México SA
Coneval: mayor pobreza
FC: ¿misión cumplida?
Gasto social, fines políticos
Carlos Fernández-Vega
S
i todos los días la terca realidad y las propias cifras oficiales desmienten a Felipe Calderón y su fatuo discurso, ayer la cereza del pastel fue cortesía del Coneval: en 2012
no se cumplieron las metas para reducir la pobreza en el país, como tampoco las correspondientes a cada uno de los cinco años previos, de tal suerte que entre las terroríficas cuan abundantes herencias negras del inquilino saliente de Los Pinos destaca un mayor número mexicanos en pobreza (alrededor de 15 millones adicionales durante su estancia en la residencia oficial), lo que contrasta diametralmente con uno de tantos discursos pronunciados por el que se va (“trabajamos por la gente más pobre… Misión cumplida, palabra cumplida con hechos”).
Eso dijo, pero lo cierto es que de diciembre de 2006 a igual mes de 2010 el número de mexicanos en pobreza de ingresos se incrementó de 45 a 57 millones (casi 27 por ciento), y para el último bienio del calderonato las estimaciones apuntan a que alrededor de 3 millones más engrosarán el ejército nacional de depauperados, para cerrar el sexenio con un total 60 millones de pobres en el país (15 millones más que al inicio de su gobierno), todo un logro para quien se auto alaba por la
misión cumplida.
Ayer el Coneval divulgó su Informe de evaluación de la política de desarrollo social en México 2012, en el que subraya que el aumento de la pobreza y de la desigualdad, así como la falta de coordinación intergubernamental, son los resultados más evidentes de lo que en Los Pinos alegremente llaman
política de desarrollo social. Sobre el particular, el organismo advierte lo siguiente:
No existe una concepción institucional de lo que significa desarrollo social; las políticas y programas de desarrollo social no están directamente asociadas a derechos; en el caso de la pobreza se han confundido causas con efectos, (y) lo más fácil ha sido atenuar los efectos; ¡se le asigna a una sola secretaría (a nivel federal y estatal) el objetivo de reducir la pobreza!; las áreas ajenas al desarrollo social (las económicas y otros sectores sociales) no tienen como uno de sus objetivos la reducción de la pobreza; en diversos fondos del ramo 33 no es claro el uso que se le da a los recursos en las diferentes entidades; la asignación de recursos del ramo 33 entre entidades no corresponde a la distribución de las carencias; cada año crecen las acciones y programas sociales a nivel estatal y federal, aprovechando los recursos petroleros, con una lógica más política que de resultados; no existen instrumentos eficaces dirigidos a la población vulnerable en áreas urbanas y que, además, puedan activarse frente a crisis coyunturales.
Por si fuera poco, el Coneval subraya:
México continúa siendo un país con alta desigualdad; la desnutrición de niños y niñas indígenas es el doble que la del promedio nacional; las mujeres tienen mucha menor representación en puestos laborales importantes respecto a los hombres; para 2010, la razón de ingreso de 10 por ciento de la población más rica entre el 10 por ciento de la más pobre fue de 25.2 veces; la política fiscal (ingresos y gastos), no fomenta la igualdad; (el programa) Oportunidades no ha tenido un efecto importante en zonas urbanas. Se ha usado como un programa de protección ante coyunturas, pero no lo es. Se le han hecho cambios sin una lógica que preserve su objetivo original. (Además) es necesario incrementar calidad educativa y de salud.
En materia de salud,
existen numerosas instancias que proveen servicios, por lo tanto el sistema de salud es segmentado, descoordinado e incomunicado; no hay portabilidad del acceso; hay diferentes paquetes de beneficios y el gasto por persona es diferenciado por condición de aseguramiento. IMSS e Issste pueden atender el total de intervenciones del Catálogo Universal de Servicios en Salud, mientras el Seguro Popular ofrece una cobertura de 284 intervenciones. Es insuficiente e inequitativa la distribución de infraestructura, equipo y personal entre las entidades federativas; no hay claridad sobre el uso de los recursos provenientes del Seguro Popular que se transfieren a cada entidad federativa; calidad e insumos insuficientes en las clínicas de zonas marginadas; México está lejos de cumplir la Meta del Milenio en Mortalidad Materna en 2015.
Desde Los Pinos se ha intentado imponer la tesis de que los causantes del incremento de la pobreza durante el calderonato fueron la crisis (léase el
catarrito) de 2009 y el alza en los precios de los alimentos, pero deja fuera el hecho de que a lo largo de ese periodo la economía mexicana registró el menor crecimiento en cinco lustros, amén del sostenido cuan veloz avance de la informalidad, los miserables salarios y la constante pérdida de poder adquisitivo y de prestaciones amparadas en la ley. Si a lo anterior se añade la advertencia del Coneval (gasto social con intención política, no de resultados), entonces el resultado es más que obvio.
Sobre el punto anterior, el Coneval señala que “no sólo la crisis financiera coyuntural o el incremento en el precio de los alimentos han sido los responsables de que el ingreso real no sea mayor en México (y de que la pobreza sea elevada), también lo ha sido el lento crecimiento económico de largo plazo que ha marcado la historia económica de México en las últimas tres décadas. Las condiciones de México no podrán mejorarse si no se realizan cambios económicos profundos que propicien el incremento de la productividad, la inversión, la generación de más empleos formales y de mejor calidad, así como el aumento del salario real de manera sistemática y sostenida. De la misma manera, la mejora en otras variables, como la estabilidad de los precios –particularmente de los alimentos– podría redundar en un incremento sostenido del poder adquisitivo del ingreso, al suponer asimismo un mayor dinamismo de los salarios nominales… El ingreso real promedio de 2010 es semejante al de 1992”.
He allí la realidad en la que ni a empujones cabe el discurso de Calderón: “trabajamos por la gente más pobre… Misión cumplida, palabra cumplida con hechos”.
Las rebanadas del pastel
El
nuevo PRItiene entre sus filas al ex alcalde de Acapulco Miguel Añorve (quien dejó al puerto financieramente en pelotas), y sobre él pesa un cúmulo de acusaciones por desvíos, fraudes y robo descarado. Entonces, ¿qué tal si Enrique Peña Nieto arranca su cacareado compromiso anticorrupción con este oscuro personaje?