EL DELFÍN

Este es un espacio para la difusión de conocimientos sobre Ciencia Política que derivan de la Carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública de la Universidad Nacional Autónoma de México.

lunes, 20 de abril de 2020

Astillero

Astillero
Los hechos de Alatorre y Salinas Pliego // No hacer caso a López-Gatell // AMLO suaviza el tema // Apercibimiento de SG
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▲ LA SANTA DISTANCIA. El papa Francisco y el obispo Josef Bart se saludan en Roma antes de la misa de la Divina Misericordia a oficiarse a puerta cerrada ante las reglas de distanciamiento social.Foto Afp
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sta noche, en el noticiero estelar de Televisión Azteca, el conductor Javier Alatorre Soria deberá dar respuesta política y jurídica al insólito apercibimiento que le ha hecho la Secretaría de Gobernación, a cargo de Olga Sánchez Cordero, para que manifieste públicamente su respeto a las disposiciones sanitarias contenidas en la Declaratoria de Emergencia Sanitaria, sumándose al frente común convocado por la Secretaría de Salud.
Nacido en Navojoa, Sonora, 59 años atrás, Alatorre se ha convertido en el principal personaje periodístico del grupo empresarial noticioso de Ricardo Salinas Pliego, el regiomontano que en julio de 1993 adquirió los canales gubernamentales de televisión 13 y 7, agrupados como Imevisión. La venta fue realizada por la administración de Carlos Salinas de Gortari y la compra tuvo como uno de los aportantes de capital a Raúl Salinas de Gortari. El 4 de julio de 1996, Salinas Pliego aceptó durante una conferencia de prensa: Sí, utilicé 29 millones de dólares de Raúl Salinas para el pago del paquete de medios, pero me los prestó. En 1993 todos admirábamos al presidente Carlos Salinas de Gortari y era una distinción social ser amigo de su hermano (nota de Gustavo Castillo, https://bit.ly/3ct2Ze3).
Algo más: “En el sexenio pasado, un empresario mexicano no estaba a merced de cualquier indicación del ingeniero Raúl Salinas. Pero si se aparecía y decía: ‘Tengo este dinero y quiero que me lo inviertas’, pues muy poca gente le iba a decir que no” (reportaje de Carmen García Bermejo, https://bit.ly/2RQQ5yK). El propio Raúl Salinas de Gortari demandó, 10 años después de aquella operación de compraventa, que Salinas Pliego le devolviera los 29.8 millones de dólares aportados por él.
Televisión Azteca, el conductor Alatorre y el empresario Salinas Pliego entraron en un remolino de polémica a partir de que el pasado viernes el mencionado conductor expresó en el noticiero nocturno: Sus cifras y sus conferencias ya se volvieron irrelevantes. Es más, se lo decimos con todas sus palabras, ya no le haga caso a Hugo López-Gatell. Parte del alegato de Alatorre se fundó en otro aliado perjudicial del obradorismo, el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, quien ese mismo viernes había dicho en una videograbación que el gobierno federal no estaba reflejando adecuadamente las cifras de decesos relacionados con el Covid-19.
El virtual llamado a desobedecer las instrucciones del vocero del equipo médico, encargado de coordinar las políticas federales respecto a este coronavirus, generó un amplio rechazo en las redes sociales. Pero el presidente de la República lo tomó con una suavidad explicativa que contrasta con la acritud desplegada contra otros medios de comunicación. Interpretó las palabras de Alatorre (a quien llamó amigo) como una actitud no bien pensada y una equivocación, defendió que usara su libertad y pidió que no se le linchara.
De esa manera, y a reserva de ver el curso que tome el apercibimiento hecho por Gobernación, pareciera que se mantiene a salvo la alianza política y mediática del empresario Salinas Pliego con el entonces candidato y ahora presidente de México. En ese contexto se produjo la designación de quien era presidente de la Fundación Azteca, Esteban Moctezuma Barragán, como secretario de Educación Pública, de Jorge Mendoza Sánchez (hijo de Jorge Mendoza Garza, priista que ha sido director de información y asuntos públicos del Grupo Salinas) como director de Banobras y de Lilly Téllez como candidata externa a senadora por Morena, además de la utilización del Banco Azteca para hacer llegar recursos asistenciales en todo el país.
No es un asunto menor el llamado de Televisión Azteca a no hacer caso al vocero gubernamental para el delicado tema del coronavirus. Tampoco lo es el mantenimiento en activo de todas las empresas del Grupo Salinas aunque no sean esenciales (ya bajo amago de inspecciones y eventuales clausuras y sanciones) ni el adeudo de miles de millones de pesos en materia fiscal. ¡Hasta mañana!
Twitter: @julioastillero
Facebook: Julio Astillero

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