EL DELFÍN

Este es un espacio para la difusión de conocimientos sobre Ciencia Política que derivan de la Carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública de la Universidad Nacional Autónoma de México.

miércoles, 30 de noviembre de 2016

Trump gano con menos votos gracias al colegio electoral

Trump ganó con menos votos gracias al Colegio Electoral, ¿por qué perdura este sistema? Por JONATHAN MAHLER y STEVE EDER 10 de noviembre de 2016
Hillary Clinton en su discurso de aceptación de la derrota, este miércoles en Manhattan. Clinton obtuvo el voto popular, pero no el electoral. Credit Ruth Fremson/The New York Times Read in English En noviembre de 2000, cuando el recuento de votos de Florida tenía en vilo a Estados Unidos, una senadora demócrata recién electa por Nueva York dejó de lado la celebración por su victoria para abordar la posibilidad de que Al Gore terminara ganando el voto popular pero perdiendo la elección presidencial. Hillary Clinton fue rotunda entonces: “Creo de verdad que en la democracia debemos respetar la voluntad del pueblo, y para mí eso significa que es tiempo de deshacernos del Colegio Electoral y optar por una elección popular para escoger a nuestro presidente”. Deiciséis años después, el Colegio Electoral sigue en pie y Clinton se convirtió en la segunda candidata demócrata a la presidencia (después de Gore) en la historia moderna en ser derrotada por un republicano que obtuvo menos votos (George W. Bush, en el caso de Gore). En su discurso de aceptación de la derrota el miércoles, Clinton no mencionó al voto popular, una omisión que pareció poner por encima su deseo de alentar a una transición del poder civilizada tras esta elección. Pero cuando su compañero de fórmula, Tim Kaine, la presentó dedicó un poco más de tiempo para destacar que los votos totales que recibió Clinton fueron más que los que obtuvo el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump. Esta disparidad dejó un sabor amargo en los demócratas, cuyo partido ganó la elección con el voto popular de la nación por tercera ocasión consecutiva y aun así se quedó sin el control de los poderes del gobierno. “Si de verdad estamos de acuerdo con el concepto de que ‘la mayoría decide’, ¿por qué le negamos entonces a la mayoría el candidato que ha elegido?”, dijo Jennifer M. Granholm, exgobernadora de Michigan. Una pantalla en Times Square muestra el resultado del voto electoral. Credit George Etheredge para The New York Times El mismo Trump ha criticado el Colegio Electoral en el pasado. En la víspera de la elección de 2012, lo calificó en Twitter como “un desastre para la democracia”. Ahora, después de meses de batallar en una elección que tildó de “amañada”, se ha convertido en el beneficiario de un sistema electoral que permite a un candidato ganar la elección sin recibir el apoyo de la mayoría de los votantes. Ninguno de los partidarios de Clinton ha ido tan lejos como para sugerir que el voto popular debería deslegitimar la victoria Trump. El margen del voto popular de la elección presidencial fue mucho más estrecho que el que separó a Bush y Gore en el 2000. Pero los resultados sí han renovado los llamados a una reforma electoral. “En lo personal, me gustaría ver que se elimine el Colegio Electoral por completo”, dijo David Boies, quien representó a Gore en el recuento de Florida en el 2000. “Me parece que es una anomalía histórica”. Quienes defienden al sistema sostienen que así se reducen las posibilidades de recuentos nacionales enormes en carreras muy cerradas, un escenario que Gary L. Gregg II, un experto en el Colegio Electoral en la Universidad de Louisville, dijo que sería una “pesadilla nacional”. Una variedad de factores nutrieron la creación del Colegio Electoral, que reparte un número fijo de votos a cada estado de acuerdo al tamaño de su población. Los padres fundadores buscaban asegurarse de que los habitantes de los estados con una población pequeña no fueran ignorados. Y en una época previa a los medios masivos de comunicación, e incluso a los partidos políticos, les preocupaba que el estadounidense promedio no tuviera información suficiente sobre los candidatos para tomar una decisión inteligente, así los “electores” informados decidirían por ellos. Algunos historiadores destacan el papel crítico que jugó la esclavitud en la formación del sistema. Los delegados del sur que asistieron a la Convención Constitucional de 1787 y James Madison estaban preocupados de que sus electores fueran superados en número por los del norte. Sin embargo, el Compromiso de los Tres Quintos permitía entonces a los estados contar a cada esclavo como tres quintos de una persona, lo suficiente para asegurar una mayoría sureña en las carreras presidenciales. El miércoles, algunas personas en redes sociales hicieron algunas conexiones entre esa historia y lo que ellos percibían como un desequilibrio en el Colegio Electoral que favorece a los republicanos. “El Colegio Electoral siempre inclinará la balanza a favor de los votantes rurales/conservadores/“blancos”/viejos… una concesión a los esclavistas”, tuiteó la escritora Joyce Carol Oates. El Colegio Electoral, para sus críticos, es una reliquia que viola el principio democrático de una persona=un voto, y que distorsiona la campaña presidencial al promover que los candidatos solo se enfoquen en un número relativamente pequeño de estados. “Me parece intolerable para la democracia”, dijo George C. Edwards III, un profesor de Ciencia Política en la Universidad de Texas A&M y autor de un libro sobre el Colegio Electoral. “No puedo pensar en razón alguna [para el Colegio Electoral] y cualquier razón que se ofrezca no soporta el escrutinio”. Pero los llamados a cambiar el sistema —algo que requeriría de una enmienda constitucional—, parecen llegar a oídos sordos de los republicanos, quienes ahora controlan ambas cámaras del congreso. Y aunque con la derrota de Al Gore hubo un momentum para ello, este se disipó después de que Bush y Barack Obama ganaran tanto el voto popular como el electoral en 2004, 2008 y 2012. Algunos estados han discutido una posibilidad que quizá no requeriría de una enmienda constitucional: deshacerse del sistema de “todo para el vencedor”, en el que un solo candidato se queda con todos los votos electorales —sin considerar el voto popular— y, en cambio, contabilizarlos de modo que representen el desglose del voto popular de cada estado. Dos estados, Maine y Nebraska, ya lo hacen. Pero incluso este planteamiento podría enfrentar un desafío constitucional de sus opositores, dijo Laurence H. Tribe, profesor en la Escuela de Derecho de Harvard. Por ahora, cualquier cambio parece seguir siendo una idea lejana. “Estoy muy enojado con James Madison”, dijo el demócrata y exrepresentante de Massachusetts, Barney Frank. “Pero creo que no puedo hacer nada al respecto”.

La candidata: Mexico un pais sin memoria

Pensar en voz alta la justicia y la paz Pietro Ameglio 11 noviembre 2016 1 La candidata: México un país sin memoria
México es un país, en ciertos sectores, sin “memoria activa”, con una gran “memoria fosilizada”, permanentemente impulsada por la clase política y todos los aparatos institucionales a través de continuos homenajes, medallas, monumentos, premios, dedicatorias. El aparato del poder –en toda su variedad institucional- es una permanente máquina de erradicación de la memoria como un problema nacional de verdad y justicia, para trasladarla al ámbito del “recuerdo”, de la simulación o del olvido: Iguala, Tlatlaya, Tanhuato, Apatzingán son los casos más recientes. Eso explica, en parte, mucha de la impunidad e injusticia que nos atraviesa. Profundizando, señalaba muy bien el Dr. Juan Carlos Marín, en la inauguración del Centro de estudios de la memoria y los DDHH en Chile, que “la memoria activa nos exige no sólo reclamar justicia sino también saber más de todo esto (genocidio de la dictadura militar) para no desarmarnos ante lo que no ha dejado de producir injusticias ni nos ha dejado de amenazar”. De lo contrario, estamos colaborando en “ampliar nuestra indefensión ante la amenaza de una reiteración del horror”. De qué otra forma podría explicarse que alguien como Margarita Zavala – la “candidata”- aspire, con mucha fuerza real, a ser presidenta de la república. Para nuestra sociedad resulta ofensiva ya sólo la posibilidad de que pueda siquiera imaginarse que lo sea, pensemos lo que sería si llegara a serlo. Es la esposa de un genocida. Ante ello, surge enseguida, desde el poder, la instalación del “infantilismo social” alegando que ella no es Calderón, que una cosa es lo que hizo su marido y otra lo que hará ella. ¡Qué ingenuidad histórica y sociológica! El genocidio es la acción de muchos sobre pocos, aunque estos sean 65 mil muertos, 20 mil desaparecidos y decenas de miles de desplazados1, que son las cifras con las que su esposo dejó envuelto en un indescriptible dolor al país cuando se fue, en la impunidad total. Por una ingenua y, a propósito, mal construida lectura de la historia creemos que la violencia, de la cual el genocidio es su máxima expresión de inhumanidad, son realizados por unos pocos “desequilibrados” –casi por naturaleza- sobre otras víctimas, pero, en cambio, una lectura más precisa de la operación del orden social nos muestra que para que se realicen acciones violentas, genocidas, es necesaria la participación y articulación de muchos cuerpos sobre pocos. Se trata de una enorme empresa intelectual, judicial, tecnológica, mediática, de redes de complicidades implícitas y explícitas, directas e indirectas, en la que grandes sectores de la sociedad civil participan en múltiples formas y niveles. ¿Quién puede afirmar que Margarita Zavala no sabía lo que sucedía con las víctimas de la tan mal llamada “guerra al narco” –declarada por su esposo apenas subió al poder-, así como de la complicidad e impunidad estatal? Y ¿qué hizo –con fuerza y proporcionalidad- al respecto en aras de la verdad, la justicia, la reparación…la paz? Fuí testigo de múltiples testimonios de los familiares de desaparecidos ante ella, y todo el aparato gubernamental y partidista político, y de la total inoperancia y simulación de éstos. Ella, como una enorme cantidad de actores políticos, y de otras múltiples institucionalidades nacionales, operó a favor de la política de “paz armada” que ha llevado al país actualmente a continuar siendo atravesado –cada vez con mayor intensidad- por una guerra de “exterminio masivo” (más de 105 mil muertos; 32 mil desaparecidos; cientos de miles de desplazados) y “exterminio selectivo” (cientos de activistas sociales, periodistas, defensores de ddhh… de todos los rangos y niveles asesinados o desaparecidos, empezando por los 43 estudiantes de Ayotzinapa). Para colmo de evidencias de esta “continuidad bélica”, en la que la clase política y sus múltiples aliados delictivos han instalado al país y a toda la sociedad, el presidente Peña Nieto acaba de entregar un reconocimiento ¡en mano! a Calderón en los 70 años del ITAM, en un viceversa de cuando Calderón le entregó el reconocimiento al fraude electoral del 2102. a Calderón Por tanto, ¿con base a qué se puede afirmar que ella va a detener esta guerra de exterminio contra la población y los pueblos-comunidades mexicanos, si fue parte de estas decisiones en el sexenio de su marido que potenció esta nueva etapa de la guerra en México, si ha estado totalmente callada en la intensificación de esta guerra en el actual sexenio? Pura ilusión, sin ninguna esperanza real. Reitero, resulta inverosímil para la memoria y dignidad de toda la sociedad mexicana, y especialmente para los familiares de víctimas de la actual guerra, que se pueda siquiera llegar a plantear la posibilidad que ella sea presidenciable. Duele, entonces, observar el nivel de “normalización de la guerra”, de la impunidad y violencia que tiene la clase política –que lucra en todo sentido con ella-, pero sorprende más todavía esa “normalización” en la sociedad civil pues no se han levantado voces claras y fuertes públicas contra esta candidatura vergonzosa, en el sentido de su papel central en la guerra que nos atraviesa y hacia las cientos de miles de víctimas. Pero sí, en cambio, es tema de gran “polémica nacional” el que el CNI (y el EZLN como parte de él) se hayan atrevido a lanzar una consulta a sus bases, acerca de la posibilidad de presentar en las elecciones presidenciales del 18 a una candidata mujer e indígena. Como si no fuera legal y legítimo que una organización social tuviera ese derecho. Pero lo que más queda al desnudo es la “doble moral” social que, por un lado, esgrime todo tipo de argumentos acerca de la “falta de memoria del EZ” respecto a sus declaraciones y acciones pasadas, y, por otro lado, tienen una des-memoria total con la política genocida que el esposo de Margarita Zavala –y ella directa e indirectamente- instalaron en el país hace 10 años y que han llevado a un nivel de descomposición social, delito organizado y muerte como nunca antes se había vivido en el México. Como señala el Equipo Bourbaki (2016), lo que ofrece la candidatura del CNI “es una salida real a quienes ya no creen en este sistema político y que tampoco buscan ya su representación ciudadana, en concreto para estas elecciones federales, pero expresarían de esta manera su anuencia a la candidata propuesta por los pueblos originarios, en donde han construido el ‘mandar obedeciendo’ como forma y ejercicio de gobierno…la sola presencia de un Consejo indígena de gobierno y una mujer que lo represente, altera los ‘usos y costumbres’ del sistema electoral, lo evidencia en su crisis y en el apego a esos procedimientos de la simulación permanente de lo legítimo”. Nos parece, como decíamos al inicio, que no es posible en México seguir postergando una lucha clara y decidida por la verdad, la justicia y y la reparación en esta guerra que nos han impuesto y cuyo costo es brutal y de grados de inhumanidad similares a los peores territorios de violencia mundiales, especialmente para la sociedad civil en todas sus clases sociales. Por ello, perder la capacidad de una “memoria activa”, es perder el respecto a la dignidad de la lucha de cientos de miles de víctimas en todo el país, es renunciar a la posibilidad de “¡Parar la guerra!”. Como sociedad civil: ¿Vamos a co-operar en prolongar otros 6 años la guerra en que nos han metido, sin la mínima consulta ni legitimidad, funcional sólo a sus inmorales negocios? ¿Para cuándo un “¡Ya basta!”, un “Hasta la madre” o “¡Que se vayan (casi) todos (los políticos)” más decidido? ¿Estamos para aguantar 18 años ininterrumpidos de guerra cada vez más violenta y creciente? Pietro Ameglio 1 Cifras del sexenio de Calderón tomadas de Aristegui Noticias, Animal Político y el Semanario Zeta.

Sobre la propuesta electoral del EZLN

Massimo Modonesi 14 noviembre 2016 0 Sobre la propuesta electoral del EZLN
Antes de criticar aspectos, formas y alcances de la propuesta del EZLN de someter a consulta, en las comunidades que adhieren al Congreso Nacional Indígena (CNI), la propuesta de conformar un Concejo indígena de gobierno e impulsar una candidata indígena en las elecciones presidenciales de 2018, hay que respetar su derecho a lanzar iniciativas políticas incluso en el terreno electoral, un ámbito que habían reprobado en anteriores coyunturas. Es evidente que no se trata de un giro electoralista de los zapatistas -aunque circule esta tesis simplista- tanto porque sus posturas frente a las elecciones nunca fueron doctrinarias sino políticas, de evaluación del contexto y de las opciones en disputa, incluida la decisión de la Otra campaña –lanzada en paralelo pero con intencional timing electoral- como porque la propuesta actual, a reserva de saber más de sus formas y contenidos, se plantea como una incursión electoral desde afuera y en contra del sistema de partidos y de las instituciones estatales. Además del debido respeto frente a legítimas iniciativas desde abajo, hay que valorar que los zapatistas se proponen volver a impulsar acciones de organización y movilización a nivel nacional, cuando habían abandonado este terreno después del repliegue de la Otra campaña en 2006. Dicho esto, esta sorpresiva propuesta suscita varias interrogantes y consideraciones críticas. Es sabido, y se ha verificado desde que se hizo pública, que el terreno pre-electoral y se presta a debates ásperos y generalmente de bajo nivel, así que una incursión en este terreno implica sumergirse, quiérase o no, en el bajo mundo de la que Gramsci denominaba la “pequeña política”. Por otra parte, la tónica de la Otra campaña en 2006, la estela que dejó así como las alusiones que acompañaron la presentación de la propuesta y los comunicados que le siguieron, apuntan a que esta Nueva Otra Campaña estará condimentada de ataques a AMLO y MORENA, con todas las consecuencias y tensiones ya mencionadas. Porque aquí reaparece el punto de la discordia del proceso electoral de 2006, cuando los ataques a AMLO –el “huevo de la serpiente”- vulneraron la convivencia de distintas sensibilidades y orientaciones políticas en el campo popular mexicano. Porque, aun cuando MORENA sea un partido que hereda muchos vicios del PRD, con rasgos conservadores y populistas inaceptables desde una postura anticapitalista, tiene genuinas raíces nacional-populares, cuenta entre sus filas militantes de base, dirigentes e intelectuales honestos y comprometidos y, a pesar de su perfil intrasistémico y sus vicios internos, no deja todavía de tener rasgos progresistas, nacionalistas y plebeyos que no pueden ser asimilados a las derechas mexicanas bajo el fórmula de “son todos iguales”. Prueba de ello: varios entre sus militantes y dirigentes ha sido asesinados por razones políticas a lo largo de estos años. En el contexto de la tendencia a la derechización que recorre el mundo y se asienta en nuestro norte y nuestro sur no se puede simplificar excesivamente el análisis para fines de propaganda de corto plazo sin correr el riesgo de generar distorsiones duraderas en los procesos de educación y formación política. El carácter contradictorio constitutivo de MORENA, a la par de otros movimientos de tipo populista en América latina, el desgaste relativo de la figura de AMLO y, al mismo tiempo, su indiscutible arraigo son nudos problemáticos del panorama actual de la izquierda mexicana, al cual se agrega ahora el giro electoral y la propuesta de una nueva otra campaña del EZLN, configurando un escenario propicio no sólo para la polarización, sino también la confusión y el extravío de sentidos políticos y de energías militantes. Eppur si muove, podríamos decir, haciendo gala de optimismo de la voluntad, en un país que parece haber tocado fondo. A más de un año de distancia de los comicios, en un país en donde los años electorales reservan sorpresas –fraudes (1988 y 2006), asesinatos de candidatos (1994), levantamientos armados (1994), movilizaciones masivas espontáneas (1988, 2006 y 2012)- no queda claro si la candidatura de AMLO tendrá la fuerza para competir con las de las derechas y concentrar los votos de oposición, cuando se anuncia una candidatura del PRD (¿Mancera?) y pueden surgir otros candidatos independientes de distinto tipo y color. Esto es relevante en tanto muchos electores de izquierda podrán encontrarse ante la disyuntiva de otorgar un voto útil, tapándose la nariz, por AMLO, si es que tiene realmente la posibilidad de ganar, o un voto identitario por una candidata indígena u otras eventuales candidaturas independientes de izquierda. A pesar de todas las limitaciones y de eventuales aspectos siniestros ya instalados en el proyecto y la estructura organizacional de MORENA, una llegada de AMLO a la Presidencia de la República implicaría evitar en México la continuidad o la profundización de la derechización neoliberal y autoritaria, con el degrado institucional y social que la caracteriza y podría significar un cambio político similar al que, bien que mal, significaron los llamados gobiernos progresistas en América Latina, con todas las críticas y la oposición de izquierda que se merecieron y se merecen los que sigue en pié. Y aquí aparece el otro punto problemático de la propuesta zapatista. ¿En qué medida está orientada o tiende objetivamente a fortalecer y articular un polo a la izquierda de MORENA, potenciando la izquierda antagonista y anticapitalista que tiene en México expresiones difusas, núcleos militantes, cierto recambio generacional y una galaxia de organizaciones sociales y políticas de distinto tamaño y espesor? ¿Están invitando a participar a personas y organizaciones anticapitalistas o se trata de una campaña estrictamente indígena o zapatista? ¿Van a aceptar apoyo crítico de otros anticapitalistas no indígenas? Ojalá me equivoque y se instale un circulo virtuoso alrededor de esta propuesta en términos de configurar de un polo de una izquierda radical, con arraigo social, capacidad de movilización y dinámicas incluyentes. Sin embargo, el desmembramiento y la involución sectaria de la Otra campaña desde 2006 sin duda pesan en términos tanto de la disposición del EZLN a impulsar iniciativas federativas en el campo anticapitalista como de su capacidad de convocatoria, que se vio mermada por aquella experiencia. Hace tiempo que el EZLN dio un giro “abajo y a la izquierda”, entendiendo por abajo fundamentalmente las bases zapatistas, en primer lugar las comunidades zapatistas –cuya resistencia y capacidad de autodeterminación es sin duda ejemplar- y por izquierda un anticapitalismo radicalmente adverso a la izquierda institucional tanto socialdemócrata como nacional-popular. Entonces lo que se podría festejar, el regreso del EZLN al terreno de la lucha política nacional, puede revelarse una incursión desde un lugar y una lógica restringida y particular, aunque no deje de tener el alcance universal que le confieren lo indígena y, ni hablar, lo femenino, como referencias identitarias pero también clasistas. Una movilización indígena anticapitalista tiene sentido y puede fortalecer este sector tan golpeado no sólo en el pasado remoto sino en la coyuntura del despojo intensivo del extractivismo que surca dramáticamente el territorio mexicano. Impulsar y proyectar su organización por medio de una campaña electoral es una apuesta válida aún cuando hay que considerar el desgaste que esto implica. Las elecciones han sido, en la historia del movimiento socialista revolucionario, consideradas una oportunidad de agitación y propaganda, así como de representación “subversiva” al interior de las instituciones burguesas. Al mismo tiempo, la oportunidad de alcanzar una visibilidad muchas veces encubría la dificultad o incapacidad de construir e impulsar organización y movilización en tiempos “normales” y, por otra parte, la participación implicaba un reconocimiento implícito de las reglas del juego de la democracia burguesa. Ambas cuestiones rondan la propuesta del EZLN, que parece esencialmente “defensiva” respecto de la situación de debilidad y de agresión que viven las comunidades y el movimiento indígena -del que el CNI es sólo una parte- y, por otro lado, si se enmarca en el procedimiento electoral oficial, comporta una serie de cuestiones legales que obligarán a aceptar una supervisión de las instituciones electorales, así como el ejercicio del financiamiento público y su fiscalización. No deja de asomarse en el horizonte el espectro de la circularidad propia del electoralismo, donde el huevo de la organización, movilización y fortalecimiento político y la gallina de los resultados electorales y la conquista de espacios de representación se retroalimentan y se vuelven una sola cosa. Así que de las cuatro componentes de la propuesta que está siendo evaluada por las comunidades adherentes al CNI –electoral, indígena, anticapitalista y femenina- la única que no resulta problemática es la de que la candidata sea una mujer, en el contexto de un país donde impera la violencia de género y hace estragos el feminicidio: una campaña encabezada por una mujer indígena, cuyo perfil no sólo étnico sino de clase marca un desafío que merece respeto y atención. massimomodonesi.net

¿Que fascismo es el de Estados Unidos?

Hermann Bellinghausen 19 noviembre 2016 0 ¿Qué fascismo es el de Estados Unidos?
El problema no es lo que quiera o prometa Donald Trump, inminente presidente de Estados Unidos, sino qué pretendan hacer (seguir haciendo) los titiriteros que le mueven los hilos. Ya vimos cuánto prometió el buen hablador Barak Obama, obteniendo votos y esperanzas como nadie, y a la mera hora todo quedó en veremos (y lo que no, como el “Obamacare”, va pa’trás de volada). ¿Ganó ahora una forma de fascismo las elecciones en EU? Sí, definitivamente. ¿Podrá implantarlo el empresario del peluquín y gobernar así país y mundo? Habrá que ver. No descontemos que un número significativo de personas se interponga como lo hacen, también ahora, los que respaldan la resistencia siux en Standing Rock contra el ya emblemático oleoducto Dakota Access. O los cientos de miles (reflejo de millones) de personas, muy jóvenes la mayoría, que inundan calles, parques, plazas empresariales y gubernamentales, campuses y redes sociales con su “No es mi presidente” aunque desgraciadamente lo será el nuevo hablador, eso que ni qué. No es Hitler, decimos con sensatez. Ni Mussolini. Okey. Pero los estadunidenses tienen derecho a inventar y madurar su propio fascismo modelo siglo XXI. Llevan décadas cultivándolo, a la sombra de lo que el tiempo confinó, conformista, en lo “políticamente incorrecto”, así que la única sorpresa es que ocupará la Casa Blanca y ¿hará de los bushitas blancas palomitas? En aquel gobierno republicano que inauguró el milenio anidaba el verdadero huevo de la serpiente, y su estirpe era nazi: los Bush, los Walker, Rumsfeld, Rove. En su propio país avanzaron poco, pareciera: más control de la población, vigilancia extrema y cesión de derechos ciudadanos y hasta humanos, avalada por la paranoia colectiva y un montón de mentiras repetidas mil veces, como aconsejaba Goebbels. Pero la gente aguantó. Parece improbable que Trump, llegando al cargo, se ponga a perseguir opositores, como ocurrió en 1933 en Alemania. Pero a la manera de los nazis, los trumpianos se impusieron en los comicios con el respaldo directo y militante de las policías y los generales más cansados, como Hindenburg para Hitler. En un país patológicamente armado como EU, los policías ya no serán un instrumento del poder, sino el poder mismo, llámese Giuliani, Arpaio o lo que sea. Y si las protestas e inconformidades impiden avanzar al proyecto de Trump, bueno, instalado está el aparato de castigo. ¿Ya no será necesario ser negro, latino, musulmán o indio nativo para que vayan sobre ti, militante universitario, enfadosa feminista o ambientalista desbocado, para que te caigan y encarcelen? En Estados Unidos no existen campos de concentración pero qué tal cárceles y campos de internamiento, legalísimos y, como negocio, boyantes. (No hablemos del modelo Guantánamo de la rama internacional del Estado policía). Una vez instaladas la mentira y la razón egoísta del supremacismo racial y religioso en la lógica de los ciudadanos que “ganaron” con Trump, es impredecible qué derrotero tome. El macartismo se dio contra blancos, y Nixon trató pero no pudo eliminar a los hippies. El nuevo supremacismo moralista cuenta con bases definidas. Milicias, congregaciones, KKK, bikers agresivos y toda clase de loquitos hoy reivindicados. Millones de buenas familias con Dios de su lado y con el sueño compartido de “Hacer grande Amérika otra vez”. Nada nuevo bajo el sol, pero todo junto y de golpe no es más de lo mismo, con perdón. Con la cobardía histórica del partido Demócrata, que en ésta les costó la elección presidencial y la pérdida completa de los poderes legislativo y judicial, poco se puede esperar de ellos. No resistirán, se adaptarán. Las cúpulas, las industrias, la tecnología, la academia liberal querrán volver a lo normal. Sólo que lo normal se evaporó el 11-9. Los medios masivos no tienen buenas cuentas que dar, lo mismo en 2002 que en 2016. De hecho, tirios y troyanos entronizaron a Trump. Y todo por vender.Qué diferencia a Alemania en Polonia o la Unión Soviética de Estados Unidos en Irak y Afganistán: nada. Pregúntenles a los que sobrevivieron. Para el mundo, el nuevo programa de gobierno estadunidense representa una amenaza de grandes proporciones. Ya lo resumió Noam Chomsky ante el cúmulo de evidencias: “El partido Republicano es la organización política más peligrosa de la historia de la humanidad”. Uno ya no sabe si escuchar con nostalgia atrasada o con precavida esperanza la canción “Democracia” de Leonard Cohen, quien se mira in this hopeles little screen y expresa la muy moderada demanda de que persista la “nave del Estado” (https://www.youtube.com/watch?v=ltxgSePnmTU). ¿Será que venga la democracia a Estados Unidos, “cuna de lo peor y lo mejor” como cantaba el poeta recién fallecido? Eso depende de la resistencia de su pueblo tan diverso. Qué intentará el Estado ahora, estamos por verlo. Cómo se opondrán los ciudadanos inconformes, también veremos. Pero de éstos depende que deveras haya libertades y no muros, migrantes y no (más) redadas, cuidado de la Madre Tierra y no brutos con maquinaria pesada ni con biológicos de largo veneno. Que las mujeres no sean coños que agarrar ni los morenos “violadores, ladrones, asesinos” por deportar, mientras los violadores blancos se ligan a las misses. Que la religión sea lo de menos y no lo de más (algo muy difícil en ese país). Que el odio de los de “cuello colorado” se quede en sus garages. Que los policías dejen de matar negros con ánimos de “limpieza social”, o sea étnica. En fin. Por ahora estamos todos en peligro. Y peor en México, con estos gobiernos pusilánimes, profundamente colonizados, obedientes, corruptos, y de tan bajo precio que ya quedaron a deber. El problema no es que nos invadan los del norte, sino que dejen de hacerlo. Y de eso, en el horizonte no se ve indicio alguno.

Mexico SA

México SA Cuba y su economía Limitada, pero bien ¿Cambios mayores? Carlos Fernández-Vega
C on la muerte de Fidel Castro los eternos opositores de Cuba esperan que la economía isleña colapse y facilite las cosas. Sin embargo, a lo largo de la última década el gobierno de ese país ha tomado una serie de medidas con el fin no sólo de proteger lo construido –en el área social, especialmente– sino para incrementarlo de forma sostenida y encontrar rutas alternas para que ello suceda, sin alterar su concepto de nación. Con todo, en esos diez años –desde la separación provisional (2006) y después definitiva (2008) de Fidel como presidente del Consejo de Estado y de Ministros–, la economía cubana no ha dejado de crecer (algunos años más que otros) y en ese periodo el promedio anual ha sido de 3 por ciento (en el mismo lapso la media mexicana a duras penas llegó a 2 por ciento), de acuerdo con la información de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Cierto es que para Cuba 2016 no será un año particularmente bueno en términos económicos (en 2015 creció 4.3 por ciento y en el presente se espera uno por ciento), pero las inversiones autorizadas de tiempo atrás han madurado y comienzan a dar resultados positivos, amén de que otros sectores se han abierto para permitir capitales que no sean los del Estado. Para los analistas de la Cepal, el descenso en la dinámica del crecimiento cubano respecto al registrado en 2015 se explica fundamentalmente por tensiones en la disponibilidad de divisas, a lo que contribuyen las previsiones a la baja en los precios de varios de sus productos exportables, como el níquel y el azúcar. Otro factor negativo es la reducción en los envíos de combustibles por parte de Venezuela, que ha obligado al gobierno de la isla a anunciar medidas de racionamiento energético para el segundo semestre del año (el consumo de electricidad a nivel nacional, por ejemplo, disminuirá 6 por ciento). En 2016, de acuerdo con las estimaciones de la citada comisión, los sectores con mayores crecimientos positivos y dinámicos serán la construcción (13.4 por ciento), hoteles y restaurantes (11.2), y agricultura, ganadería y silvicultura (5.9). En sentido contrario, decrecerá la producción del sector de explotación de minas y canteras y de la industria manufacturera. A lo largo del presente año el gobierno cubano previó inversiones por cerca de 8 mil millones de pesos (la mayoría con financiamiento externo). Sin embargo, tal monto finalmente podría reducirse a 6 mil 500 millones. En sentido contrario, se espera que los ingresos por turismo y remesas mantengan su tendencia positiva y reporten un crecimiento mayor a 11 por ciento. Dice la Cepal que el gobierno de Cuba reconoce la dificultad de dinamizar de manera sostenible el crecimiento económico si no se incrementan los niveles de inversión (la inversión bruta interna como proporción del PIB ronda el 13 por ciento). Por ello, en 2014 aprobó la nueva Ley de Inversión Extranjera. Al mismo tiempo, para atraer capitales extranjeros trabaja, desde 2010, en un conjunto de medidas orientadas al saneamiento de las finanzas externas del país, en particular las encaminadas a lograr el reordenamiento de la deuda externa. A causa de ello se ha incrementado gradualmente la llegada de inversiones a Cuba. En el segundo semestre de 2016 habrían iniciado 47 proyectos de inversión fuera y dentro de la Zona Especial de Desarrollo Mariel (creada en 2013), con inversiones provenientes de diversos países como Australia, Brasil, Canadá, China, México, Vietnam y varias naciones europeas. Destaca también la inversión de la compañía estadunidense Starwood Hotels, en asociación con las cubanas Gaviota y Gran Caribe (la primera de su tipo desde 1959), para la administración y construcción de hoteles en la isla. Desde 2014 el gobierno cubano dio a conocer una ambiciosa cartera de inversiones con proyectos específicos en distintos sectores de la economía, que se renueva anualmente. Ahora cuenta con 326 proyectos (de una cifra inicial de 246) para que los inversionistas extranjeros seleccionen a qué sector destinarán sus capitales, aunque las inversiones no están restringidas a esa cartera. Entre los nuevos proyectos se encuentran involucrados los sectores de salud, turismo y transporte (astilleros), construcción y materiales de construcción, industria ligera y sideromecánica e industria alimentaria y audiovisual. A raíz del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, en diciembre de 2014, y de la visita de Obama a la isla, en marzo de 2016, se ha iniciado el levantamiento gradual de algunas restricciones en viajes, telecomunicaciones, servicios financieros, remesas y aviación, entre otras (o se han flexibilizado los requisitos), apunta la Cepal. Sin embargo, dice, la realidad indica que en la práctica varias de las medidas anunciadas aún no han podido implementarse. Un ejemplo es la autorización para que Cuba pueda usar el dólar en las tran- sacciones internacionales. De esta manera, si bien el gobierno estadunidense anunció que era posible utilizar dólares en las operaciones con el exterior, a través de bancos de terceros países, la realidad es que la nación caribeña no ha podido realizar ninguna operación bancaria con esta moneda, pues los bancos extranjeros continúan mostrándose temerosos ante la posibilidad de recibir multas multimillonarias por procesar transacciones isleñas. Tampoco se permite a los bancos cubanos establecer relaciones de corresponsalía con instituciones financieras de Estados Unidos. Las pocas inversiones estadunidenses que se han anunciado han sido autorizadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos, tras una revisión caso por caso. El cumplimiento del servicio de la deuda externa y el hecho de que Cuba no sea miembro de las instituciones financieras internacionales, detalla el organismo especializado, han obligado al país a que su balance en cuenta corriente como proporción del PIB se haya mantenido en los últimos años en un superávit de alrededor de 1.5 por ciento. Si bien Cuba presenta un déficit estructural en la balanza comercial de bienes, este se compensa con creces con el superávit en la balanza comercial de servicios. Las rebanadas del pastel Ese es el panorama, y si bien Cuba va, dos elementos podrían complicar la situación: el salvaje de Donald Trump y una mayor reducción de los envíos petroleros venezolanos. Twitter: @cafe-vega D.R.: cfvmexico_sa@hotmail.com Subir al inicio del texto

Dinero

Dinero Cervantes no será fiscal Absolvieron a Anaya y Moreno Valle Los mejores estados para hacer negocios Enrique Galván Ochoa
T antas idas y venidas, vueltas y revueltas… no hallan cómo no combatir la corrupción, aunque quieren dar la impresión de que sí lo están haciendo. Primero intentaron dejar al procurador general de Justicia, Raúl Cervantes, como fiscal transexenal –es amigo de los amigos–, pero se alzaron demasiadas voces en contra. Su pasado no lo ayuda. Así que el presidente Enrique Peña Nieto tuvo que enviar una iniciativa de ley para que cuando el Senado nombre al susodicho fiscal no necesariamente sea Cervantes, aunque se tomará en cuenta entre los candidatos. El fiscal será tan importante en la vida del país que debería ser designado no por el Presidente ni por el Senado, sino por voto popular. A tanto no llegan. Por lo pronto, su designación se movió hasta el año próximo. Y le siguen dando vueltas a cómo hacerle para no combatir la corrupción. Anaya y Moreno Valle Ante todo, cuidar la chamba y el aguinaldo –se acerca la Moche Buena–. Así que los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación no tuvieron reparo en absolver al dirigente del PAN, Ricardo Anaya, acusado de promocionar su imagen en radio y televisión. Según esto, el contenido de los espots, en los que Anaya critica al PRI y al presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, no vulnera el principio de equidad ni se trata de promoción personalizada. Cada uno de los magistrados tiene un ingreso anual bruto de 6 millones 766 mil 428 pesos, así que se esmeran, no van a reñir con los dirigentes de los partidos. Por otro lado, los magistrados de la sala regional especializada del Tribunal Electoral resolvió tampoco sancionar al gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, quien anda en precampaña por distintos rumbos de la República. En opinión de los magistrados, los mensajes del aspirante a la Presidencia son en beneficio del derecho de información de la ciudadanía (literal) y forman parte del debate público. De dónde proviene el dinero para costear la campaña no fue tema relevante para los señores encargados de aplicar la ley. Distintos Méxicos ¿Cuáles son las mejores entidades para hacer negocios? La Ciudad de México, Aguascalientes y Nuevo León lideran el índice de competitividad estatal 2016 del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco). Les siguen Colima y Querétaro, completando el quinteto de entidades donde existe la mayor productividad a escala nacional y el más sostenido desarrollo. La medición se compone por 100 indicadores que se traducen en bienestar y economía sana, a través de más empleos formales e inversión extranjera. Valentín Diez Morodo, presidente del consejo directivo del Imco, afirma que dentro del país existen distintos Méxicos, debido a las asimetrías en competitividad entre los estados. De acuerdo con el ICE, Guerrero, Oaxaca y Chiapas son los menos competitivos. El dólar y el salario mínimo El salario mínimo actual es de 73.04 pesos diarios, corresponde a un ingreso mensual de 2 mil 191 pesos con 20 centavos. Ha tenido un incremento en lo que va del sexenio de 2.67 pesos promedio al año. De 2012 a la fecha, los miniaumentos suman 10.71 pesos.En términos porcentuales, 17.18 por ciento. La Comisión Nacional de los Salarios Mínimos debe definir este diciembre el aplicable a todo el país durante 2017. Salario que debería cubrir la satisfacción de necesidades básicas materiales, sociales y culturales de una familia (imposible). En contrapartida, el dólar se ha disparado 62 por ciento. Dicen que la inflación está más o menos controlada. Todos sabemos que no es así. Ombudsman social Asunto: nos van a dejar sin gota Así el saqueo a Pemex. Por lo menos deberían devolver con intereses y ganancias la parte que corresponde a cada persona que contribuyó durante el proceso de expropiación petrolera, porque hasta el que aportó una gallina tiene más derecho a disponer del patrimonio nacional que estos sujetos. Almita Ayala/vía Facebook R: Ayer se publicó que también van a vender los ductos. Es el desmantelamiento. Twitteratti El dólar no tendría ese precio si el secretario de Hacienda fuera José Yves Limantour. Porfirio Díaz Mori @DonPorfirioDiaz ¿Y las minas, apá? ¿Y los servicios: agua, luz, basura, etc? Están PRIvatizando ¡hasta los pagos del gobierno! Martín Félix Pullin @buchinichi La vida es como andar en bicicleta. Para mantener el equilibrio debes mantenerte en movimiento. María Ramírez @mmrraammiirreez Twitter: @galvanochoa Facebook: @galvanochoa galvanochoa@gmail.com • Foro: http://elforomexico.com/encuestas/ Subir al inicio del texto

Bajo la lupa

Bajo la Lupa Orígenes del trumpismo desde el siglo XVII y su Estado supremacista blanco del siglo XXI Alfredo Jalife-Rahme
N o fue el fin de la historia de Fukuyama ni el fin de su histeria propagandística, a sueldo del Departamento de Estado, donde fue empleado. La maligna propaganda suele fenecer ante el pensamiento crítico cartesiano/kantiano –quintaesencia de la sindéresis occidental– y el juicio de realidad: suprema herramienta de la salud mental. La globalización financierista, transmutada en ciberalquimia, hoy sucumbe a los ciclos y reajustes económicos/demográficos de los fallidos experimentos de ingeniería social que marginaron a 99 por ciento de la población mundial, cuya mayoría todavía vota en el ambiente de una simulación de democracia teledirigida (en el doble sentido). La globalización financierista se esfuma en los dos centros de su perniciosa creación por el binomio Thatcher/Reagan que empieza a ser erradicado en su epicentro por el Brexit y el trumpismo: repliegue de EU de sus aventuras bélicas/económicas globales, que hoy se encapsula en su núcleo primigenio (https://goo.gl/M4aGvs) de un Estado supremacista Wasp (White Anglo Saxon Protestant). Lejos de los arrebatos pasionales, en términos comparativamente racionales, no existe distinción alguna entre la consolidación del Estado apartheid/racista/paria de Israel, de hegemonía monorreligiosa/racial impuesta en su Constitución –68 años después de su creación, gracias a los apoyos de los banqueros sionistas ingleses– con los amagos del Estado blanco anglosajón, donde los mexicanos serían el equivalente de los expulsados palestinos de su tierra original (https://goo.gl/e0wGib), como aboga el gran aliado de Trump, el primer ministro Bibi Netanyahu, desde hace 23 años, en su libro ultrarracista Un lugar entre las naciones: Israel y el mundo (https://goo.gl/9ADb8m)”. El manejo de los migrantes mexicanos por Trump y de los desarraigados palestinos por Netanyahu es simbiótico (http://goo.gl/uOB3rk). El sionismo es gemelo del trumpismo. Gran parte del ascenso del trumpismo se debió a la alienación de los Wasp ante al irresistible ascenso demográfico de los “hispanos (17.6 por ciento)” –cuyo 81.1 por ciento son mexicanos (https://goo.gl/IOXBIv)– y el descenso dramático de la todavía mayoría blanca: 61.6 por ciento (https://goo.gl/q0Aqo1). El gurú ideológico del trumpismo es Richard Spencer (RS), quien preside el National Policy Institute, y sostiene que su movimiento altright está animado por un sentimiento común de desposeimiento (sic) de los blancos. Alega que “quizá el mismo Trump no entiende por qué fue electo (https://goo.gl/yQRxqc)”. RS propone crear un Estado etnoblanco, eminentemente europeo, como sede del movimiento nacionalista blanco, frente a los “hispanos (https://goo.gl/F4DmA3)”. La gran mayoría de quienes festejan el Día de Acción de Gracias en EU y ahora, en forma grotesca, hasta en México, país de mayoría católica, se extravía en su inducido consumismo neoliberal al ignorar su significado puritano, del fundamentalismo protestante anglosajón: proveniente del desembarco de colonos ingleses del barco peregrino Mayflower, en Plymouth, en 1620, con su correlación geopolítica en el continente americano, como publica Stratfor –que se ostenta como la CIA de los empresarios– hace dos años y vuelve a republicar ahora (https://goo.gl/3JvdTq). La colonización puritana de Nueva (sic) Inglaterra representaba tanto un refugio contra las represalias españolas como “un empuje colonial hacia el corazón del territorio español (Léase: Florida, la Nueva (sic) España, el Reino (sic) de Yucatán, el Reino de Guatemala y el Caribe, donde la isla puritana de Providencia (sic) –no es gratuito su nombre protestante– jugaría un papel especial que finalmente fue un fracaso. En el siglo XVII, Inglaterra pasaba por un periodo de enorme inestabilidad debido a su guerra civil de 1642 y luego al regicidio de 1649, el cual, curiosamente, no tuvo el impacto universal del regicidio francés de 1789. La implantación de colonias puritanas en Plymouth, Bahía de Massachusetts y hasta la isla Providencia en el Caribe formaba parte de una estrategia geopolítica puritana más amplia para resolver los problemas de Inglaterra. La isla Providencia, de sólo 17 kilómetros –que hoy forma parte de Colombia y se ubica en la costa Miskito de la Nicaragua moderna–, se encontraba en el corazón del Caribe español y estaba destinada a alterar la geopolítica de Centroamérica para colocarla bajo control ingles, a juicio de Stratfor. El proyecto colonizador en isla Providencia, centro bucanero inglés, fue un fracaso frente al operativo militar español, mientras los puritanos florecieron en Nueva (sic) Inglaterra, principal componente regional para las 13 colonias fundacionales y, por ende, de EU, que constituyó el centro de un orden agrícola sustentado en granjeros y familias individuales y luego en su poder manufacturero, que hoy revive el trumpismo en sus dos componentes: rural y manufacturero. La guerra civil inglesa, que enfrentó al Parlamento de Cromwell con la monarquía, se debió en gran medida a la orientación de la Iglesia de Inglaterra de la que los puritanos deseaban purificar la religión nacional de sus rastros católicos (sic). En el Parlamento predominaban facciones puritanas poderosas cuando la católica España representaba el mayor problema estratégico para Inglaterra en el continente. Los protestantes ingleses se sentían bajo la amenaza constante de los poderes católicos en Europa. Es asombroso, desde el punto de vista analítico, que la célebre guerra religiosa de los 30 años haya arrancado en 1618: dos años antes de la expedición puritana del Mayflower.En ultima instancia, el objetivo inglés puritano era apuntalar la posición de los protestantes en la Guerra de los 30 años–que colocó a protestantes contra católicos en los estados germánicos– mediante su colonización de Plymouth/Bahía de Massachusetts/Isla Providencia. Dejo de lado las conquistas de Holanda, que se había liberado de España, y de Suecia, como potencias navales europeas en ese momento, para centrarme en la penetración de los puritanos de Inglaterra, que gozaba de una ventaja demográfica, en el Nuevo Mundo, Norteamérica en específico. A juicio de Stratfor, un grupo de líderes puritanos en el Parlamento, quienes luego jugarían un papel pivote en la guerra civil inglesa, se enfocó en los factores geopolíticos que perturbaban a Inglaterra entre los que se encontraban primordialmente las finanzas del poder español, por lo que diseñaron el establecimiento de un conjunto de expediciones coloniales puritanas en el continente americano que servirían simultáneamente para desalojar a España de su imperio colonial y enriquecer a Inglaterra, alterando el equilibrio geopolítico. Los puritanos de 1620 proseguían la misma estrategia de Elizabeth I, 35 años atrás, con su séquito de bucaneros que saqueaban los tesoros españoles en el Atlántico y el Caribe, cuando las conquistas de España y Portugal en el continente americano habían repercutido en la ruptura del equilibrio de poder en toda Europa. Trump y RS son los hijos Wasp del Mayflower casi cuatro siglos más tarde. AlfredoJalife.com Twitter: @AlfredoJalifeR_ Facebook: AlfredoJalife Vk: id254048037 Subir al inicio del texto

Rebelion

Rebelión Luis Linares Zapata
F ue necesario que gran parte de los votantes estadunidenses manifestaran en las urnas su descontento para empezar a escudriñar y aceptar las causas: una masiva afectación impuesta a su bienestar. De inicios de los años 70 al pasado 2012, el deterioro de los ingresos de los trabajadores en el PIB de ese país alcanza un grotesco 10 por ciento. Toda una tragedia impensable para legos y entendidos del ancho mundo. Pocos han sido los analistas que han penetrado los significados y consecuencias en tan severo castigo social. Un denso manto ideológico, manejado desde las altas esferas, (políticas, empresariales, académicas y mediáticas) oscurece tan cruda y dañina evidencia. La décima parte del PIB de ese rico país implica un Everest de riqueza trasladada, año con año, de un vasto grupo social a sólo un puñado de beneficiados en extremo. Para hacer posible este fenómeno de expoliación ha sido necesario todo un entramado de severos ordenamientos legales y descarnadas maneras de hacer negocios. Tal situación es, en efecto, el real cometido del modelo económico, cultural y político neoliberal vigente, no sólo en EU, sino casi en todo el mundo. La rebelión que se alberga en buena parte de las actuales sociedades, a pesar de sus algaradas a veces cruentas, todavía pasa desapercibida para el ancho público. Las cubre un denso disfraz de competencia por mercados y, sobre todo, de ser la única ruta. Poco importa que ocurra en no pocos países centrales: España, Grecia, Reino Unido, Francia, Alemania, Austria, por citar algunos en los cuales erupciones populares (de izquierda o derecha) contra lo establecido han sido notables. Mucho antes que en aquellas, drásticos cambios de humor, actuar y pensar tomaron cuerpo en varias naciones de Sudamérica. En estos escenarios las rebeliones lograron hacerse del poder e iniciar los cambios ambicionados. Pero el ninguneo mediático hacia estas últimas ha desviado la atención y no se ha escudriñado el fenómeno como fuera debido. Incluso protestas airadas en Wall Street pudieron ser recluidas bajo la etiqueta de caso aislado, desconectado de la normalidad imperante. Ya no es posible ni conveniente seguir la ruta de expoliación, impuesta sobre el factor trabajo, sin pagar altísimos costos en violencia, corrupción integrada al poder y desilusión por la democracia. En el caso mexicano la erosión en los ingresos de los trabajadores ha sido bastante mayor que lo sucedido en Estados Unidos. Aquí, de haber llegado a representar cerca de 40 por ciento del PIB durante los años 70, se ha caído en la actualidad a niveles inhumanos, por decir lo menos. La participación del trabajo ronda 20 por ciento bajos. La pérdida queda, sin eufemismos, fuera de cualquier consideración ética. A diferencia de los gringos, aquí se navega, de partida, sobre una enorme masa de clasemedieros plagados de estrecheces, acompañados por crecientes turbas de excluidos. Suponiendo un PIB mexicano del orden de 15 billones de pesos, la exacción de riqueza será del orden del billón y medio en favor del capital. Riqueza que se va a la especulación o, peor aún, es exportada para no retornar, dejando un océano de estrecheces a diestra y siniestra. Las cifras duras anteriores explican, en buena parte, el descontento que prevalece en México. Se le suman, por más de cuatro décadas, afrentas a derechos seguidos de impunes latrocinios. El descontento resultante se ha expresado en rebeliones contra lo que se denomina lo establecido. En el año de 1988 se dio la primera revuelta a gran escala, aunque en ese entonces pretendía una incipiente modernización y no un cambio de modelo. El monumental fraude que llevó a la Presidencia a Carlos Salinas de Gortari logró, sin embargo, mantener al PRI 12 años más. Pero el tinglado se desquebrajó por fastidio con ese partido, símbolo de omisiones, errores e ineficacia en sus modos autoritarios, rituales gastados y sus documentados apañes. La docena panista que sobrevino se montó sobre una doble rebelión popular: la primera contra el priísmo (año 2000) y la otra contra el mismo modelo (2006) Al ahogar, fraudulentamente, esta última rebelión, ciertamente popular y masiva, se incurrió en enormes costos. El deterioro económico se profundizó, al restaurar el añejo quehacer de complicidades desató la violencia y resintieron las tropelías del crimen organizado. La promesa de un renovado PRI (2012) no pudo sosegar el descontento acumulado. Después de cuatro años de nuevos errores, dispendios sin mesura, nulo crecimiento económico y trampas cómplices por doquier, se llega a esta actualidad con un fardo inmenso de reclamos insatisfechos en los ánimos, el decoro, la dignidad y los bolsillos colectivos. Los empeñados en la continuidad del modelo se apresuran, en pleno descampado, a montar tinglados emergentes ante los crecientes temores de venidera derrota. Por un lado escenifican una parodia de unidad partidaria alrededor de una Presidencia desfondada que pretende controlar su sucesión. Y, por otro, los panistas, empujan a una mujer, con imagen decente y buena (Margarita), pero a toda vista inviable. Para no sucumbir ante la testaruda rebelión en marcha, el continuismo prefigura, de nueva cuenta, un acuerdo cupular de sus remanentes y menguadas fuerzas partidarias. Subir al inicio del texto

Trump y Macri: vidas paralelas

Trump y Macri: vidas paralelas José Steinsleger
D onald Trump (Nueva York, 1946) proviene de una familia de inmigrantes alemanes forjados desde abajo. En Estados Unidos, su abuelo Friedrich juntó algo de capital. Pero cuando quiso reinstalarse en su natal Kallstadt (Baviera), las autoridades lo expulsaron del reino por haber evadido el servicio militar. Se regresó a Nueva York y allí nació Fred Trump (1905). Por su lado, Mauricio Macri (Buenos Aires, 1957) proviene de una familia de ricos terratenientes de Calabria. Su abuelo Giorgio fundó una empresa de construcción, obtuvo grandes contratos en Libia (colonia de Italia en la época del fascismo) y, tras la caída de Mussolini, se instaló en Argentina, donde en 1948 lo alcanzó su hijo Franco (Roma, 1930). Simpatizante del Ku Klux Klan, corredor de bienes raíces y financiador de construcciones en Queens (populoso distrito de Nueva York), Fred prosperó en un negocio que difícilmente podía crecer sin respetar los buenos modales que las mafias sugieren a los jóvenes ambiciosos en los territorios que controlan. Así, a los 22 años creó la Trump Organization (1927). Por su lado, Franco Macri se educó en colegios exclusivos de jesuitas y, a poco de haber emigrado, fundó en Buenos Aires una empresa dedicada a la construcción que daría origen a la actual Sideco Americana y otros emprendimientos importantes (1951). No le fue mal. Hoy, Franco Macri es uno de los hombres más ricos de Argentina. Como vamos viendo, Donald y Mauricio crecieron en un ambiente de inmigrantes sin dificultades para pagar el gas, el teléfono y la luz. Acaso por esto, se acostumbraron a mirar por encima del hombro a los inmigrantes menos afortunados. Con una salvedad: Donald aprendió muy bien los secretos de la empresa familiar, y Mauricio fue alejado de la suya por inútil. Sus esposas también jugaron su rol. Antes de conocer a la actual (la ex yugoslava Melanija Knauss, o Melania, Eslovenia, 1970), a quien enamoró al compás de For the love of money (cortina musical de apertura del reality show que conducía en la NBC), Donald estuvo casado con la modelo Maria Maples (Georgia, 1963) y con la ex checoslovaca Ivana Zelnikova (Praga, 1949), piedra angular de sus negocios en el decenio de 1980. En cambio, Mauricio estuvo casado con un par de floreros de la alta sociedad porteña. Y luego de dar el sí al tercero, estuvo a punto de morir asfixiado tragándose un bigote postizo en su fiesta de bodas. Nada serio. Nacida en familia de inmigrantes sirio-libaneses, Julia Awada (Buenos Aires, 1974) es primera dama de Argentina y no le gusta que le recuerden que hizo fortuna en talleres textiles clandestinos, con mano de obra esclava boliviana. Espiritualmente, Donald fue el mejor discípulo de Norman Vincent Peale (1908-93), exitoso predicador protestante de Estados Unidos y autor de El poder del pensamiento positivo, libro que desde la primera edición (1952) lleva decenas de millones de ejemplares vendidos. De hecho, Peale fue pastor de la familia Trump, y en 1977 casó a Donald con Ivana. Por el contrario, Mauricio ha sido más inestable. Primero estuvo en manos de la bruja de Guayaquil Shirley Barahona, recomendada por Jaime Durán Barba, su asesor ecuatoriano. Y hoy tiene una armonizadora budista que lo inició en el dharma, que, según el presidente, “…te ayuda a reflexionar y después te genera a través de los cuencos tibetanos y de los gongs una capacidad de adentrarte en vos mismo, y de conectarte con áreas tuyas de tu cerebro que tal vez no utilizás”. Sin embargo, el gurú preferido de Macri es Sri Ravi Shankar, dueño de un emprendimiento inmobiliario para que los clientes de su ONG El Arte de Vivir puedan respirar mejor en Opendoor, barrio “slow, sano y eco-friendly” ubicado a 45 minutos de Buenos Aires. El problema es que Ravi Shankar está vinculado en India a la organización paramilitar de ultraderecha RSS, que además de aniquilar a miles de musulmanes en 2002 es señalada como la autora del asesinato de Mahatma Gandhi. Y el brazo político de RSS es el Bharatiya Janata Party (BJP), partido que gobernó India desde 1998 hasta 2004 (La Política Online, 26/4/16). Bien, no nos pongamos negativos, y vayamos cerrando con otros aspectos del emperador electo, y el South American president en ejercicio: Trump conoce en profundidad a su sociedad, y Macri siempre fue el más esperado en los grandes reventones porteños con pizza y champaña. Trump exalta lo peor de su país, y Macri denigra lo mejor del suyo. Trump apuesta al proteccionismo, y Macri al aperturismo que en días pasados, en la Fiesta del Maní (cacahuate), celebró el primer millón y medio de despedidos en su primer año de gobierno. Trump será el comandante en jefe de Departamento de Estado y la CIA, y Macri tiene un gobierno servil a la embajada de Washington, y un gabinete plagado de agentes o alcahuetes de la CIA. Las vidas paralelas de Trump y Macri se cruzan, finalmente, en un punto nodal: ambos son totalmente impermeables al sufrimiento de los explotados, marginados y excluidos, y ambos llegaron al poder exacerbando las fobias y prejuicios de las mayorías silenciosas. Democráticamente, claro.

Estimulo fiscal al estilo Trump

Estímulo fiscal al estilo Trump Alejandro Nadal
E l plan económico de Donald Trump incluye fuertes reducciones de impuestos, tanto para individuos como para empresas, y posibilidades de deducciones fiscales hasta cuatro veces más altas que las existentes en la actualidad. Se calcula que éstas y otras reformas reducirán el ingreso fiscal en 9.5 billones (castellanos) de dólares a lo largo de la siguiente década y llevarán los ingresos tributarios a su nivel más bajo desde la Segunda Guerra Mundial. En el caso de los impuestos a las personas físicas, el plan contempla consolidar las siete tasas impositivas existentes en solamente tres estratos de ingresos. Hoy las siete tasas de impuestos existentes van de 10 a 39.6 por ciento y el plan de Trump compactará esos estratos en sólo tres con niveles de tasas impositivas de 10, 20 y 25 por ciento. Es decir, la tasa marginal más alta será reducida en casi 40 por ciento y al mismo tiempo se aumentarán los niveles de las deducciones personales. Además, la tasa impositiva máxima para las personas físicas con ganancias derivadas del capital y dividendos se reduce a 20 por ciento. Por el lado de los impuestos a las empresas la tasa impositiva pasará de 35 a 15 por ciento. Las ganancias repatriadas se gravarán con una muy baja tasa (10 por ciento) lo que supuestamente servirá para que los grandes grupos corporativos y empresas que operan a escala trasnacional abandonen los paraísos fiscales. La tasa aplicable a las entidades fiscales de transición (diseñadas para evitar doble tributación para empresas y sus dueños) también se reducirá a 15 por ciento de su tasa aplicable que es la del impuesto al ingreso de las personas físicas. Esta reforma simplifica algunos aspectos del régimen fiscal pero, por otra parte, crea incentivos para que algunas personas físicas se transformen en esas entidades fiscales de transición y aprovechen las menores tasas que se aplican a las empresas. Es claro que los beneficios de la reducción de impuestos serán muy desiguales. Los causantes en los deciles inferiores de la escala de distribución del ingreso apenas verán su ingreso neto aumentar 0.8 por ciento, mientras que los deciles superiores experimentarán aumentos de hasta 21 por ciento. La reforma tributaria de Trump está diseñada para beneficiar a los más ricos y aumentará la desigualdad. Si se quisiera mantener el equilibrio en el presupuesto federal frente a estas reducciones de impuestos la administración Trump tendría que recortar el gasto en por lo menos 20 por ciento. Pero el plan del nuevo gobierno contempla una ampliación del gasto público en un ambicioso programa de renovación y construcción de obras de infraestructura, fuerzas armadas y rubros como el de la atención a los veteranos de guerra. El aumento en gasto militar es absurdo (Estados Unidos ya gasta más que los 10 países juntos que destinan grandes recursos al rubro militar). Militarizar la frontera con México y construir su famoso muro también tendrían un costo significativo. Además, en su campaña Trump siempre mantuvo que el gasto en seguridad social y el programa federal de asistencia médica no sería recortado. ¿Qué hay del gasto en infraestructura? Todos los analistas concuerdan en que el rezago en infraestructura en Estados Unidos debe ser atendido. Trump dijo la noche de su victoria electoral que vamos a reparar carreteras, puentes, túneles, aeropuertos, escuelas y hospitales; nuestra infraestructura será la mejor del mundo y pondremos millones de personas a trabajar al reconstruirla. Pero el plan de Trump descansa en esquemas de asociaciones público-privadas, en los cuales una empresa privada recibe créditos fiscales para realizar una inversión en infraestructura (por ejemplo, una carretera) y posteriormente el costo es recuperado a través del cobro de peaje. Es decir, estamos hablando de privatizar buena parte de la infraestructura existente (detalles en peternavarro.com). Cada quien puede pensar lo que quiera de la participación privada en obras de infraestructura, pero estos esquemas de privatización no son aplicables a la mayoría de los proyectos de construcción y reparación de este tipo de obras. Muchos proyectos prioritarios desde el punto de vista social no podrían ser financiados con créditos fiscales (agua, transporte urbano, reparación de carreteras existentes, modernización de hospitales y escuelas). Otros necesitarían peajes y cuotas muy elevados, así como niveles de aforo muy altos, que no existen, para garantizar la rentabilidad que los inversionistas privados exigen. La experiencia internacional (incluyendo la de México) está repleta de ejemplos que terminan en la quiebra de las entidades privadas y en episodios de su rescate con recursos públicos. El estímulo del paquete fiscal de Trump puede aumentar el crecimiento económico en 2017, pero ese efecto se disipará y para 2019-2020 regresarán el estancamiento y la recesión. Mientras tanto, la desigualdad y el desequilibrio en las finanzas públicas habrán aumentado. Los que votaron por Trump no verán mejorar su situación. Twitter: @anadaloficial Subir al inicio del texto

Cuba: un duelo que es tambien esperanza

CUBA: UN DUELO QUE ES TAMBIEN UNA ESPERANZA Guillermo Almeyra
Millones de cubanos desfilan en estos momentos rindiendo homenaje a Fidel Castro. Sin las manifestaciones de histeria que en vieron en el multitudinario entierro de Néstor Kirchner, sin los muertos por asfixia ni las muestras de atraso que marcaron el entierro de Stalin. Las autoridades le dieron a Fidel un solemne funeral oficial. Los más altos jefes militares estuvieron presentes para destacar el papel del ejército como garante frente a Trump y también del orden interno. En cambio, quienes llenan La Habana se mueven en ese marco, pero no como simples asistentes a una ceremonia histórica sino con conciencia profunda de su papel de protagonistas. Los trabajadores y el pueblo cubanos se plantan así frente a Trump y a sus amenazas pero también frente al porvenir de la isla. Las interminables filas de personas de todo tipo reflejan en sus rostros congoja y preocupación ante la desaparición de un hombre que llenó los últimos sesenta años de la vida cubana y ante las posibles consecuencias de los cambios que se avecinan. Pero su presencia, como así como el grito de “¡Soy Fidel!” de cientos de miles, quiere decir “aquí estamos nuevamente, como en 1962, dispuestos a todo”. La inmensa mayoría de quienes desfilan en un largo duelo nació o se formó después de la entrada en La Habana de los barbudos en 1959. Son hijos de la revolución democrática antiimperialista y antibatistiana y participaron en los esfuerzos por empezar a construir el socialismo a pocos kilómetros del Imperio. Ellos son una demostración viva de que el consenso que tuvo Fidel Castro y el que en parte conservan sus continuadores no deriva de su conducción económica en muchos aspectos voluntarista o errónea sino que hunde sus raíces en la tendencia que une a Martí con Chibás y culmina en Fidel, en el antiimperialismo con profundo contenido social. Eso hace de esta manifestación luctuosa algo realmente grande y esperanzador. Porque cualesquiera sean las dificultades que los cubanos deberán enfrentar en lo inmediato, han decidido por su propia cuenta salir a la calle y pesar con su presencia. Los latinoamericanos democráticos estaremos a su lado.

martes, 29 de noviembre de 2016

Mexico SA

México SA La OCDE recorta estimación de crecimiento Gurría sueña con el despegue México padece... Carlos Fernández-Vega
E nrique Peña Nieto (EPN) cierra su cuarto de año de estancia en Los Pinos igual que cuando llegó a mover a México; es decir, con otro recorte a la estimación de crecimiento económico, acción constante en los 48 meses transcurridos desde que se instaló en la residencia oficial. Y el asunto se torna más delicado pues, desde ya, los tijeretazos incluyen la de por sí escuálida perspectiva para 2017 y 2018. Oficialmente, el próximo jueves EPN arranca el último tercio de su mandato y nada indica que este tramo sería mejor que los dos previos. De hecho, los especialistas en la materia apuntan hacia un mayor deterioro, producto no sólo de la era Trump, sino de las propias, cuan desgastadas condiciones internas; es decir, de los graves problemas estructurales que reporta el país a los que la geniocracia siempre ha calificado de coyunturales. Con Peña Nieto y sus brillantes muchachos de Hacienda la economía nacional es igual al burro de la noria; es decir, acumulan cuatro años dando vueltas sobre su mismo eje y, por lo mismo, con idénticos resultados. Eso sí, por discursos no han parado, pero éstos siempre se topan con la señora que más odian: la realidad. Tijeras en ristre, organismos y consultores nacionales e internacionales, académicos, empresas especializadas y muchos más, recortan, un día sí y el siguiente también, la siempre alegre estimación oficial en materia de crecimiento económico mexicano. Incluso los más amigos de México han decidido seguir por esa ruta. Pero a ese gran amigo del país, el actual secretario general de la OCDE, José Angel Gurría, no le alcanzaron los cientos de porras, piropos y flores por él lanzados a EPN y a su ex ministro del (d) año (algo constante en sus alegres discursos a favor de México) para impedir lo que la organización a su cargo se vio en la penosa necesidad de anunciar ayer: otro recorte a su estimación sobre el crecimiento económico de nuestro país. Como es más barato en paquete, el tijeretazo incluyó el cierre para 2016 y las perspectivas para 2017 y 2018; o sea, justo el trienio en el que (según el machacón discurso de Gurría) México despegaría, dejaría atrás la inercia de tres décadas y registraría el mayor crecimiento del sexenio peñanietista, pues funcionarían a plenitud las exitosas reformas estructurales impulsadas por el susodicho y aprobadas por el Congreso del ídem. Y esa, soñaba el tamaulipeco, sería la mejor herencia del actual inquilino de Los Pinos Pero bueno, más allá de los sueños húmedos de Gurría, la organización que encabeza anunció ayer que si bien van las cosas la economía mexicana crecería 2.2 por ciento en 2016 (un año atrás pronosticó 3.1 por ciento); 2.3 por ciento en 2017 (llegó a estimar que sería de 3 por ciento), y el broche de oro, 2.4 por ciento en 2018, último de Peña Nieto en Los Pinos. Todo, desde luego, con las reformas en plena operación. De ser correcto el pronóstico más reciente de la OCDE (que puede ser peor en la realidad), en el sexenio peñanietista la tasa anual promedio de crecimiento a duras penas sería de 2.1 por ciento, apenas por arriba de la registrada en el gobierno calderonista (1.9 por ciento) y ligeramente inferior a la reportada en tiempos foxistas (2.3 por ciento). De ese tamaño es el éxito económico en lo que va del nuevo siglo. Según la OCDE la economía mexicana ha resistido la brusca caída de los precios del petróleo, el débil crecimiento del comercio mundial y el esperado endurecimiento de la política monetaria de Estados Unidos, al tiempo que subrayó que la demanda interna sigue siendo el principal factor que alienta la actividad económica, todo ello en un contexto de choques externos desfavorables y la incertidumbre por la futura política de Estados Unidos tras la elección del republicano Donald Trump. A ello se suma la posibilidad de que se tengan reducciones adicionales en la producción de crudo y una confianza empresarial e inversión privada más débiles. Parece que la OCDE olvidó que con Fox y Calderón en Los Pinos –la espeluznante docena trágica panista– México registró no sólo los precios petroleros más elevados, sino la mayor cota de extracción y exportación, con los consecuentes cuan voluminosos ingresos excedentes, que a estas alturas nadie se atreve a preguntar ¿dónde quedaron?, por mucho que todos sepan a qué se destinaron. Lo mejor del caso es que en no pocas ocasiones Gurría celebró en público que las finanzas públicas mexicanas ya se despetrolizaron. Ante la advertencia de la OCDE el gobierno peñanietista de nueva cuenta se enjabonó para que todo le resbale. Dijo el heredero del ex ministro del (d) año, José Antonio Meade que la Secretaría de Hacienda “estará pendiente, vigilante al desarrollo de los acontecimientos. Y siguió la fiesta. Pero por mucho que a la Secretaría de Hacienda le resbale, otro elemento a considerar es la advertencia del Banco de México: la economía nacional está en fase de desaceleración, que se puede acentuar en 2017, todo ello aderezado con una mayor presión inflacionaria. Y lo subraya una institución cuyo gobernador ha pecado de cauto a la hora de hacer declaraciones en torno a la situación interna, porque todos los males los atribuye a factores externos. Como lo publicó La Jornada el pasado sábado, con la firma de Roberto González Amador, la actividad económica del país registra tasas de crecimiento por debajo de su potencial y se encuentra en una fase de desaceleración que incluso podría acentuarse en 2017, aseguró el BdeM, un par de días después de que la Secretaría de Hacienda decidió mantener sus previsiones de crecimiento para este año.A la pérdida de dinamismo se añaden mayores presiones inflacionarias y una situación inusual de incertidumbre sobre las perspectivas de la economía derivada de factores externos, afirmó Javier Guzmán Calafell, subgobernador del banco central. En este contexto, se espera que la economía mexicana muestre un crecimiento moderado en 2016, aunque inferior al del año previo, cuando fue de 2.5 por ciento. Entonces, de mal en peor, pero con piropos, porras y flores de Gurría. Las rebanadas del pastel Con todo, el inquilino de Los Pinos no pierde el buen humor y cuenta chistoretes: el PRI ganará para que los próximos años sean de construcción, no de destrucción; para no regresar a modelos obsoletos y caducos; para mantener la certidumbre y estabilidad y no retornar al estancamiento. ¡Juar, juar!…. Y el dólar, a 20.95 pesitos. cfvmexico_sa@hotmail.com Subir al inicio del texto

Dinero

Dinero Ni te veo ni te oigo, dice Salinas a AMLO El otro impuesto que pagan las empresas #LadyGastalona Enrique Galván Ochoa
N o es la primera vez que el dirigente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, reta a debatir al ex presidente Carlos Salinas de Gortari. Entrevistado durante una gira por Michoacán, recientemente AMLO insistió: a mí me gustaría debatir con el jefe de la mafia del poder, que es Carlos Salinas de Gortari. Dice que hacerlo con otros, como Enrique Ochoa Reza, el presidente del PRI, no tiene caso. ¿Qué dijo CSG al respecto? Yo soy un ex presidente dedicado a mis actividades particulares; ahorita estoy en Cuba, permanezco fuera de México mucho tiempo en actividades académicas y profesionales. Como dijera cuando todavía era presidente: ni los veo ni los oigo. El petróleo que fue nuestro Inexorablemente, el pacto que firmaron PRI, PRD y PAN va materializándose en la entrega de la riqueza petrolera a empresas privadas. Cuando termine su segundo periodo por cinco años más, el presidente de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, Juan Carlos Zepeda, podrá decir a sus jefes que cumplió su cometido. Ocho empresas en solitario y siete consorcios participarán del proceso en el que se licitarán 10 contratos de licencia para exploración y extracción de hidrocarburos, y en el que además Pemex buscará un socio que lo ayude a desarrollar las reservas de Trión. Las compañías que se presentaron individualmente son: BHP Billiton Petróleo Operaciones de México, BP Exploration México, China Offshore OilCorporation E&P México, Statoil E&P México, ExxonMobil Exploración y Producción México, PC Carigali México Operations, Pemex Exploración y Producción, y Total E&P México. Inseguridad crónica Se estima que 35.5 por ciento de los negocios del país (empresas grandes, medianas, micros, changarros) fueron víctimas de algún delito durante 2015, de acuerdo con los resultados más recientes de la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas 2016 (ENVE), dados a conocer por el Inegi. Los delitos con mayor incidencia continúan siendo el asalto y el robo de mercancías, dinero, insumos o bienes; presentaron un incremento de 28.7 por ciento respecto a 2013 (ver gráfica). Los datos de la ENVE muestran que a escala nacional, 57.4 por ciento de los negocios consideran a la inseguridad y la delincuencia como el problema que más los afecta, seguido del bajo poder adquisitivo de la población con 39.2 por ciento, y la falta de apoyos del gobierno con 33.5 por ciento. Nótese que son los delitos denunciados; la mayor parte no llega al Ministerio Público. Falta por hacer un cálculo sobre las pérdidas. La extorsión con frecuencia obliga a cerrar los negocios, cuando pagarla está fuera del alcance de los dueños. En la práctica, la inseguridad es otro impuesto que pagan… y cada día mayor. #LadyGastalona Tehuacán, el segundo municipio más poblado de Puebla, ha iniciado un procedimiento de determinación de responsabilidades por las irregularidades detectadas a las cuentas públicas de su presidenta municipal, la priísta Ernestina Fernández Méndez. Diputados locales votaron en favor del proceso contra la alcaldesa, quien hizo lo que otros, entró en pánico y tramitó amparo para evitar destitución y cárcel; ella dice que su temor fundado se debe a que no fue notificada debidamente y se le niega el derecho de audiencia. Se habla de gastos excesivos en conciertos, fiestas y renta de inmobiliario. Ombudsman Social Asunto: Cuba y Calderón En torno a lo dicho por Felipe Calderón, con motivo del fallecimiento del comandante en jefe de la revolución, de veras, no tiene... el michoacano. Dice que desde su nacimiento, sólo vio dictadura. Le pregunto al esposo de la señora Margarita: ¿aprobar el Fobaproa no es peor que la dictadura? Pretender que su mujer sea presidenta, ¿no es dictadura? Como presidente ilegítimo de 2006 a 2012, ya que no ganó la elección, ¿no es peor que la dictadura? Lanzar al Ejército y la Marina a las calles de México, para matar a cientos de miles de mexicanos, como diría Wolfgang Pauli, ni siquiera es dictadura, es algo peor. Habrá que recomendarle a Calderón que siga haciendo lo que sabe hacer muy bien, yo se lo apruebo y celebro, tomar sus tequilas. Pero no más daño a México. Dr. Rubén Mares Gallardo R: Ya pidió su Cuba libre Twitteratti Ahí viene diciembre y yo espero las declaraciones que van a cimbrar a México que prometió @YoconYunes. A ver si no cimbra de decepciones. El Candigato Morris @Oficialmorris Leí Carlos Salinas de Gortari y en seguida sentí que le faltaban tres ceros a mi moneda de 10 pesitos. Daniel Fermán @fermanHD Mientras más años cumplo, más sensual me parece que las tarjetas de crédito estén pagadas a tiempo y en su totalidad. Maceta @mlocadelamaceta Twitter: @galvanochoa FaceBook: galvanochoa galvanochoa@gmail.com • Foro: http://elforomexico.com/encuestas/ Subir al inicio del texto ¿Quiénes somos? | Contacto | Suscripciones | Publicidad | Aviso legal | Aviso de privacidad. | Librería | Siguenos en: twitter Periódicos: La Jornada Aguascalientes | La Jornada Baja California | La Jornada Guerrero | La Jornada Maya | La Jornada Morelos La Jornada de Oriente | La Jornada San Luis | La Jornada Veracruz | La Jornada Zacatecas Medios asociados: The Independent | Radio Nederland | Gara | Página/12 | Carta Maior | Radio Bilingüe

Fidel y la libertad

Fidel y la libertad José Blanco
F idel y la libertad; y la igualdad y la fraternidad. Esa tríada que surge del pensamiento del Siglo de las Luces, pero que le lleva varias décadas en afincarse, con la Segunda República Francesa en 1848. Hace unas semanas usé esa tríada para escribir un artículo sobre el feminismo, y ahora la retomo para algo decir sobre Fidel. Escribí: me parece que el consenso que soporta a la Segunda República Francesa, condensado en la tríada citada, es un programa para el desarrollo humano de no sé cuántos siglos. Es claro que la Ilustración no parió tal programa en conciencia de que sería para la historia. Hoy puede proponerse, desde el flanco izquierdo, que eso es lo que puede leerse en tal divisa. En su nacimiento era entendida la divisa de diversos modos, todos sumamente restringidos: libertad significaba la desaparición de la opresión social; significaba no querer subyugar ni ser subyugado, e implicaba el fin de un estado de servidumbre. Así lo sentía la burguesía naciente, frente al dominio de siglos de la aristocracia. De ahí la demanda de igualdad que se creyó era alcanzada por los derechos proclamados por la Constitución política. Es abolida la esclavitud, y se institucionaliza el sufragio masculino; de la coalición gobernante, se excluye a los socialistas (Louis Blanc, Albert). Esa es la igualdad y la libertad de entonces, y así, significaba un enorme salto hacia adelante respecto del ancien régime. En 1848 asume la presidencia Napoleón El Pequeño. En ese mismo año, Marx publica sus Manuscritos económicos y filosóficos, en que empieza a sentar las bases de su obra Contribución a la crítica de la economía política, publicado en 1859, que dará paso al tomo I de su obra fundamental, El Capital, publicado en 1867. En su obra más temprana – Los manuscritos…– escribe: La existencia del obrero está reducida, pues, a la condición de existencia de cualquier otra mercancía. El obrero se ha convertido en una mercancía y para él es una suerte poder llegar hasta el comprador. Ha comenzado una crítica profunda y radical de las ideas de libertad y de igualdad que nacieron de la Ilustración, y cobrarán ahora otro sentido. La obra de Marx habría de formular las ideas básicas (básicas) sobre la organización social que haría posible la libertad real, la igualdad real posible (hay diferencias provenientes de la naturaleza), la fraternidad entre los hombres. Bajo el capitalismo, la libertad, la igualdad y la fraternidad son imposibles. Y la superación del muro de la imposibilidad es mil veces más ardua, en los países subdesarrollados. El primer gran intento de esa superación es el modelo asalto al palacio de invierno. Nace la URSS; su disolución inevitablemente llegó y culminó con la independencia de las 15 repúblicas de la Unión Soviética entre el 11 de marzo de 1990 y el 25 de diciembre de 1991. Viendo hacia atrás y en profundidad la historia de la URSS, se advierte que lo fundamental fue la creación de un formidable atajo hacia el desarrollo capitalista, en un santiamén, desde el oscuro atraso de la Rusia zarista. Por otros caminos lo mismo ocurrió en China con la construcción de su poderoso capitalismo de Estado. La teoría del foco, inspirada por el Che, y desarrollada por Régis Debray, fue exitosa para el asalto al palacio de Batista, pero ese éxito sería incomprensible sin el aporte decisivo del sindicato de trabajadores agrícolas e industriales de los ingenios azucareros que estaban en gran parte del territorio cubano. Fidel diría después de la toma del poder y de su posterior decisión de crear una economía socialista: es ahora que empiezan las dificultades. Así fue: el gobierno cubano nunca entendió cómo tendría que desarrollarse en dirección socialista una economía terriblemente atrasada. Sólo hay que revisar El gran debate sobre la economía en Cuba, 1963-1964, en el que participaron, además del Che, Marcelo Fernández Font, Alberto Mora, Luis Álvarez Rom, Joaquín Infante Ugarte, Alexis Codina, Mario Rodríguez Escalona, Miguel Cossío, Ernest Mandel y Charles Bettelheim. Especialmente Bettelheim hizo esfuerzos enormes para explicar que la búsqueda práctica del cálculo económico en una economía planificada en atraso profundo, estaba muy lejos de las abstracciones de la teoría marxista del valor en la que insistía con ahínco el Che. No ha habido socialismo en ninguna parte. Fidel ha sido un gran libertador: Fidel brindó un apoyo decisivo para la consolidación de la revolución en Argelia, derrotando al colonialismo francés en su último bastión; Fidel estuvo junto a Vietnam desde el primer momento, y su cooperación resultó de ser de enorme valor para ese pueblo sometido al genocidio estadunidense; Fidel estuvo siempre junto a los palestinos y jamás dudó acerca de cuál era el lado correcto en el conflicto árabe-israelí; Fidel fue decisivo, según Nelson Mandela, para redefinir el mapa sociopolítico del sur del continente africano y acabar con el apartheid, y es preciso sumar el apoyo que dio a numerosos grupos latinoamericanos que buscaban de veras la libertad inspirados por la teoría del foco. Fidel fue también un estratega sin par en política internacional: a 120 kilómetros del imperio, Cuba permanece. Pero Fidel fue también un caudillo que todo lo decidía. Y ahí donde un caudillo manda, la justicia social entra en conflicto insuperable con la libertad: con la revolución todo, contra la revolución, nada. La divisa nacida en el seno de la Ilustración sigue siendo el faro para la creación de humanidad. Subir al inicio del texto

Fidel

Fidel Pedro Salmerón Sanginés
¡D ictador!, se llenan aquí la boca los de la democracia ficticia del haiga sido como haiga sido; allá, los de la estirpe de Kissinger y las dictaduras militares. ¡Asesino!, gritan aquí quienes han permitido la tragedia de 150 mil muertos en 10 años; allá, quienes defienden la sangrienta política imperial y el bloqueo contra la revolución cubana. Las reacciones de Felipe Calderón o Jorge G. Castañeda aquí; las de Donald Trump o las damas de blanco allá, lo reflejan claramente. Pero la ofensiva mediática es feroz y mis alumnos, los amigos de mis hijos no entienden nada. Si les dijeron siempre que era un dictador decrépito y sanguinario, ¿por qué el pesar de tantos? Habrá que recordarles que alguna vez los jóvenes soñaban con cambiar al mundo y que ese sueño tenía una ruta concreta y viable, un ejemplo. ¿Cómo recordarles ese ejemplo? Entre tantas maneras, elijo dos fragmentos del inmortal discurso de Fidel La historia me absolverá: El problema de la tierra, el problema de la industrialización, el problema de la vivienda, el problema del desempleo, el problema de la educación y el problema de la salud del pueblo; he ahí concretados los seis puntos a cuya solución se hubieran encaminado resueltamente nuestros esfuerzos, junto con la conquista de las libertades públicas y la democracia política, dijo tras exponer las seis leyes que un gobierno revolucionario apoyado en el pueblo pondría en práctica inmediatamente. En muy pocos años, el gobierno de la revolución resolvió cuatro de esos problemas, tal como los había presentado Fidel en el discurso, y parcialmente dos más (industrialización y vivienda). La democracia política, por supuesto, quedó pendiente, pero para nosotros, que vivíamos (y vivimos) en otra forma de antidemocracia, aquello no nos parecía entonces tan importante como la miseria o el analfabetismo. Y preguntaba Fidel sobre la solución de esos problemas: “¿De dónde sacar el dinero necesario? Cuando no se lo roben, cuando no haya funcionarios venales que se dejen sobornar por las grandes empresas con detrimento del fisco, cuando los inmensos recursos de la nación estén movilizados… No, eso no es inconcebible. Lo inconcebible es que haya hombres que se acuesten con hambre, mientras quede una pulgada de tierra sin sembrar; lo inconcebible es que haya niños que mueran sin asistencia médica, lo inconcebible es que 30 por ciento de nuestros campesinos no sepan firmar, y 99 por ciento no sepa de historia de Cuba; lo inconcebible es que la mayoría de las familias de nuestros campos estén viviendo en peores condiciones que los indios que encontró Colón al descubrir la tierra más hermosa que ojos humanos vieron. Pocos años después del triunfo de la revolución, todos los campesinos sabían firmar y los niños no morían por falta de asistencia. Ese era el ejemplo cubano. La prueba de que era factible abatir las grandes injusticias de nuestros países. La prueba de que la revolución era posible. El lema del Che Guevara, el deber de todo revolucionario es hacer la revolución, era una invitación a la acción consciente. Para ellos la revolución no se circunscribía a la transformación de las condiciones de vida. Su tarea última era la creación de un hombre nuevo que debía construirse simultáneamente en la educación y en la práctica (el trabajo voluntario, el trabajo sin más exigencia que la satisfacción del deber cumplido, la actitud de los guerrilleros y combatientes tomada de la experiencia de la Sierra Maestra). Ideas que no se basaban en una concepción romántica de la naturaleza humana, sino en una posibilidad real derivada de la experiencia cubana. El hombre comunista debe ser necesariamente un hombre interiormente más rico y más responsable, vinculado a los otros hombres por una relación de solidaridad real, de fraternidad universal concreta; un hombre que se reconoce en su obra y que, una vez rotas las cadenas de la enajenación, alcanza su plena condición humana (Michel Lowy, El pensamiento del Che Guevara, p. 27). Hoy, para muchos, ese sueño ha naufragado (en parte por el hundimiento del socialismo real y la agresión permanente de Estados Unidos; pero también por problemas propios del experimento cubano, entre los que destaca la ausencia de democracia). Hoy no puede plantearse una alternativa global al capitalismo sin hacer una profunda crítica histórica de los errores (y los crímenes) del socialismo realmente existente, incluido el cubano: Pero hoy tampoco aceptamos el fin de la historia ni el fin de la utopía. Tampoco nos resignamos ante el mundo tal cual es. Y en la búsqueda de nuevas alternativas, debemos retomar críticamente mucho de lo hecho por el pueblo cubano y sus dirigentes. Hasta siempre, comandante. Twitter: @HistoriaPedro Blog: lacabezadevilla.wordpress.com Subir al inicio del texto

Fidel, el camarada Alejandro

Fidel, el camarada Alejandro Luis Hernández Navarro
F idel Castro es un mito, lo era antes de morir. Lo es en la doble acepción del concepto: como parte de una historia imaginaria en la que se deforman las verdaderas cualidades de una persona, y como elemento movilizador de la política en el que se sintetizan proyectos y anhelos colectivos. Sobre Fidel Castro se han contado multitud de relatos fantásticos. Hay quienes aseguran que buscó, sin suerte alguna, jugar beisbol con los Yanquis de Nueva York y con los Senadores de Washington. Se dice también que, en 1946, a los 20 años de edad, fue extra en dos producciones de Hollywood: el musical Holiday in Mexico y la comedia Easy to Wed. En 2005, la CIA informó que sufría mal de Parkinson. Estos inventos (y muchos otros por el estilo) son inofensivos al lado de la andanada de calumnias que sus enemigos le fabricaron para tratar de desprestigiarlo. Forbes lo acusó sin dar una sola prueba de tener 900 millones de dólares en una cuenta, cuando es más o menos evidente la sencillez con que vivía, que personalidades cercanas han descrito como casi espartana. Vivió sin lujos. Otros le imputaron ser un monarca, un torturador y lindezas por el estilo. Hay quienes, escandalizados, le achacaron promover el culto a la personalidad. Sin embargo, en Cuba no hay calles, estatuas o plazas que lleven por nombre el de Fidel Castro. Más aún, él rechazó en vida que su fotografía se colgara en las oficinas de los edificios públicos. Algo inusual en el mundo de la política ­institucional. Quienes lo trataron son testigos de su capacidad de escuchar y preguntar. Ignacio Ramonet lo describe como un hombre casi tímido, bien educado y muy caballeroso, que presta interés a cada interlocutor y habla con sencillez, sin afectación. Con modales y gestos de una cortesía de antaño, siempre atento a los demás. El asunto es otro. Sus detractores nunca lo absolvieron de tener la osadía de levantarse en armas contra el tirano Fulgencio Batista, organizar un ejército con un puñado de hombres, ganar la guerra, derrocar la dictadura, enfrentarse al imperio, frenar el despojo, hacer realidad la soberanía nacional, emprender la construcción del socialismo, redistribuir la riqueza, involucrarse activamente en la lucha anticolonial en África, resistir junto a su pueblo el bloqueo económico, sobrevivir al derrumbe de la Unión Soviética, retirarse ordenadamente del poder y ver cómo su semilla libertaria germinaba en América Latina. Nunca lo exoneraron del delito de nadar contra la corriente y demostrar que se puede ir contra la lógica del capital y de las grandes metrópolis imperiales; de hacer evidente que se puede vivir con valores como la solidaridad, la cooperación y la ayuda mutua, haciendo a un lado la lógica del darwinismo social capitalista y del mercado como escuela de virtud; de poner como prioridad de gobierno la salud y la educación del pueblo. Pero, sobre todo, no le perdonaron su más grave pecado: salir victorioso en un buen número de sus grandes apuestas. Ciertamente no fueron todas, pero sí la mayoría. Los señores del poder y del dinero pueden darse el lujo de exculpar a quienes los desafiaron y perdieron la vida en el intento, pero no de indultar a quienes los derrotaron. Fidel Castro fue uno de ellos. La afrenta del comandante les resultó imperdonable. Vaya, ni siquiera pudieron asesinarlo, como intentaron hacerlo en más de 600 ocasiones. Falleció entre los suyos de muerte natural. Hasta sus últimos días fue visitado por quienes lo quisieron y admiraron. Incluso se dio el lujo de escribir un último artículo sobre sus 90 años de vida pocas semanas antes de morir. Fidel Castro fue (es) también un mito, entendido no como ficción, sino en el sentido que le dan a este concepto Georges Sorel y José Carlos Mariátegui. Su figura es una imagen-fuerza que evoca sentimientos, un imán que convoca a la acción colectiva, un momento de condensación de la historia viva de América Latina, de representación de la voluntad continental de cambio hacia otro mundo más justo. Prácticamente durante casi toda la segunda parte del siglo XX y lo que va del XXI, el comandante Castro y la revolución cubana suscitaron en otros países olas ininterrumpidas de lucha a favor de la independencia nacional, la democracia profunda y el socialismo. Fidel reconoció y estimuló la vitalidad de los pueblos latinoamericanos y caribeños, y su capacidad para hacer su propia historia. Dotado de un excepcional sentido de la historia, Fidel supo ser, a lo largo de más de seis décadas, un hombre de su tiempo. Analista profundo de las situaciones concretas, se colocó, una y otra vez, en la cresta de los cambios de época. El seudónimo de Fidel Castro en su exilio mexicano fue Alejandro, su segundo nombre real. Con ese alias preparó el desembarco de su expedición armada a Cuba, hace ya 60 años. En ese nombre de guerra se sintetizan su extraordinaria capacidad como conspirador y la firmeza inquebrantable de sus principios. Y, a pesar de ser un jefe de Estado, el comandante siempre fue a lo largo de su vida el Alejandro de los principios éticos y convicción revolucionaria de su aventura mexicana. El comandante fue un líder que inspiró a una diversidad generaciones en los más distintos países. No puede decirse lo mismo de muchos personajes de la política contemporánea. A juzgar por las expresiones universales de duelo que se han hecho patentes estos días, del cariño que una parte de la juventud planetaria le profesa, el mito de Fidel sobrevivirá a su muerte, no como un logo reproducido en camisetas, sino como ejemplo a emular. Como un reconocimiento a la congruencia de Fidel Alejandro. Twitter: @lhan55 Subir al inicio del texto ¿Quiénes somos? | Contacto | Suscripciones | Publicidad | Aviso legal | Aviso de privacidad. | Librería | Siguenos en: twitter Periódicos: La Jornada Aguascalientes | La Jornada Baja California | La Jornada Guerrero | La Jornada Maya | La Jornada Morelos La Jornada de Oriente | La Jornada San Luis | La Jornada Veracruz | La Jornada Zacatecas Medios asociados: The Independent | Radio Nederland | Gara | Página/12 | Carta Maior | Radio Bilingüe