Petróleo privatizado y expuesto a precios especulativos
Un país soberano pasa por la autonomía energética, combinando matrices fósiles y renovables.
- Opinión
Un país soberano pasa por la autonomía energética, combinando matrices fósiles y renovables (como es el caso del Sistema Eletrobrás, que el gobierno también quiere vender). Los países que tienen problemas en este sentido entran automáticamente en el problema estratégico de la seguridad energética. Así, en todo caso, un Estado sin acceso a fuentes abundantes para al menos abastecer su demanda interna (de consumo, residencial, institucional, infraestructura e industrial) necesita imponer términos de intercambio, en los que nunca será rehén de la energía. suministro. En el caso del petróleo y sus derivados, quienes ocupan una posición más independiente en el Sistema Internacional y pueden desarrollar una gran industria extractora de crudo, o optar por la autosuficiencia en todas las etapas de esta cadena de valor y producción.
También es impresionante cómo se repite la historia. El 17 de marzo de 1951, la empresa que operaba como empresa conjunta de British Petroleum (BP), Anglo Persian Oil Company (APOC), fue nacionalizada por el parlamento iraní. El régimen, en ese momento, era de monarquía parlamentaria, y el surgimiento del Frente Nacional y sus banderas de reformas y mejores condiciones de vida logró crear, en Irán, una mayoría contra la explotación de la entonces principal riqueza del país, sólo por los ingleses. Las instalaciones de APOC, en particular la emblemática Refinería de Abadan (aún la principal del país, ver https://abadan-ref.ir/en/about-us), operaba como "un Estado dentro de un Estado". Después de la nacionalización en 1952, la mano de obra extranjera y los ejecutivos británicos abandonaron el país. Se nacionalizó toda la producción y la categoría petrolera iraní se hizo cargo de la infraestructura instalada y de toda la cadena de valor del petróleo, tanto nacional como extranjera.
La historia repetida es "simple". El entonces 35º Primer Ministro de Irán, Mohammad Mosaddegh, fue derrocado por un golpe militar articulado por la inteligencia estadounidense (CIA) y el Reino Unido (MI6). El “cambio de régimen” tuvo lugar en agosto de 1953. Irán pasó de ser una monarquía parlamentaria a convertirse en un reino absolutista. Además de la represión interna y un sistema de privilegios para acceder a la riqueza del país, APOC obtuvo capital de Golf (luego se fusionó con Standard Oil), Total, Shell y la propia BP. La producción de petróleo era alta y sus precios los marcaba el Consorcio Internacional del Petróleo. De esta manera, la cadena de producción de petróleo iraní se volvió más barata de exportar y cara, muy cara, para el mercado interno y para el suministro nacional. Este hecho solo cambió con la revolución popular de 1979.
Con matices, este patrón se repite a lo largo del siglo XX y, hasta el momento actual, también en el siglo XXI.
Todo está en juego en Petrobras
Brasil sufre un ataque especulativo todos los días, a todos los niveles. Esta mentalidad de los grandes “traders” internacionales ingresó al Directorio de Petrobrás y, en parte, a su cadena de mando. La categoría de petróleo, a través de sus entidades sindicales y la ingeniería de Petrobrás ( http://www.aepet.org.br/w3/index.php/2017-03-29-20-29-03/cartas-da-aepet / item / 5876-nota-sobre-el-despido-de-roberto-castello-blanco-de-la-presidencia-de-petrobras) explica, en detalle, los motivos de la destitución del presidente Roberto Castello Branco y la composición de la alta jerarquía de la empresa. En la gestión del presidente destituido hay tres representantes de los "accionistas minoritarios", incluido un "administrador de fondos". Si bien es una empresa de economía mixta y con la mayoría de votos provenientes del Poder Ejecutivo, con cada gesto de soberanía o incluso llamamiento demagógico, los grupos mediáticos operan como voceros de la especulación financiera que facturan sobre contratos futuros y operaciones bursátiles. Simples así.
La composición de los precios para el mercado interno es uno de los objetivos clave de la toma de poder en la empresa y también está en el corazón de la rendición de nuestra sociedad. El combustible caro no genera popularidad y menos votos. El presidente Jair Bolsonaro, de manera demagógica y torpe (como siempre), “intervino” en la empresa, destituyendo a Castello Branco y emplacando al general (siempre un militar de alto rango; director general de la parte brasileña en Itaipu Binacional). Si no cambia el desmantelamiento de Petrobrás y el costo para que el país funcione con derivados del petróleo, no importa quién será el nuevo presidente. Aun así, el “grito de los comerciantes” fue y sigue siendo enorme, empezando por la denuncia de los portavoces y el parasitismo financiero por la disolución de los cuatro concejales.
Según O Globo, “Petrobras ha perdido cuatro miembros de su Directorio. João Cox Neto, Nivio Ziviani, Paulo Cesar de Souza e Silva y Omar Carneiro da Cunha pidieron dejar los cargos de asesores de la empresa estatal. Los cuatro son nombrados por el gobierno, el accionista controlador de la empresa estatal ”( https://oglobo.globo.com/economia/quatro-membros-do-conselho-da-petrobras-indicados-pelo-governo-deixam -os-cargos- 24906665). No por casualidad, Omar es ex-presidente de Shell y dijo a la Comisión de Bolsa y Valores (CVM) lo siguiente: “por los recientes hechos relacionados con cambios en la alta gerencia de Petrobras, y las posiciones expresadas por el mayor representante de la Así mismo, no me siento en condiciones de aceptar la renovación de mi nombre como Consejero de esta reconocida empresa, en la que tuve el privilegio de desempeñarme en los últimos siete meses "(mismo enlace arriba). economía nacional y, por tabla, contra toda la actividad productiva del país, va más allá. El mismo repartidor afirma que: “se mantuvo apegado a las estrategias debidamente aprobadas, y siguiendo los más altos niveles de gobernanza y cumplimiento de los estatutos de la empresa, y los más altos estándares de gestión empresarial ". Por esta “lógica” no existiría ni la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) ni, menos aún, la autosuficiencia energética en ningún lugar. ¡El planeta entero seguiría siendo rehén de las llamadas Siete Hermanas, los conglomerados petroleros más grandes que crearon un oligopolio dominante durante medio siglo!
Sobre la composición de los precios para el mercado interno, la mentira es sistemática. Los grupos de medios afirman que dependemos de los precios internacionales y siempre colocamos gráficos o indicadores cuya fuente es WTI / USA ( https://br.investing.com/commodities/crude-oil ), contratos de futuros o índice Brent. El WTI es el West Texas Intermediate y se enfoca en los precios cotizados en la Bolsa de Valores de Nueva York, con base en los índices de producción del Golfo de México (la región que los gringos insisten en llamar Golfo de Texas) y la posibilidad de venta futura. Brent ( https://www.ifcmarkets.com.br/market-data/commodities-prices/brent ) es una cotización que se origina en el Mar del Norte, en provincias petroleras donde hubo una mayor incidencia de BP y Shell. Principalmente, el Brent cotiza en la Bolsa de Valores de Londres.
Estos precios no se basan en costos de producción, ni nada directamente relacionado con las complejas operaciones productivas de esta industria. En otras palabras, son precios estimados en base a la especulación del momento. Tiene más. Es un hecho: Brasil no refina todo el volumen de productos derivados del petróleo que consume. Pero ningún medio de comunicación recuerda que el gestor de entregas deja paralizadas las refinerías y sigue vendiendo por menos del precio, tanto en refinerías como en importantes filiales, como empresas y distribuidoras de gas natural.
Para empeorar las cosas, como quien está “comprando” las refinerías a precio de ganga no tiene obligación contractual de reinversión, simplemente puede detener la instalación, comprar petróleo a muy bajo costo de la Península Arábiga y poner los precios absurdos que el Demanda de los “accionistas minoritarios”. El precio pagado por la refinería privatizada se cubre con 100 días de ventas brutas. Es simplemente el ABC de la liberación en Brasil en el siglo XXI.
Es necesario recuperar el control de la economía brasileña
Ningún país es soberano si no controla sus activos estratégicos. Si usted es un productor de petróleo, necesita operar con precios protegidos para el "mercado interno", sobre todo considerando que somos absurdamente dependientes del modal vial. Dependemos del diesel para el transporte de carga y pasajeros, gas de cocina para consumo doméstico y gasolina para vehículos de pasajeros. No hay forma de esperar nada del gobierno actual ni de quienes operaron la rendición con la inflación de precios administrados que comenzó en 2015, así como la crisis política derivada del falso moralismo de Lava Jato y la subordinación absoluta del país. basado en el gobierno ilegítimo de Temer.
Cambiar esta correlación de fuerzas va mucho más allá de las urnas y debe pasar por la conciencia y la organización de los que están en el borde, incluido el precario sector de servicios con el mundo del trabajo “uberizado”. Es un largo camino, cuyo primer paso es defender a las empresas públicas del país como factor de soberanía nacional.
Artículo publicado originalmente en la Revista de Mantenimiento ( https://www.revistamanutencao.com.br/ )
- Bruno Beaklini (Bruno Lima Rocha Beaklini) es politólogo y profesor de relaciones internacionales de origen árabe-brasileño, editor de los canales Strategy & Aná lise.blimarocha@gmail.com | facebook.com/blimarocha
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