completaría finalmente su anexión de Cisjordania construyendo colonias ilegales en tierras robadas e incorporándolas a su propio territorio. Organizaciones internacionales podrían llamarlas colonias ilegales, pero rápidamente tendrían el mismo estatus que Jerusalén Este, e Israel sería libre de hacer allí lo que quisiera, sin temor a ninguna consecuencia proveniente de la Unión Europea o de otra parte.
Lo que Netanyahu intenta hacer es formalizar la anexión de ciertas partes de Cisjordania anexando tierras sin las y los palestinos que viven o vivieron en ellas. Este es el escenario de sus sueños.
03/06/2020
https://npa2009.org/actualite/international/les-projets-dannexion-de-netanyahou
Podéis leer una versión larga de este artículo en inglés en https://mondoweiss.net/2020/05/what-west-bank-annexation-really-means/
Traducción: Faustino Eguberri para viento sur
Para entender por qué, es suficiente considerar una sola palabra, que representa la mayor amenaza para Israel, incluso más que una guerra con sus vecinos o Irán: la demografía.
De una población total de 9.2 millones de habitantes, 7 millones de personas israelíes son de ciudadanía judía; los casi 2 millones de ciudadanas y ciudadanos palestinos representan aproximadamente el 20% de la población. Sin embargo, ahora resulta que son la principal fuente de irritación para el gobierno israelí. Y como hemos visto en el último año con las tres elecciones [legislativas] celebradas en el país, ejercen una influencia política importante, que el gobierno israelí intenta constantemente neutralizar.
El contexto del juicio de Netanyahu
Si tenemos en cuenta que una minoría del 20% es capaz de hacer esto, entonces imaginemos lo que sucedería si los más de 3 millones de palestinos de Cisjordania fueran absorbidos por la población israelí. Esto significaría que casi la mitad de esta población sería palestina, una perspectiva que sacudiría los cimientos de todos los partidos judíos de Israel. Cuando se sabe que Israel está considerando "intercambios de tierras" para reducir la proporción de palestinos en el país, es simplemente inconcebible imaginar que el gobierno pueda desear la anexión de toda Cisjordania.
Lo que Netanyahu tiene en mente cuando dice que tiene la intención de anexionarse Cisjordania es algo mucho más peligroso. Esto se debe a dos factores. Primero, con un tribunal israelí que convocó a Netanyahu al comienzo de su juicio por corrupción, convirtiéndolo en el primer Primer Ministro en la historia del país en ser acusado de un delito, este último está decidido a cumplir sus promesas incendiarias, racistas y de odio para obtener el apoyo de la opinión pública israelí; por lo tanto, estará en una mejor posición para deslegitimar el juicio, a las y los testigos y cualquier veredicto que le sea desfavorable. En consecuencia, la perspectiva de verle cumplir su promesa de anexión es muy creíble y debe tomarse muy en serio.
Modificar el marco de legalidad
La segunda razón por la cual esta promesa de anexión es más peligrosa de lo que generalmente se percibe es simplemente lo que realmente produciría. Como se ha explicado, Netanyahu no va sencillamente a anexionar toda Cisjordania, lo que sería desastroso para Israel. Más bien, la anexión tomará la forma de la aplicación de la plena soberanía israelí sobre las colonias ilegales en los territorios ocupados. Si tal situación pudiera parecer mejor que la anexión de Jericó o Belén, sus implicaciones son en realidad mucho más extremas.
Las colonias ilegales anexionadas ya no serían, a los ojos del mundo, colonias ilegales. Se convertirían en ciudades, pueblos y comunidades de Israel, como Haifa o Tel Aviv. Y ahí está el problema. Israel completaría finalmente su anexión de Cisjordania construyendo colonias ilegales en tierras robadas e incorporándolas a su propio territorio. Organizaciones internacionales podrían llamarlas colonias ilegales, pero rápidamente tendrían el mismo estatus que Jerusalén Este, e Israel sería libre de hacer allí lo que quisiera, sin temor a ninguna consecuencia proveniente de la Unión Europea o de otra parte.
Lo que Netanyahu intenta hacer es formalizar la anexión de ciertas partes de Cisjordania anexando tierras sin las y los palestinos que viven o vivieron en ellas. Este es el escenario de sus sueños.
03/06/2020
https://npa2009.org/actualite/international/les-projets-dannexion-de-netanyahou
Podéis leer una versión larga de este artículo en inglés en https://mondoweiss.net/2020/05/what-west-bank-annexation-really-means/
Traducción: Faustino Eguberri para viento sur
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