Economía Moral
Crecimiento rápido y persistencia de la pobreza en la India
La visión de tres destacados observadores de India: Sen, Drèze y Sainath
Julio Boltvinik
Jaipur, IndiaFoto León Boltvinik
E
n un seminario internacional en la Universidad de Delhi escuché la conferencia magistral del muy conocido periodista Palagummi Sainath, que escribe sobre problemas sociales, la vida rural, pobreza y las consecuencias de la globalización en la India. Sus escritos son sumamente críticos del milagro del crecimiento de la India en los últimos 20 años: a partir de las reformas neoliberales que se empezaron a implantar a principios de los años noventa. Una frase implacable que recuerdo (de manera aproximada) de su charla es que la desigualdad nunca había sido tan cínicamente impuesta y tan rudamente y sin misericordia aplicada como en nuestro tiempo. Un dato muy impresionante que proporcionó es que cada 32 minutos se suicida un campesino en la India, lo que él relaciona, correctamente, con la penetración creciente de las trasnacionales en la agricultura, con lo cual está despojando a los campesinos de su modo de reproducción ancestral, su tierra y su agua.
En la introducción y en un apéndice de su libro Everybody loves a good drought. Stories from India’s poorest districts(Penguin, 1996) (
Todos aman una buena sequía. Historias de los distritos más pobres de la India), Sainath describe el método oficial de medición de la pobreza que se adoptó en la India en 1979: en las encuestas de consumo se selecciona el grupo cuyo gasto en alimentos les aporta el requerimiento calórico por persona de 2 mil 400 kilocalorías (kcl) por día el medio rural y 2 mil 100 en el urbano. Nótese que los únicos requerimientos nutricionales son los calóricos, quedando fuera las proteínas, las vitaminas y los minerales (como hierro y calcio). El gasto total per cápitaobservado en este grupo se adopta como la línea de pobreza per cápita. Añade Sainath que
en la canasta de consumo del habitante rural situado en esta línea de pobreza, los rubros de alimentos tienen un peso de alrededor de 70 por ciento(p.445). Es decir, el coeficiente de Engel, E (proporción del gasto en alimentos), es igual a 0.7 en dicho grupo. El nivel de pobreza de hogares con un E de 0.7 es abismal. En México el E nunca ha alcanzado esos niveles. Entre los más pobres es de alrededor de 0.5. Como dice Sainath:
se pueden tener las 2 mil 400 o 2 mil 100 calorías requeridas por día y aun así ser muy pobre(p.ix). Adoptar como norma para medir la pobreza la realidad observada entre los muy pobres, es convertir lo que es (la pobreza abismal) en lo que debe ser (la no pobreza). Sainath narra que en 1989 la Comisión de Planeación estableció un grupo de expertos para revisar esta metodología. Emitió, en 1993, un conjunto de sugerencias de modificación de la metodología que, al aplicarse, elevaban la pobreza de la India en 1987-88 de 237 millones con el viejo método, a 312 millones (39 por ciento de la población). (pp. 444-445). Pero el gobierno sostuvo, basándose en una encuesta posterior (1993-94), que la pobreza afectaba sólo a 19 por ciento; Sainath aclara que, para estos cálculos, el gobierno hizo a un lado las recomendaciones del grupo de expertos y que, extrañamente, el propio gobierno había presentado, nueve meses antes, en la Cumbre Mundial de Desarrollo Social (Copenhague, 1995) el dato de 39.9 por ciento viviendo en pobreza. Añade:
Se trataba, después de todo, de pedir dinero a los donantes. Mientras más pobres, más dinero. Como se aprecia, en la India también el gobierno baja, sin ningún pudor, las cifras de pobreza a su antojo cuando así le conviene. Sainath, al describir el trabajo de campo que le permitió escribir su libro, señala que visitó el medio rural sobre todo fuera de la temporada agrícola y que le surgieron las siguientes preguntas: ¿Qué hacen los pobres en los 200 o 240 días del año en que no hay actividad agrícola en sus áreas? ¿Cómo sobreviven? ¿Cuáles son sus mecanismos para afrontar la situación? ¿Qué clase de trabajos encuentran? Contesta que en la mayor parte de los distritos grandes proporciones de la población simplemente migran después de la cosecha. Con frecuencia llevan a sus familias con ellos. Ya no lo dice pero es visible en las ciudades de India: viven y duermen en la calle, a veces familias completas. Así se aprecia en la foto que acompaña esta entrega, tomada en un lote baldío en una zona de clase alta en Jaipur, capital del estado de Rajasthan, uno de los más pobres de la India.
Cuando Amartya Sen (premio Nobel de economía) ha escrito libros sobre pobreza y desarrollo referidos a la India, o sobre el hambre, lo ha hecho con frecuencia en coautoría con Jean Drèze, economista nacido en Bélgica que reside en India desde 1979 y que ha adquirido la nacionalidad de este país. La obra más reciente de esta pareja de autores es An Uncertain Glory. India and its Contradictions(Penguin, 2013, 432 pp.) (Una gloria incierta. India y sus contradicciones). Es una obra extensa, muy bien escrita, sin tecnicismos, que se puede leer desde varias perspectivas: a) obtener información sobre crecimiento económico y pobreza en India y sobre cómo compara con otros países. b) Conocer las posturas de Dréze y Sen (DyZ) sobre políticas públicas (económica, social, medio ambiente, etcétera); y c) entender cuáles son las posturas prácticas de Sen y así estar en mejores posibilidades de valorar mejor sus obras más teóricas en los campos de la economía y la filosofía. DyZ no aplauden unilateralmente el acelerado crecimiento económico que India ha mostrado en los últimos 20 años y que ha llevado a muchos a calificarla de potencia emergente. Estos son algunos extractos del prefacio que muestran la perspectiva del libro:
“Durante los últimos veinte años la economía de la India lo ha hecho muy bien en términos del crecimiento del PIB (alrededor de 6 por ciento anual en términos reales en los años noventa, aumentando a más de 7 por ciento en el último decenio). India se volvió, entre las economías grandes, la segunda de crecimiento más rápido, superada sólo por China. Para una economía de bajos ingresos que había estado estancada durante siglos de gobierno colonial y que logró lento progreso en las décadas posteriores a la independencia, éste es sin duda un logro mayor... Sin embargo, los logros de rápido crecimiento… deben en última instancia ser juzgados en términos del impacto del crecimiento económico en las vidas y libertades de la gente... Mientras India ha escalado rápidamente la escalera de las tasas de crecimiento económico, se ha quedado rezagada en la de los indicadores sociales, incluso al compararla con muchos países que India ha estado rebasando en crecimiento económico... como Bangladesh. India es el doble de rica en ingreso per cápita que Bangladesh, y sin embargo en términos de muchos indicadores de nivel de vida... Bangladesh no sólo está mejor que India, sino que le lleva una enorme ventaja...La historia del desarrollo mundial ofrece muy pocos ejemplos, si alguno, de una economía creciendo tan rápidamente por tanto tiempo con resultados tan limitados en términos de reducción de carencias humanas” (p. ix; cursivas añadidas).
Los libros citados son útiles para entender la tragedia del capitalismo globalizado, aunque DyS sean más admiradores que críticos de esta globalización.