EL DELFÍN
Este es un espacio para la difusión de conocimientos sobre Ciencia Política que derivan de la Carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública de la Universidad Nacional Autónoma de México.
viernes, 8 de septiembre de 2017
Mexico SA
México SA
Inflación: nivel bíblico
Mayor cota en 16 años
TLCAN: ¿y el éxito?
Carlos Fernández-Vega
Y
a con las maletas dispuestas para mudarse a Basilea, Suiza (en donde ocupará la oficina principal del Banco de Pagos Internacionales), el todavía gobernador del Banco de México insiste en que la inflación tocó techo y que será en 2018, ya no en el presente año, cuando retome un nivel cercano a 3 por ciento. Qué bueno, pero hasta ahora dicho pronóstico –que el doctor catarrito repite desde junio pasado– no ha cuajado.
Por el contrario, mes tras mes la inflación avanza y en agosto pasado alcanzó la cota bíblica del mismísimo diablo: 6.66 por ciento anual, la mayor en los pasados 16 años y 2.4 veces por arriba de la registrada en igual mes de 2016. Lo peor del caso es que, cuando menos hasta ahora, no se vislumbra una mejoría en dicho indicador.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) lo detalló así: el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó en agosto de 2017 un aumento mensual de 0.49 por ciento, así como un incremento anual de 6.66 por ciento (aunque en algunos subíndices el avance fue de dos dígitos, como en los casos de alimentos y bebidas no alcohólicas, y transportes, con 10.57 y 10.61 por ciento, respectivamente, 10 y 176 veces mayor que en el mismo mes de 2016). Los datos comparables para el mismo periodo de 2016 muestran una inflación de 0.28 por ciento mensual y de 2.73 por ciento anual.
Sin embargo, el impacto fue peor en el índice de precios de la canasta básica (la de consumo popular), pues la inflación anualizada se elevó a 7.93 por ciento, contra 1.61 por ciento en igual mes de 2016, de tal suerte que, entre una fecha y otra, la diferencia fue cercana a cinco tantos. En agosto las mayores contribuciones inflacionarias fueron los productos agropecuarios, con un alza de 13.89 por ciento, y los precios de los energéticos (12.72 por ciento), es decir, los que no subirían por la reforma energética.
Por el lado del Índice Nacional de Precios Productor (INPP) total, excluyendo petróleo, registró un aumento de 0.06 por ciento a tasa mensual, alcanzando una variación anual de 5.64 por ciento. En igual mes de 2016 las cifras fueron de 0.33 mensual y de 5.5 anual.
Si de pronósticos fallidos se trata, allí está el caso de los negociadores mexicanos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, aseguró que la segunda ronda temática concluyó exitosamente, pero ahora sale con que lo verdaderamente importante, controversial y delicado para el futuro del acuerdo trilateral se abordará en Canadá, cuando en Ottawa se vuelvan a reunir las comitivas de los tres países. ¿ Ton’s?
¿Y cómo ven los especialistas el tema del TLCAN? El Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) advierte que el acuerdo trilateral no ha significado un factor relevante para el crecimiento de la capacidad productiva de la industria mexicana, aun cuando la apertura comercial ha representado la oportunidad de incrementar las ventas al extranjero; al mismo tiempo, el país ha aumentado el consumo de bienes importados, pues las exportaciones como proporción del PIB representan 28.5 por ciento y las importaciones 33.1 por ciento, con datos de 2016.
Sin embargo, existe un contraste en cuanto a la producción industrial, ya que, por el contrario, la evolución de esta variable ha evidenciado un proceso de desindustrialización en el país, toda vez que la proporción industrial con respecto al PIB cayó de 39 por ciento en 1994 a 32 por ciento en 2016, mientras las manufacturas llegaron a representar 19 por ciento del PIB en 1999, y para 2016 únicamente 16 por ciento. Al mismo tiempo, paradójicamente, el sector externo continúa creciendo vertiginosamente.
Foto
Las acciones en la bolsa de Nueva York tuvieron un cierre mixto tras un moderado repunte tardío; el Dow Jones bajó 0.10 por ciento, el Standard and Poor’s (S&P) 500 cayó 0.01 por ciento, mientras el Nasdaq subió 0.07 por ciento. La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró con un retroceso de 0.53 por ciento en 50 mil 249.12 puntos. El peso se apreció 0.63 por ciento frente al dólar al terminar en 17.68 frente a los 17.79 del día anterior en operaciones de mayoreo. En sucursales bancarias el dólar bajó 15 centavos y descendió de la barrera de las 18 unidades, al cerrar en 17.95 pesosFoto Jesús Villaseca, con información
de Reuters
Lo anterior, anota el IDIC, permite entender el bajo crecimiento de la capacidad productiva en el país, ya que la mayor demanda del extranjero no ha generado la misma proporción de avance en la generación de producción nacional; como ejemplo, las importaciones representan el doble de la proporción de la producción manufacturera con respecto al PIB.
Desde la entrada en vigor del TLCAN la industria mexicana ha incrementado su potencial de producción en 1.8 por ciento en términos anuales, donde el sector de electricidad, agua y gas ha mostrado el mejor desempeño con un crecimiento anual de 4.8, aunque sólo representa 7.1 por ciento del total del sector secundario; después se ubicó el sector de las manufacturas con una tasa anual promedio de 2.5 por ciento, siendo 51.2 por ciento de la industria, mientras la construcción incrementó 1.3 y la minería 0.1, los cuales mantienen 22.4 por ciento y 19.2 por ciento del sector secundario, respectivamente.
En este sentido, la industria de México se encuentra en una situación de vulnerabilidad que exacerba una potencial debilidad ante el proceso de renegociación. Si bien el país ha sido capaz de insertar exitosamente productos en el extranjero, en particular en Estados Unidos, el socio comercial más relevante por tamaño y por el superávit que representa, esto no ha sido acompañado de una industrialización consolidada. Al mismo tiempo se ha incrementado la dependencia de las importaciones, con lo cual México es un país deficitario neto, a pesar de contar con una balanza comercial positiva con la primera potencia del mundo.
De esta manera, independientemente del proceso de renegociación, México debe enfocar su estrategia de globalización hacia un nuevo camino productivo, donde los acuerdos comerciales sean un instrumento para alcanzar más mercados, pero con una base industrial sólida, que permita el fortalecimiento productivo y competitivo del mercado interno, como una plataforma que permita alcanzar mayor crecimiento económico en un mundo cada vez más competitivo.
De hecho, la industria mexicana continúa evidenciando signos de debilidad en su desempeño, pues durante junio pasado por cuarta ocasión en el año se tuvo un resultado negativo con un retroceso de -0.3 por ciento, aun cuando durante el mismo mes de 2016 el avance fue tan solo de 0.6. En el acumulado de lo que va del año la tasa es negativa: -0.3 por ciento. El ciclo industrial se mantiene estancado en su tendencia, en una coyuntura delicada por la renegociación del TLCAN.
Las rebanadas del pastel
Ya regularizado el reparto de territorios y prebendas por el acuerdo que ayer alcanzaron los cárteles de San Lázaro, hoy el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, entrega el paquete económico 2018 (último de EPN), siempre bajo el apotegma de que el negocio es primero.
Twitter: @cafevega
cfvmexico_sa@hotmail.com
Subir al inicio del texto
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario