EL DELFÍN

Este es un espacio para la difusión de conocimientos sobre Ciencia Política que derivan de la Carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública de la Universidad Nacional Autónoma de México.

viernes, 31 de octubre de 2014

Navegaciones

Navegaciones
 Día de los Vivos
Pedro Miguel
Foto
M
uerte, serena muerte: recibe a los irremediables con suavidad y ternura porque están urgidos de afecto. Han pasado por cosas muy duras y se merecen el descanso, el calor del seno terrestre, la ligereza de la atmósfera, la tibieza del recuerdo. Guárdate en tus aposentos sombríos y sé buena anfitriona con los que llegan a tu casa porque no tienen otro sitio al cual acudir. Asegúrate de que la nada que los envuelve les resulte cuando menos indolora y tal vez apacible.
Deja que te quitemos por unos días algunos de los nombres, algunos de los rostros que forman tu rebaño desmesurado: los pocos que se salvan del olvido. Queremos tenerlos con nosotros, platicar con ellos, homenajearlos y brindarles agua y café. Sabemos que algo, algo situado acaso en nuestro interior y no muy bien definible, sentirá gratitud con ese gesto, por más que las bebidas no lleguen a sus quijadas rígidas y a sus gargantas silenciosas. Si quieres verlo así, permítenos un margen para la fantasía y la ilusión. Pero no te entrometas ni reclames soberanía sobre esos pobres invitados de ocasión a nuestras mesas tristes y coloridas. Abstente por un tiempo de tocar con tu mano inmunda y descarnada sus fotos entrañables, sus brazos idos, sus párpados abiertos por estas solas noches frías. No traspases las líneas dibujadas con pétalos en donde los tenemos como asilados temporales. Ya te los devolveremos, porque es inevitable, cuando se marchite el cempasúchil. Hoy son nuestros, los proclamamos nuestros, porque queremos festejar la vida: la vida que tenemos y la de los que la tuvieron.
Muerte, fétida muerte: ándate por unos días a visitar a los calculadores y a los exaltados que te adoran y que te invocan como parte de su rutina diaria: los que no tuvieron piedad, los que te incluyeron en el programa y la estrategia, los que cuentan contigo para acrecentar sus fortunas, los que te administran lentamente en la pobreza de los otros, los que te inoculan de forma rápida con órdenes atroces y criminales, los que no se conduelen y siguen adelante, los que no escuchan y no entienden el sufrimiento ajeno.
Pinta con pintura negra sus casas, ensúciales sus despachos impolutos, lleva a su mesa y a su almohada los restos que dejaron regados, míralos fijamente desde las fosas sin ojos de los que asesinaron. Convierte sus lágrimas hipócritas en vidrios afilados, congélales en la boca el discurso de piedad mentirosa, enciérrate con ellos por mucho tiempo en sus negocios subterráneos, sus salas de exterminio y sus cuartos de tortura. Convierte en polvo sus tasas de interés, baila sobre los huesos de sus altos cargos, Transforma en ataúdes sus automóviles blindados y sus aviones ejecutivos, vuelve mortajas sus prendas de diseño exclusivo, neutraliza con tu aliento el hedor de sus perfumes. Sé justiciera por primera vez en tu inexistencia.
Muerte, sórdida muerte: danos una pequeña tregua. Evítanos el estruendo de las balaceras, el dolor de los lamentos, el chirriar de las llantas antes del accidente, el estertor en el quirófano. Danos una pequeña tregua porque No captures al niño ni al joven, al que aún tiene mucho por dar y por recibir, al que está anclado a la vida simple, al que sueña con el futuro, al que no ha podido conocer el sabor de ciertas frutas, al que da de comer a sus prójimos, al que extrae figuras de la nada, al que transforma el aire en música, al que combina los colores, al que es una figura necesaria en el barrio, al que no tiene más bienes que la vida.
Muerte, desgraciada muerte: muévete unos pasos hacia atrás y abandona esa región ambigua de la ausencia y de la incertidumbre y permite que salgan de ella quienes han sido separados a la fuerza de su vida, de sus horarios, de sus habitaciones, de sus caminos cotidianos. No termines de hundirlos en la nada. No pretendas hacer tuyo lo que se balancea en la duda. No abuses de tu dominio en los territorios de la sombra. Que no se exceda tu ambición de coleccionar nombres. No des un paso más que podrías romper sus delicadas columnas vertebrales. Permite que regresen intactos y con bien de la desaparición: con sus extremidades completas y sus dientes enteros y sus sentidos funcionando, con su dedicación y su amor intactos, con sus carcajadas de adolesentes pobres. No nos los arrebates. Vivos se los llevaron y vivos los queremos.
Muerte, déjanos sembrar y leer y cantar y enojarnos y construir muros y después derribarlos y reproducirnos con amor y calma y embriagarnos y deshacernos de ternura por una nota musical, por una silueta apenas esbozada o por cualquier estupidez, y defender con uñas y dientes nuestra intrascendencia. Te exigimos respeto desde la soberanía de nuestros organismos, desde nuestra niñez efímera, nuestra madurez breve, nuestra fugaz ancianidad. No te aparezcas a mansalva y traición en un recodo del camino; permite que lleguemos cuando menos al poblado próximo y espéranos allí, sentada en la plaza o donde quieras. Puedes estar segura de que no vamos a dejarte plantada.
Ya nos has hecho mucho daño. Tu gula de rostros apagados es insaciable y ya nos has quitado padres, madres, hijos y tíos por montones. Hoy queremos estar con ellos y sin ti; charlar sin que nos escuches; deliberar sobre asuntos que no te incumben; amarnos como tú no sabes ni sabrás nunca; vivir la vida dulce, la puta vida amarga.
Muerte, déjanos en paz.
Twitter: @Navegaciones


Consultas populares: rechazo y cerrazon

Consultas populares: rechazo y cerrazón
E
l pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró ayer inconstitucionales las consultas populares propuestas por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) para que la ciudadanía se manifestara en relación a la reforma energética. El argumento de la mayoría de los magistrados fue que ambas están relacionadas con los ingresos y gastos del Estado mexicano, y caen en el supuesto de excepción previsto en el artículo 35 de la Carta Magna. Con idéntico argumento, los ministros del máximo tribunal habían de-sechado un día antes la consulta propuesta por el Partido Acción Nacional (PAN), referida a incrementar los salarios mínimos.
El razonamiento jurídico esbozado por la Corte en ambos fallos permite ponderar el carácter improcedente y hasta absurdo de la redacción del referido artículo de la Constitución, modificado en el marco de la pasada reforma política. En sentido estricto, la realización de consultas vinculantes sobre cualquier asunto público puede afectar por principio los ingresos y gastos del Estado y, si se sigue ese precepto al pie de la letra, la Corte se tendría que ver obligada a de-sechar prácticamente cualquier propuesta de consulta popular sobre asuntos relevantes.
Por lo demás, con independencia de la estrechez mental con la que la mayoría de los magistrados decidió interpretar el precepto constitucional señalado, el rechazo a las propuestas referidas deja ver una cerrazón institucional contraria al espíritu de la reforma política comentada, que derivó en la inclusión de la figura de consultas populares en la Constitución, con el supuesto fin de dotar a la ciudadanía de herramientas para tener una mayor injerencia en la determinación de asuntos relevantes: cabe preguntarse hasta qué punto es esto posible con un entramado institucional que desecha a priori la realización de tales ejercicios.
En los casos referidos, las consultas propuestas por Morena, el PRD y el PAN resultan, con independencia de sus motivaciones políticas, sumamente relevantes y pertinentes, por cuanto giran en torno a asuntos de interés primordial y su no realización implica la validación de un estado de cosas nocivo para el país: la implementación de la privatización energética aprobada en el primer tramo de este sexenio mermará los ingresos públicos, afectará en consecuencia la capacidad del Estado para cumplir con sus responsabilidades básicas y colocará a la nación a merced de los poderes fácticos de las trasnacionales energéticas; por lo que hace a la negativa a consultar el cambio o la continuidad de la política salarial vigente, ello equivale a validar los ejercicios anuales de simulación –operados por la onerosa e inútil Comisión Nacional de Salarios Mínimos– contrarios al espíritu y la letra de la propia Carta Magna y nocivos para la economía, el desarrollo nacional y la propia gobernabilidad.
En suma, al margen de que los fallos judiciales referidos deriven de una interpretación literal del texto constitucional –como señalaron ayer y antier los ministros de la SCJN–, es evidente que ambos cancelan canales de expresión institucional para amplios sectores de la población que no están conformes con las decisiones que se toman desde las élites gubernamentales. Semejante actitud no tiene cabida en un régimen que se reclama democrático y constituye una exhibición de espíritu autocrático particularmente indeseable en el contexto de una sociedad exasperada y dolida que cada vez dispone de menos canales institucionales para expresar sus inconformidades ante el poder público. La jornada


Mexico SA

México SA
Listo, gasolinazo en 2015
Mayor precio que en EU
Senado aprueba aumento
Carlos Fernández-Vega
D
esde los quiméricos tiempos en los que México estaba a un tris de ingresar al primer mundo (Salinasdixit) el pretexto oficial ha sido que es necesario equiparar el precio interno con el externo (léase el de Estados Unidos), porque de otra suerte se aplicaría un injustificable subsidio a las gasolinas.
Cinco gerentes de Los Pinos al hilo (de Salinas a Peña Nieto) han utilizado tal justificación para elevar permanentemente el precio final de las gasolinas (la producida aquí y la de importación), tanto que a estas alturas dicho precio resulta 16.6 por ciento mayor al registrado en Estados Unidos, o lo que es lo mismo el mercado a equiparar.
En su campaña electoral tras el hueso mayor, Enrique Peña Nieto prometió bajar los precios de los combustibles y las tarifas eléctricas para beneficiar los bolsillos de los mexicanos. Y para alcanzar tal objetivo y concretar su oferta, dijo que era necesario aprobar una reforma energética moderna. El interés ciudadano antes que nada, según cacarearon los promotores de lamodernidad.
El susodicho descaradamente incumplió la primera parte de esa promesa, pero la segunda ya es ley (y ante cualquier eventualidad la Suprema Corte de Justicia de la Nación le limpió la alfombra), por mucho que entre una y otra no exista congruencia alguna, porque los precios de los combustibles y las tarifas eléctricas se mantienen al alza.
Durante el debate en torno a lareforma energética, el coro legislativo del Ejecutivo prometió unasustancial reducción en los precios y tarifas referidos, y a los mexicanos prometieron el paraíso si se llevaba a efecto la modernización sectorial, pero una vez aprobada por ambas cámaras el recule tricolor fue la norma, porque sus personeros de repente se dieron cuenta, por ejemplo, de que los precios de las gasolinas, “con todo y reforma no bajarán, porque se regirán por el mercado internacional y la oferta y la demanda.
Sin embargo, a estas alturas en Estados Unidos (el marco de referencia para la política de precios del gobierno mexicano) la oferta y la demanda internacional ha llevado los precios de las gasolinas a un promedio de 11.91 pesos por litro, mientras en México la Premium se vende a 13.89 pesos, sin olvidar que aún faltan por aplicar dos gasolinazos (los de noviembre y diciembre) en el presente año.
Actualmente el precio de la gasolina Premium en el mercado mexicano es equiparable al vigente en países como Jamaica y Sierra Leona, naciones que no extraen petróleo y, obviamente, menos lo refinan. Por si fuera poco, la segunda de ellas acumula décadas de una aterradora guerra civil que no tiene para cuando. A pesar de todo, el precio del litro es igual al del mercado mexicano, donde impera la paz social y una economíasólida y moderna.
El gobierno peñanietista enumerólos objetivos de la reforma energética: mejorar la economía de las familias; bajarán los recibos de la luz y el gas; al tener gas más barato, se podrá producir fertilizantes de mejor precio, lo que resultará en alimentos más baratos; aumentar la inversión y los empleos: se crearán nuevos trabajos en los próximos años; con las nuevas empresas habrá cerca de medio millón de empleos más en este sexenio y 2 y medio millones más para 2025, en todo el país; reforzar a Pemex y a CFE, las cuales seguirán siendo empresas 100 por ciento de los mexicanos y 100 por ciento públicas; reforzar la rectoría del Estado como propietario del petróleo y gas y como regulador de la industria petrolera. Eso, y mucho más.
Sin embargo, en un sondeo de opinión realizado por la Cámara de Diputados (la cual, a pesar de todo, aprobó la reforma) advierte que sobre la unánime percepción de que en nuestro país el precio de la gasolina es caro, de tal suerte que contrario a lo que podría esperarse como resultado de la campaña mediática referente a un eventual abaratamiento de las gasolinas ocasionado por la aprobación de la reforma constitucional en materia energética, una mayoría de los ciudadanos encuestados afirma que el precio de la gasolina no disminuirá, sino que por el contrario aumentará como resultado de la reforma energética.
Y, ¡sorpresa!, el precio de la gasolina no ha dejado de subir. De hecho, más allá de los dos gasolinazos pendientes del presente año, en el primer segundo de 2015 el gobierno federal aplicará, de golpe, un aumento de 3 por ciento al precio del combustible, con todo y su reformaaprobada.
Por si alguien tuviera la esperanza de que ello no sucederá, ayer el Senado de la República aprobó tal acción, mediante el voto del dúo dinámico PRI-PVEM, el cual abiertamente rechazó cancelar el mega gasolinazo de arranque de año. De hecho, el único cambio aprobado por esa instancia fue el tijeretazo (de 81 a 79 dólares) al precio del barril mexicano de exportación.
Tricolores y verdes simplemente levantaron el dedo e hicieron caso omiso de las advertencias de la oposición (la cual, por cierto, también aprobó la reforma energética”). Algunos de los señalamientos (se respeta sintaxis) de los que votaron en contra del citado 3 por ciento fueron los siguientes:
Hay alza de impuestos, desde luego; vean nada más el cambio que se da en el IVA, se va para arriba, ya se decía que hace un momento sin ninguna explicación, y otra alza de impuestos son los del impuesto especial sobre producción y servicios; en el IEPS aparece un crecimiento enorme que no está justificado más que por lo que están preparando, que son los nuevos gasolinazos, es decir, aquí toda la mentira de que teníamos que hacer la reforma energética para evitar el crecimiento este del déficit en materia de precio de gasolina, bueno, pues ahora ya van abiertamente y es al IEPS y el crecimiento del IEPS, que es un impuesto disfrazado, van a ser los precios de la gasolina, que son cada vez más apartados de los precios en Estados Unidos, que era el otro de los pretextos para hacer la reforma energética.
Uno más: esta ley (de Ingresos) plantea recaudar 24 mil millones de pesos de gasolinas, cuando la narrativa del gobierno ha insistido en que las gasolinas bajarán de precio en el corto plazo. Eso, es una mentira.Medraron en 2012 con los gasolinazos, hicieron sus campañas prometiendo que acabarían los gasolinazos, continuaron los deslizamientos; pero como viene el año de elecciones de 2015, entonces en un solo golpe nos van a recetar 40 centavos, porque están proponiendo que en enero la gasolina se aumente 3 por ciento.
Las rebanadas del pastel
En síntesis, todo para beneficiar el bolsillo de los mexicanos. Y el próximo sábado, otro gasolinazo.
Twitter: @cafevega


Impresiones de una jornada historica

Impresiones de una jornada histórica
Ignacio Ramonet
E
l martes 28 de octubre ha sido una jornada histórica.
Primero, porque no es frecuente que el Papa convoque, en el Vaticano, a un Encuentro Mundial de Movimientos Populares, en el que participan organizaciones de excluidos y marginados de los cinco continentes, y de todos orígenes étnicos y religiosos: campesinos sin tierras, trabajadores informales urbanos, recicladores, cartoneros, pueblos originarios en lucha, mujeres reclamando derechos, etcétera... En suma, una asamblea mundial de los pobres de la Tierra. Pero de los pobres en lucha, no resignados.
Segundo, es menos frecuente aún que el Papa se dirija directamente a ellos, en el Vaticano, diciéndoles que quiere escuchar la voz de los pobresporque los pobres no se conforman con padecer la injusticia sino que luchan contra ella y que él (el Papa)los quiere acompañar en esa lucha. También ha dicho Francisco que los pobres ya no esperan de brazos cruzados por soluciones que nunca llegan; ahora los pobres quieren ser protagonistas para encontrar ellos mismos una solución a sus problemas, pues los pobres no son seres resignados, sino protestan y su protesta molesta. Ha dicho que espera que el viento de la protesta se convierta en vendaval de la esperanza.
Asimismo ha afirmado el Papa:La solidaridad es una forma de hacer historia. Y por eso se une al pedido de los pobres que reclaman tierra, techo y trabajo. Y ha añadido: “Cuando pido para los necesitados tierra, techo y trabajo, algunos me acusan de que ‘¡el Papa es comunista’! No entienden que la solidaridad con los pobres es la base misma de los Evangelios”.
También ha afirmado Fran­cisco:¡La reforma agraria es una necesidad no sólo política sino moral! Y ha acusado (sin nombrarlo) al neoliberalismo de ser la causa de muchos de los males de hoy: “Todo esto ocurre –ha afirmado– cuando se saca al ser humano del centro del sistema y que en ese centro está ahora el dinero”. Por eso hay que alzar la voz, ha repetido. Y ha recordado quelos cristianos tenemos un programa que me atrevería a calificar de revolucionario: las bienaventuranzas del Sermón de la Montaña, del Evangelio según san Mateo.
Un discurso fuerte, valiente, que se inscribe en el filo directo de la doctrina social de la Iglesia que el papa ha reivindicado explícitamente. Y en la opción preferencial por los pobres.
Hacía mucho tiempo que un Papa no pronunciaba un discurso tan social, tan progresista sobre un tema, el de la solidaridad con los pobres, que constituye la base misma de la doctrina cristiana.
Tercero. Todo esto ha sido tanto más importante cuanto que este discurso, el Papa lo ha pronunciado en presencia del presidente de Bolivia, Evo Morales, ícono de los movimientos sociales y líder de los pueblos originarios. Un momento más tarde, el presidente Morales, muy aplaudido, ha tomado la palabra ante el mismo auditorio de movimientos populares en lucha para explicar, con muchos ejemplos, que el capitalismo que todo lo compra y todo lo vende ha creado una civilización despilfarradora. Ha insistido en quehay que refundar la democracia y la política, porque la democracia es el gobierno del pueblo y no el gobierno de los capitales y de los banqueros. También ha puesto el acento en quehay que respetar a la madre Tierra y oponerse a que los servicios básicos sean privatizados. Ha sugerido a todos los movimientos populares aquí reunidos que creen una gran alianza de los excluidos para defender losderechos colectivos.
El sentimiento general de los participantes, en este inédito encuentro, es que estas dos intervenciones confirman el enorme liderazgo político y moral, a escala internacional, del presidente Evo Morales; y el nuevo papel histórico del papa Francisco, como abanderado solidario de las luchas de los pobres de América Latina y de los marginados del mundo.


Economia Moral

Economía Moral
Teorías y controversias sobre pobreza y persistencia del campesinado/ III
Análisis comparativo de tres teorías al respecto
Julio Boltvinik
Foto
E
n la entrega del 17/10/14 contesté la primera de seis preguntas ahí planteadas, referida a las características diferenciales de la agricultura y la industria, así como sobre sus consecuencias en la persistencia y pobreza del campesinado. Abordo hoy tres teorías que contestan las preguntas (2 y 3) sobre por qué persiste el campesinado y por qué casi todos los campesinos son pobres: 1) estacionalidad agrícola (Boltvinik); 2) renta diferencial de la tierra (Bartra); y 3) obstáculos a la agricultura capitalista (Contreras-Mann-Dickinson).
La estacionalidad agrícola se refleja en demanda desigual de fuerza de trabajo (FdeT) durante el año. Según mi teoría, la pobreza campesina está determinada porque, en el capitalismo, los precios sólo reflejan (como costos) los salarios de los días en efecto trabajados y pagados, ya que los capitalistas no se hacen cargo de la reproducción del asalariado agrícola durante todo el año. Dado que productores campesinos independientes concurren, como tomadores de precios a los mismos mercados que las empresas capitalistas, los precios de sus productos sólo pueden remunerar los días en efecto trabajados. Es decir, el costo social de la estacionalidad es absorbido por los campesinos, que se ven forzados a vivir en pobreza permanente como proletarios estacionales errantes buscando ingresos adicionales. Pero lo dicho implica, también, que el capitalismo agrícola no puede existir en forma pura: sin la oferta estacional de la FdeT campesina; sin ella la agricultura capitalista sería imposible pues no habría (casi) nadie dispuesto a trabajar sólo durante de los periodos de siembra/cosecha. La persistencia de la agricultura campesina no sólo es funcional sino indispensable para el ser del capitalismo agrario. La simbiosis entre ambos es inevitable. Pero un campesino sólo se verá obligado a vender estacionalmente su FdeT (y estará dispuesto a venderla barato) si es pobre. Tal simbiosis tiene que ser con campesinos pobres,preparados para (y urgidos de) vender su fuerza de trabajo una parte del año. Mi teoría explica tanto la persistencia como la pobreza campesina. Si bien los capitalistas no podrían vivir sin los campesinos, éstos estarían mucho mejor sin el capital, para el cual el trabajo es un costo variable: sólo paga los días por los cuales contrata la mano de obra. En cambio, para la economía familiar campesina es uncosto fijo: siempre tiene que proveer para la reproducción de toda la familia. En mercados agrícolas en los que todos los proveedores fuesen unidades familiares, los precios agrícolas reflejarían el costo anual de reproducción de la FdeT y serían, por tanto, más altos que los actuales. La causa más general de la pobreza campesina habría desparecido.
La renta diferencial explica lapersistencia campesina según Armando Bartra, quien desarrolla la siguiente argumentación: a) puesto que los medios de producción principales en la agricultura sonnaturales (tierra, agua, clima) yfinitos, el aumento de la oferta agrícola tiene que basarse en medios naturales cada vez menos productivos; b) la industria, cuyos medios básicos son producidos por el ser humano tiene una tendencia a la homogeneidad entre productores, pero en la agricultura las cosechas con rendimientos desiguales son inevitables; c) puesto que la oferta originada en tierras marginales es necesaria para evitar hambrunas, estas tierras determinarán el precio del cultivo, generando un amplio espectro de rentas diferenciales; d) estas rentas diferenciales afectarán la distribución del excedente entre ramas del capital, beneficiando a los capitalistas agrícolas y dañando a los demás; e) pero el campesino, como todo productor mercantil simple (como el artesano), tiene un precio mínimo más bajo que el capitalista para continuar produciendo (pues no requiere obtener ni la tasa media de ganancia, ni renta del suelo), y ocupando tierras marginales actúa como factor amortiguador de la renta diferencial de la tierra, disminuyéndola sustancialmente; f) esta función de los campesinos evita tasas desmesuradas de ganancia de los capitalistas agrícolas de alta productividad. Bartra acepta la idea de que los campesinos absorben el costo total de la estacionalidad en concordancia conmigo. De ahí deriva la tesis de que los campesinos están sujetos a una explotación poli-morfa: a) al absorber el costo de la estacionalidad; b) al vender su fuerza de trabajo; y c) al migrar. Para mí la explotación campesina derivada de la estacionalidad es en realidad explotación por la sociedad en su conjunto, en la forma de precios bajos de los alimentos. Su teoría es original y complementaria de la mía. Sin embargo, no prueba de manera contundente la necesidad de disminuir el monto de la renta diferencial para el desarrollo del capitalismo, ni como se impone tal necesidad.
Obstáculos al agro-capitalismo es la teoría sostenida por Susan A. Mann y James Dickinson (Obstacles to the Development of a Capitalist AgricultureJournal of Peasant Studies, 1978), y por Ariel Contreras (Límites de la producción capitalista en la agriculturaRevista Mexicana de Sociología, 1977). La persistencia del campesinado se explicaría por obstáculos derivados de la diferencia entre tiempo de trabajo y tiempo de producción, distinción de Marx en el Libro II de El Capital, quien divide el tiempo de producción en dos periodos: uno en el cual el trabajo es aplicado a la producción y otro en el cual los bienes no terminados son dejados en manos de la influencia de procesos naturales. Notan, siguiendo a Marx, que mientras más veces rota el capital en un año, más alta será la tasa de ganancia, de lo cual, siendo innegable, no se deriva la conclusión que actividades como la agrícola con rotaciones lentas del capital, es probable que no resulten atractivas para el capital y, por tanto, sean dejadas en manos del pequeño productor. Esta conclusión no considera que, para Marx, la tasa de ganancia obtenida por el capital depende de los precios de producción y no de los valores, (Libro III de El Capital), quien señala la tendencia a la igualación de las tasas de ganancia entre ramas de la producción. Al alejarse los precios de producción de los valores para compensar las diferencias en la composición orgánica del capital para producir tal igualación, también compensan la más lenta rotación del capital. La diferencia entre tiempo de trabajo y de producción es la otra cara de la moneda de la estacionalidad agrícolacomo lo reconocen Mann y Dickinson al señalar que “la no identidad de los tiempos de producción y de trabajo,impone a los capitalistas un problema de reclutamiento y administración del trabajo... el capitalista tiene que atraer y mantener su fuerza ‘temporal’ de trabajo con altos salarios o depender de los miembros de la sociedad más desesperados y marginales como en el uso de trabajadores rurales migrantes”. Su punto de partida y el mío coinciden. Dicho problema de reclutamiento explica la mecanización temprana de la agricultura (Véase gráfica con datos de Lenin sobre la mecanización en Alemania a finales del siglo XIX).


La Convencion Nacional Campesina e Indigena

La Convención Nacional Campesina e Indígena
Roberto Rico*
L
a Convención Nacional Campesina e Indígena se realizó el 14 y 15 de octubre en la ciudad de México. Entre los pasos dados y con la certeza de que los hombres y mujeres de México indígenas y campesinos originarios de estas tierras, tenemos derecho a tener derechos, 59 organizaciones, entre campesinas, indígenas y populares, con presencia en las 32 entidades del país, se sumaron a ella.
La convención se declaró en alerta puesto que la agresión a los alumnos de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos no fue fortuita, ni aislada. Es la aplicación de la criminalización y judicialización de la lucha social y el resultado de la política sistemática de violaciones a los derechos humanos en contra de todos los mexicanos y una muestra inequívoca de la estrategia de represión dirigida contra el movimiento social organizado, lo cual es terrorismo de Estado.
Los campesinos e indígenas participantes en la reunión polemizaron sobre las políticas neoliberales que sólo pavimentan el camino del libre comercio en contra de la vida en sus comunidades. Documentaron cómo los precios de sus productos están por los suelos, debido a la presencia de monopolios, oligopolios y la apertura indiscriminada de nuestras fronteras con el Tratado de Libre Comercio, convirtiéndose en un instrumento de colonización económica.
La convención declaró que las reformas estructurales recientemente aprobadas no llevan al desarrollo ni al progreso, como tanto pregona la clase política, sino por el contrario conducen a la profundización de la crisis política, económica, social y medioambiental.
Declararon seguir el camino de la unidad de nuestras organizaciones sobre nuestras coincidencias dejando a un lado nuestras diferencias. Esta unidad es un trabajo complejo, no de voluntades sino de resistencias, acciones y resultados.
Propiciar el acercamiento entre los variados componentes que integran el mosaico de dirigencias, con base en el respeto mutuo a las aspiraciones y demandas de cada organización y en contra de las reformas estructurales, es una tarea complicada. Poner en el centro el interés general, trazando demandas transversales, les ha permitido a estas organizaciones alcanzar algunos avances para la convergencia de los movimientos sociales campesinos e indígenas.
La convención trabajó en torno a tres grandes temas. Uno. El campo mexicano, y cómo construir un programa de nación que incluyó una variedad de aspectos que contuvieron desde la soberanía alimentaria, el fortalecimiento de la propiedad social de la tierra, la crisis civilizatoria y elagrocidio neoliberal, economía popular y solidaridad campo-ciudad, hasta la consulta popular contra la reforma energética y la lucha por las libertades democráticas y la amnistía para las y los luchadores sociales y presos políticos, entre otros muchos subtemas.
Dos. La defensa de los recursos naturales, sus territorios y en contra de la política extractivista y rentista; la protección de su patrimonio económico, social y cultural; la consumación de la ley de consulta y consentimiento previo, y en contra de la represión y criminalización de los movimientos sociales.
Y tres. Un plan de acción y unidad para darle sustento a esa construcción, difícil, ardua y no exenta de eventuales desconfianzas y recelos, para la arquitectura de un movimiento unificado de las luchas indígenas, campesinas y populares, para llevar a cabo –concluyeron los participantes– una revolución, no armada como hace 100 años, sino una revolución ideológica, para modificar el rumbo del país.
Los convencionistas se pronunciaron respecto a la ejecución extrajudicial de seis personas, entre ellas tres estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, Guerrero, las graves lesiones a 20 jóvenes y la desaparición de 43 estudiantes normalistas. La convención condenó al Estado mexicano por el crimen que cometió contra los estudiantes de la normal de Ayotzinapa, Guerrero, y exigió, entre otras demandas, la presentación con vida de los 43 estudiantes normalistas.
Para impulsar un plan de acción y luchar por las demandas propias y las exigencias planteadas, la convención aprobó formar una comisión coordinadora permanente de la convención campesina indígena. En ese plan de acción destacan, entre otros puntos, una jornada de lucha en defensa de la economía urbana y campesina, precios justos de alimentos, para el próximo 5 de noviembre; conmemorar el centenario de la toma de la ciudad de México por la División del Norte y el Ejército del Sur el 6 de diciembre comandados por los generales Villa y Zapata; realizar la Asamblea Nacional de Ejidos y Comunidades en Defensa de la Propiedad Social de la Tierra y el Territorio”, en el puerto de Veracruz, al cumplirse el centenario de la Ley Agraria el 6 de enero del 2015; el 31 de enero llevar a cabo una movilización en la ciudad de México con la consigna de no a la entrega de nuestro territorio y recursos naturales. La convención cerrará su primera sesión el 10 de abril de 2015.
Muchos son los retos que aún quedan pendientes de enfrentar. Uno de ellos es convencer y acercarse a otras organizaciones campesinas e indígenas que no estuvieron presentes en la convención, por diversas razones. El desafío es persuadir con la movilización y la firmeza ante el Estado, ya que serán el mejor argumento para sumar fuerzas y voluntades.
* Dirigente campesino, autor del libro El retorno: la Unión de Colonias Populares del Valle de México


La masacre como forma de dominacion

La masacre como forma de dominación
Raúl Zibechi
M
ientras sostenía el Premio Tata Vasco 2014, entregado por la Universidad Iberoamericana en Puebla a Fudem (Fuer­zas Unidas por Nuestros Desaparecidos en México), uno de los pocos varones del grupo de 25 familiares que acudieron al acto gritó: Esto es una guerra. El dolor inimaginable de los familiares los fuerza a mirar de frente y sin vueltas la realidad que sufren.
En efecto, hay una guerra contra los pueblos. Una guerra colonial para apropiarse de los bienes comunes, lo que supone la aniquilación de aquellas porciones de la humanidad que obstaculizan el robo de esos bienes, ya sea porque viven encima de ellos, porque se resisten al despojo o, simplemente, porque sobran, en el más crudo sentido de que son innecesarios para la acumulación de riqueza.
Una guerra colonial, además, por el tipo de violencia que utiliza. No sólo se asesina. Se decapita y se desmiembra para regar las partes a la vista de la población, como escarmiento y advertencia. Para infundir miedo. Para paralizar, impedir cualquier reacción, en particular las acciones colectivas.
No se trata de una tecnología novedosa. Fue utilizada por la Corona española para aniquilar las luchas indígenas. Allí la aprendieron los nuevos colonizadores. Túpac Amaru fue descuartizado vivo delante de la multitud reunida en la plaza de armas de Cusco.
Amaru fue obligado a presenciar la tortura y asesinato de sus dos hijos mayores y de su esposa, además de otros familiares y amigos. Antes de morir fueron torturados, les cortaron la lengua, todo un símbolo de lo que realmente molestaba a los conquistadores. El hijo menor, de sólo 10 años, fue obligado a presenciar la tortura y muerte de toda la familia, para ser luego desterrado a África.
La cabeza de Amaru fue colocada en una lanza exhibida en Cusco y después en Tinta, sus brazos y piernas fueron enviados a ciudades y pueblos para escarmiento de sus seguidores. Túpac Katari y sus seguidores sufrieron más o menos los mismos tormentos y sus restos fueron también esparcidos por los territorios de lo que hoy es Bolivia. No es nueva la crueldad de los nuevos conquistadores. Antes se trataba de apoderarse del oro y la plata; ahora es la minería a cielo abierto, los monocultivos y las hidroeléctricas. Pero en el fondo, se trata de mantener a los de abajo en silencio, sometidos y quietos.
La masacre es la genealogía que diferencia nuestra historia de la europea. Aquí las formas de disciplinamiento no fueron ni el panóptico ni el satanic mill, la fábrica del diablo de la Revolución Industrial y la explotación capitalista, retratada por el poeta William Blake y analizada con rigor por Karl Polanyi. El cercamiento de campos a partir del siglo XVI en Inglaterra, una revolución de los ricos contra los pobres, es analizada como el quebrantamiento de los viejos derechos y costumbres por los señores y nobles, “utilizando en ocasiones la violencia y casi siempre las presiones y la intimidación” (La gran transformaciónLa Piqueta, p. 71, subrayado mío).
Aquí la violencia fue, y es, la norma, el modo de eliminar a los rebeldes (como en Santa María de Iquique, Chile, en 1907, cuando fueron masacrados 3 mil 600 mineros en huelga). Es el modo de advertir a los de debajo de que no deben moverse del lugar asignado. Aquí hemos tenido, y tenemos, esclavitud; nada que se parezca al trabajador libre que promovió el desarrollo del capitalismo europeo al robarles las tierras a los campesinos.
Nótese que en las guerras de independencia entre criollos y españoles, los insurgentes apresados por los realistas no fueron torturados. Miguel Hidalgo y José María Morelos, por mencionar destacados rebeldes criollos, fueron juzgados y luego fusilados como se hacía en la época con los prisioneros de guerra. Sólo el color de piel explica el diferente trato que tuvieron Túpac Katari y Túpac Amaru, como todos los indios, negros y mestizos de nuestra América.
No es historia. En el Brasil democrático, la organización Madres de Mayo contabiliza, entre 1990 y 2012, 25 masacres, todas de negros y pardos, como la que dio origen a su militancia: en mayo de 2006, en el contexto de la represión al Primer Comando de la Capital de Sao Paulo(narcos organizados desde las cárceles), fueron asesinados 498 jóvenes pobres, varones de 15 a 25 años, entre las 10 de la noche y las 3 de la madrugada por la policía.
El narco es la excusa. Pero elnarco no existe. Son los negocios que forman parte de los modos de acumular/robar de la clase dominante. No estamos ante excesos policiales esporádicos, sino ante un modelo de dominación que hace de la masacre el modo de atemorizar a las clases populares para que no se salgan del libreto escrito por los de arriba, y que le llaman democracia: votar un día cada cinco o seis años y dejarse robar/asesinar el resto del tiempo.
Lo peor que podemos hacer es no mirar la realidad de frente, hacer como si la guerra no existiera porque todavía no te han golpeado, porque todavía sobrevivimos. Esto es contra todos y todas. Es cierto que hay una porción que aún pueden expresarse libremente, manifestarse incluso, sin ser aniquilados. Siempre que no se salgan del libreto, que no pongamos en cuestión el modelo. Bien mirado, los que podemos manifestarnos a cara descubierta somos algo así como los criollos de las guerras de independencia, los que pueden esperar una muerte digna, como Hidalgo y Morelos.
Pero el tema es otro. Si queremos de verdad que el mundo cambie, y no usar la resistencia de los de abajo para treparnos arriba, como hicieron los criollos en las repúblicas, no podemos conformarnos con maquillar lo que hay. Se trata de tomar otros rumbos.
Tal vez un buen comienzo sea continuar los pasos de los seguidores de Amaru y Katari. Reconstruir los cuerpos despedazados para reiniciar el camino, allí donde el combate fue interrumpido. Es un momento místico: mirar el horror de frente, trabajar el dolor y el miedo, avanzar tomados de las manos, para que los llantos no nos nublen el camino.


jueves, 30 de octubre de 2014

Aplastamiento de un derecho

Aplastamiento de un derecho
Pablo Gómez
La Suprema Corte ha negado el ejercicio del derecho constitucional a la consulta popular incluido en el artículo 35. Los conceptos y frases inventados en la Corte que no tienen nada que ver con la fracción VIII del referido precepto de la Carta Magna. Cuando se hizo la reforma, el Congreso no admitió lo que los togados están inventando: que de las consultas populares no pueda resultar algún gasto o ingreso. Si así fuera no habría nunca consultas porque todos los temas podrían costar o dar dinero.
Dice la norma vigente: “No podrán ser objeto de consulta popular la restricción de los derechos humanos reconocidos por esta Constitución; los principios consagrados en el artículo 40 de la misma; la materia electoral; los ingresos y gastos del Estado; la seguridad nacional y la organización, funcionamiento y disciplina de la Fuerza Armada permanente.” ¡Basta! No hay más.
Lo que dice la Constitución es que no puede haber votación popular sobre las normas que rigen las contribuciones y los presupuestos públicos así como el financiamiento y el pago de la deuda. Eso fue lo que el Congreso quiso dejar fuera de las consultas como ocurre en casi todo el mundo. Más aún cuando la litis de la consulta pedida por el PRD, así como la solicitada por Morena, abarca precisamente que con la reforma energética no habrá ingresos unitarios adicionales al fisco. Pero la decisión de la Corte (excepto Cosío) no ha sido sobre la validez de la consulta solicitada sino un apoyo al contenido de la reforma energética cuestionada. Se trata de ganar pero por la vía de la negación del derecho a la consulta popular.
La Corte ha llegado al extremo de declarar inconstitucional la petición de consulta sobre la legislación de energía por “tener como parte de su objeto restricciones a los derechos humanos”. ¿Cuáles? Los togados responden: el derecho a un medio ambiente sano. Y, tendidos en la mentira, afirman que en los preceptos de la reforma de las industrias de la energía se recomienda cuidar el medio ambiente. En este marco no es posible siquiera discutir. Por último, se afirma que la pregunta propuesta por el PRD no es sencilla ni comprensible y, para no dejar duda de la ficticia oligofrenia de la ponencia aprobada en la Corte, se recomienda como criterio rector de los “casos futuros” que la pregunta se circunscriba a una sola decisión legislativa o administrativa. Pero justamente la pregunta del PRD era sobre un solo acto legislativo: la reforma constitucional de energía. En síntesis, se dice que no procede la consulta porque la pregunta es de difícil respuesta para la generalidad de las personas. ¡Esta es la Suprema Corte de Justicia de la Nación!
Ahora bien, ¿para qué se estableció el derecho popular a la consulta? Para poder resolver mediante el voto las grandes discrepancias y contradicciones, para que todo mundo sepa que siempre habrá una manera de zanjar la más grande diferencia acudiendo a la votación popular, es decir, a la intervención del soberano por encima de las confrontaciones entre los bandos políticos.
En la Corte la democracia causa pánico, no se entiende lo más elemental y se camina por recovecos dizque técnicos que no son de este mundo. Que no se diga en la Corte que el gobierno no presiona para evitar cualquier consulta popular. Al margen de pamplinas, la cuestión es de carácter político: la democracia puede ser vista como perniciosa cuando resulta contraria a los intereses económicos de una oligarquía que domina el país.
Lo peor de todo es que la negación de las consultas planteadas va a llevar a nulificar por algún tiempo el derecho a la consulta popular. ¿Para qué juntar millones de firmas si hay once personas que se han ubicado por encima de la Constitución y niegan al pueblo el derecho a la consulta? Después, se hará necesario cambiar la Corte para recobrar ese derecho.

Poder militar y acumulacion de capital

El Pentágono y las grandes petroleras
Poder militar y acumulación de capital


Traducido del inglés para Rebelión por Carlos Riba García

IntroducciónNo hay duda de que tras las conquistas militares estadounidenses, guerras, ocupaciones y sanciones –y durante unos cuantos años después–, las corporaciones estadounidenses han salido perdiendo en relación con posibles sitios donde invertir provechosamente. Las pérdidas mayores se han dado en la explotación de recursos naturales –sobre todo, gas y petróleo– en Medio Oriente, el Golfo Pérsico y Asia del Sur.
Como resultado de ello, los observadores han especulado acerca de profundas fisuras e intereses contradictorios en el interior de la clase dirigente estadounidense. Su argumento es que, por un lado, las elites políticas vinculadas con los grupos de presión proisraelíes y el poderoso complejo industrial-militar promueven una política exterior altamente militarizada y, por el otro, algunas de las corporaciones más grandes y ricas tratan de encontrar soluciones basadas en la diplomacia.
Aun así, da la impresión de que la “división en las altas esferas” no se ha materializado. Por ejemplo, no hay pruebas de que las empresas multinacionales del petróleo hayan procurado oponerse a las guerras de Iraq, Libia, Afganistán y Siria. Tampoco las 10 mayores empresas petrolíferas –con un activo neto por encima del 1.100.000 millones de dólares– movilizaron sus lobbies e influencias en los medios por la causa de una penetración pacífica del capital y una dominación de los yacimientos hidrocarburíferos por medio de sus clientes neoliberales.
En el periodo previo a la guerra de Iraq, las tres mayores empresas estadounidenses del sector del petróleo –Exxon-Mobil, Chevron y Conoco Phillips–, impacientes por explotar la tercera reserva mundial de crudo, no hicieron lobby en el Congreso ni ejercieron presión sobre la administración Bush o, más tarde, la administración Obama para conseguir una solución pacífica del conflicto. De nada sirvió que las “Big Ten”* desafiaran con una política alternativa al lobby israelí a favor de la guerra y sus falsos argumentos que aseguraban que Iraq tenía armas de destrucción masiva.
Una “pasividad política” similar se puso en evidencia durante el periodo anterior a la guerra en Libia. En realidad, las grandes petroleras estaban a punto de firmar unos lucrativos acuerdos cuando los militares de Washington volvieron a golpear y destruyeron el gobierno libio e hicieron trizas la estructura económica libia.
Es posible que las grandes petroleras hayan lamentado la pérdida del crudo y de los beneficios económicos pero no hubo un esfuerzo concertado –ni antes ni después de la debacle libia– para examinar críticamente o evaluar la pérdida de la muy importante región productora de crudo. En el caso de las sanciones económicas contra Irán, que posee la segunda reserva mundial de hidrocarburos, las multinacionales se hicieron notar por su ausencia en los pasillos del Congreso y el departamento del Tesoro. Los prominentes sionistas y responsables políticos Stuart Levey y David Cohen diseñaron y pusieron en marcha unas sanciones que impedían invertir o comerciar con Teherán a cualquier empresa petrolífera de Estados Unidos (y de la Unión Europea).
De hecho, a pesar de la aparente diferencia de intereses entre una política exterior altamente militarizada y el esfuerzo global de la corporación multinacional destinado a la acumulación de capital, no han surgido conflictos de tipo político. La pregunta básica que se hace este documento es esta: ¿Por qué la más importante corporación multinacional agacha la cabeza ante una política exterior imperial de la cual resulta la pérdida de oportunidades económicas?
Por qué fracasa la corporación multinacional si se trata de oponerse al militarismo imperial
En la cuestión del acomodamiento de la corporación multinacional a la altamente militarizada expansión imperial hay varias hipótesis posibles.
En primer lugar, los CEO2 de la corporación multinacional quizá pensaran que las guerras, sobre todo la de Iraq, serían breves y conducirían a una etapa de estabilidad bajo un régimen clientelar deseoso y capaz de privatizar y desnacionalizar el sector del petróleo y el gas. En otras palabras, las elites del petróleo compraron los argumentos de Runsfeld, Cheney, Wolfowitz y Feith, que decían que “la guerra se pagaría sola”.
En segundo lugar, incluso después de la larga y destructiva guerra y la profundización de los conflictos sectarios, muchos CEO creían que la década perdida se compensaría con una “larga etapa” de ganancias. Pensaban que los beneficios fluirían una vez que se estabilizara el país. Sin embargo, las mayores entradas por el crudo habidas después de 2010 resultaron inmediatamente amenazadas por la ofensiva del Estado Islámico. Los “tiempos” imaginados por los estrategas fueron al menos subestimados, si no totalmente equivocados.
En tercer lugar, la mayor parte de los CEO creía que la invasión de Libia por fuerzas de EEUU y la OTAN daría lugar a una situación de propiedad monopólica con beneficios mayores de los que recibían de la empresa mixta (mitad pública, mitad privada) con el régimen de Gadafi. Los principales del petróleo pensaban que se harían con el control total o monopólico del sector. Es decir, que la guerra permitiría que la corporación multinacional del crudo tuviera asegurados beneficios monopólicos durante un prolongado periodo. En lugar de eso, el final de una asociación estable condujo a la corporación a un mundo hobbesiano en el que el caos inhibió cualquier beneficio económico extraordinario y de largo plazo.
En cuarto, la corporación multinacional, incluyendo las del sector del petróleo, había invertido en cientos de empresas de varias docenas de países. Estas empresas no se vinculan con una sola localización. Dependen entonces de un estado imperial militarizado que defienda sus intereses globales. Por lo tanto, es probable que estén poco dispuestas a cuestionar o desafiar a los militares en, digamos Iraq, por el temor de que eso podría poner en peligro intervenciones imperiales estadounidenses en otros sitios del mundo.
En quinto término, muchas multinacionales están entrelazadas en distintos sectores económicos: invierten en campos petrolíferos y en refinerías; en bancos, financieras y aseguradoras, como también en distintos sectores extractivos. Según su grado de diversificación del capital, las corporaciones son más o menos dependientes en cada región, sector de actividad o fuente de beneficios. Por consiguiente, las guerras destructivas que se produzcan en uno o en varios países, es posible que no tengan efectos tan perjudiciales como sucedía en el pasado, cuando las grandes petroleras solo se ocupaban del petróleo.
En sexto lugar, el énfasis de las agencias del estado imperial de EEUU está puesto mayormente en las actividades militares y no en las de tipo económico. El grueso de la burocracia internacional de Estados Unidos está compuesto por oficiales militares, de inteligencia y de contrainsurgencia. Por el contrario, China, Japón, Alemania y otros países emergentes (Brasil, Rusia e India) tienen un gran componente económico en su burocracia de ultramar. La diferencia es importante. Las corporaciones estadounidenses no tienen acceso a funcionarios del ámbito económico como sí lo tienen las grandes empresas chinas. La expansión de China y sus corporaciones fuera de sus fronteras se ha construido alrededor de un sistema de poderosos apoyos económicos y agencias. Las corporaciones estadounidenses deben tratar con jefes de las Fuerzas Especiales, agentes secretos y “funcionarios” muy militarizados. En otras palabras, es ineludible que el CEO en búsqueda de “apoyo estatal” se vea frente a interlocutores militares en su mayor parte, que ven a las corporaciones como instrumentos de su política en lugar de sujetos políticos.
Séptimo, los últimos 10 años han sido testigos del surgimiento del sector financiero como destinatario dominante del apoyo gubernamental. Como resultado de ello, la gran banca ejerce una importante influencia en las políticas públicas. Siendo así, la verdad es que mucho del dinero del “negocio del petróleo” ha ido a parar a las finanzas y a los beneficios acumulados por el saqueo del Tesoro. Como consecuencia de esto, los intereses del petróleo se fusionan con los del sector financiero; en gran medida, sus “beneficios” dependen del estado, como sucede en las explotaciones en el extranjero.
En octavo término, mientras las grandes petroleras tienen enormes sumas de capital, localizaciones diversas y diversificación de actividades, su dependencia de la protección estatal (militar) debilita la oposición que puedan sentir en relación con las guerras que Estados Unidos libre en países con posibilidades de lucro relacionadas con el petróleo. Como consecuencia de esto, otros poderosos lobbies que abogan por la guerra y no se ven exigidos por esas limitaciones gozan de total libertad. Por ejemplo, los sectores de poder que trabajan a favor de Israel tienen bastante menos “capital” que cualquiera de las 10 petroleras más importante; sin embargo, cuentan con un número mayor de lobbistas con mucha más influencia sobre los congresistas. Por otra parte, su propaganda (apalancamiento mediático) es mucho más efectiva que la de las grandes petroleras. Son muchos los críticos de la política exterior de Estados Unidos, incluyendo sus políticas relacionadas con el uso de la fuerza militar y de las sanciones, que están más dispuestos a criticar a las grandes petroleras que a los lobbies sionistas.
Finalmente, el aumento de la producción estadounidense de hidrocarburos como resultado del empleo de la tecnología del fracking proporciona a las grandes petroleras nuevas localizaciones –lejos de Medio Oriente– donde obtener beneficios económicos, incluso pensando que los costos pueden ser mayores y de menor duración las explotaciones. La industria del petróleo ha reemplazado las pérdidas en Medio Oriente –debidas a las guerras– con inversiones en el territorio nacional.
No obstante, existe tensión y conflicto entre el capital ligado al petróleo y el poder militar. El caso más reciente tiene que ver con los planes de inversión de Exxon-Mobil por un total de 38.000 millones de dólares en un emprendimiento conjunto –con la concesión petrolera rusa Rosneft– en el Ártico ruso. Las sanciones contra Rusia impuestas por Obama han paralizado el acuerdo, lo que ha provocado gran consternación de los CEO de Exxon-Mobil, que ya había invertido 3.200 millones de dólares en una zona tan extensa como el estado de Texas.
Conclusión
Es posible que los conflictos –los latentes y los ya manifiestos– entre el poder militar y la expansión económica al final encuentren una mayor articulación en Washington. Sin embargo, de momento, debido a las estructuras globales y a la orientación de la industria del petróleo y a su dependencia de los militares para la “seguridad”, esta industria en particular, y las corporaciones multinacionales en general, han sacrificado los beneficios en el corto y el mediano plazo pensando en “ganancias futuras”, con la esperanza de que las guerras se acabarán y regresarán así los beneficios más lucrativos.
Notas:
1. “Big Ten”, las 10 principales empresas petrolíferas de EEUU. (N. del T.)
2. CEO es el acrónimo de chief executive officer, la máxima autoridad ejecutiva en una empresa. (N. del T.)
 
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Ayotzinapa en el teatro de sombras

Ayotzinapa en el teatro de sombras
Octavio Rodríguez Araujo
N
o resuelve nada el cambio de gobernante en Guerrero, como no se ha resuelto nada en el país con la alternancia PRI-PAN-PRI. El país va de mal a peor y lo ocurrido en Iguala es sólo una macabra muestra de la deshonestidad de los políticos del sistema, independientemente del partido al que pertenezcan. Todos ellos son cómplices del ejercicio del poder no sólo de espaldas a la población mayoritaria sino en contra de ésta. El enemigo de ese poder es la sociedad, y más todavía si protesta.
La tragedia de los estudiantes normalistas y de sus familiares que viven en incertidumbre, ya que no han perdido la esperanza de que sean encontrados vivos, es una muestra de la descomposición que impera en las esferas del poder, desde el municipal hasta el nacional. Lo ocurrido en Iguala no debió pasar, pero ahí está todavía sin que conozcamos bien a bien los motivos detrás del crimen. Se sabe quiénes fueron los responsables directos pero no ha quedado claro el móvil. ¿Porque son criminales? Esto no es explicación. El país está lleno de gente buena y de delincuentes. El problema es que éstos llevan la delantera y en su mayoría quedan impunes, pues los que tienen el poder formal para combatirlos han demostrado impericia, cuando no han sido sus propiciadores por estrategias equivocadas.
Cuando se gobierna para los grandes capitales, nacionales y extranjeros, el resto de la población es visto como complemento y a veces como prescindible: mano de obra, en el mejor de los casos. Por lo mismo, los pobres no sólo son la negación sistemática del otro, sino las víctimas de un poder dedicado a privar al otro de todo atributo de humanidad (recordando a Frantz Fanon). Tolerados pero incómodos, y todavía peor: carne de cañón, es decir, a quienes, por pobres, se les expone sin contemplaciones a sufrir cualquier clase de daño, incluso la muerte. Los pobres, diría Pablo González Casanova, son las víctimas preferentes del colonialismo interno, de aquellos que una vez en el poder mantienen y renuevan las estructuras colonialesdel pasado para evitar que esos mismos pobres traten de emanciparse y alcanzar su realización en un mundo crecientemente desigual.
Los principales partidos políticos tienen mucha de la culpa de lo que es el país en la actualidad; pero no por ser partidos, sino porque sus bases están compuestas en mayoría porasimilados, es decir, por militantes o afiliados que no los usan sino que son usados. Se habla de democracia, pero esas bases no la exigen en el interior de sus organizaciones, les ceden su soberanía personal y colectiva a sus dirigentes y luego los obedecen como si fueran sus empleados o soldados de un ejército civil. La democracia en un régimen de representación política debe empezar por las mismas organizaciones que contienden por el poder. Si no existe tal democracia, los que llegan al poder actúan al margen o en contra de ella, como testaferros de los llamados poderes fácticos, que son los verdaderos dueños de la economía, es decir, la clase dominante (la que domina, valga el énfasis, que debería ser innecesario). Así conceptuada la democracia sólo le es útil a las élites que dominan desde el poder político y económico, cada vez más identificados. Para los pobres no tiene ningún significado, no existe.
El cambio de gobernador en Guerrero, como antes en Michoacán (para no decir en todo el país), no es producto de la democracia, sino una manera de evitarla realmente. Los acuerdos cupulares no son democráticos. Puede ocurrir que una nueva persona en el ejercicio del poder sea más democrática que otra; se dan casos. Pero aun así se trata de paliativos, de formas cambiantes como las sombras chinescas en las que las manos son las mismas.
La perspectiva no es halagüeña, ni siquiera si los estudiantes desaparecidos son encontrados, esperemos que con vida. El hecho ya está, por lamentable que sea en todos los aspectos. Y para episodios de barbarie como el de Iguala no hay acuerdos políticos que valgan. Los culpables no son sólo los policías y/o criminales, el alcalde y su esposa, ni siquiera el gobernador ahora sustituido. Son los que tienen el poder y que desprecian a quienes no lo tienen, los que gobiernan en contra de los pobres, los que viven de sus privilegios, los que impiden el ascenso social y que tratan de paliar la pobreza con migajas que, irónicamente, tienen su origen (vía impuestos) de esos mismos pobres.
El teatro de sombras es, desde tiempos remotos, para distraer. No más.


Dilma: victoria y nuevas batallas

Dilma: victoria y nuevas batallas
Ángel Guerra Cabrera
E
scribo con regocijo por la paliza número 23 propinada a Estados Unidos en la ONU con la condena universal de su ilegal e inmoral bloqueo a Cuba. Tengo la certeza que éste terminará más temprano que tarde. No de un día para otro, sino como un proceso gradual. Como igual la tengo sobre la ya inevitable declinación de la hegemonía de Washington, aunque no se resigne a aceptarlo y conserve gran capacidad para hacer daño.
Con la disputa por la hegemonía tenían que ver mucho las elecciones sudamericanas de las últimas semanas. Una victoria de la oposición neoliberal en Bolivia, Brasil y Uruguay habría significado un enorme tanto a favor de la hegemonía yanqui. Afortunadamente, en los tres casos ocurrió lo contrario.
Pero aún con la resplandeciente victoria lograda por Evo y el MAS en Bolivia, y el ya prácticamente seguro triunfo en segunda vuelta del Frente Amplio en Uruguay con mayoría en ambas cámaras, una derrota del PT y su abanderada Dilma Rousseff en Brasil hubiera implicado una verdadera catástrofe para las fuerzas populares de nuestra América.
Sin Brasil es inconcebible el proyecto de unidad e integración que tuvo en Hugo Chávez su más destacado impulsor, pero que no hubiera podido cuajar sin el pleno apoyo y cooperación de Lula da Silva y todo el peso regional e internacional del gigante sudamericano como país más extenso y poblado de América Latina, su principal economía y la séptima del mundo, dotada de gigantescos recursos naturales.
Ello explica que a la relección de Dilma se halla opuesto tenazmente una poderosa coalición integrada por sectores muy belicosos del capital financiero internacional y sus voceros más connotados como el Financial Times, The Economist, The Wall Street Journal, además de las grandes empresas brasileñas y su oligopolio mediático aliado que, como denunció el teólogo Leonardo Boff, crearon unatormenta perfecta para impedir la continuidad de la gestión del PT. Pasando por el sabotaje económico, apelaron a las tretas más inmorales.
En una acción abiertamente criminal y golpista la cereza del pastel la puso el semanario Veja en su edición de vísperas de la elección. Una vil calumnia contra Lula y Dilma en portada, no sustentada en la nota de páginas interiores y adelanto en 24 horas de su circulación para que los otros medios oligárquicos como O Globo –también golpistas– pudieran difundirla viernes, sábado y el mismo domingo electoral. Pero no les funcionó. En opinión de Boff pudo más la madurez política del pueblo brasileño y la acción de la militancia de los movimientos populares y de las personas sencillas que se volcaron a las calles a defender el proyecto del PT.
Dilma, la guerrillera que no pudo ser doblada por la tortura, se creció como líder ante tamaños desafíos, actuó con mucha valentía, supo ser convincente en la palestra pública, atacar duro a su contrincante en los debates y con el apoyo de Lula hacer reaccionar a la base de millones de trabajadores y beneficiarios de los programas sociales petistas que constituyen su electorado. Su victoria fue ajustada, pero no por ello deja de ser meritoria e histórica.
Los gobiernos de Lula y Dilma han conseguido extraordinarios logros sociales que han dignificado la vida de decenas de millones de brasileños entregándoles mayores ingresos y por primera vez acceso a la salud, la educación y a los servicios de agua y luz. Pero no han podido abarcar en 12 años toda la enorme deuda social de uno de los países más desiguales del mundo ni realizar transformaciones estructurales de fondo. El PT también reconoce que necesita un profundo análisis autocrítico.
El pésimo transporte público, por ejemplo, fue desencadenante de las grandes protestas de junio, por más que uno olfatee otros componentes nada sanos en esa movilización.
Es evidente que para acometer las transformaciones que se necesitan, como la reforma agraria y la democratización de los medios de comunicación, no basta con las alianzas parlamentarias que le han permitido al PT gobernar hasta ahora. El Parlamento está repleto de reaccionarios y corruptos. Dilma lo sabe y por eso se ha comprometido a dar la batalla por una Asamblea Constituyente y una reforma política, que no sólo adecentaría la democracia representativa, sino abriría las puertas a una mayor participación popular. Esta será decisiva para impulsar las reformas que están pendientes ahora frente a una derecha y una oligarquía golpistas y cargadas de un odio enfermizo y visceral.


Crimenes de lesa humanidad

Crímenes de lesa humanidad
John Saxe-Fernández
E
n medio de la marea humana que acudió al Zócalo el domingo 26 de octubre, convocada por Morena y movilizada bajo la exigencia del regrésenlos vivos, un grito que se oye por todo México y el mundo, Elena Poniatowska observó que “(L)os culpables quieren librarse de responsabilidad al querer ligarlos con cárteles del narco”. Menospreciar a las víctimas, difamar a los 43 estudiantes para justificar crímenes y masacres, es parte de los procedimientos de corte nazi de las guerras sucias y de exterminio contra la población que incluyen la tierra arrasada, el asesinato por responsabilidad colectiva y el uso clandestino de unidades militares o policiales, bajo cubiertas varias: paramilitarismo,delincuentesnarcos firmas de seguridad.
Así lo consignan manuales militares de contrainsurgencia, por ejemplo del Plan Colombia (PC),modelo de terrorismo de Estado que arrancó en 1999, usado en Irak, Afganistán y, a través de la Iniciativa Mérida (IM), en México y Centroamérica. Datos históricos y documentos contundentes que muestran que el PC fue una decisión del gobierno de EU, elevada a política de Estado mediante la aprobación de (su) Congreso, son ofrecidos por Hernando Calvo Ospina en El terrorismo de Estado en Colombia(2007, en google). Mientras se debatía el PC apoyado por Clinton entre su Secretaría de Estado y el zar anti-drogas general McCaffrey, ex jefe del Comando Sur, el asesor militar Stan Goff revelaba que en Colombia desde 1991 los más feroces escuadrones paramilitares estaban directamente conectados, para inteligencia y operaciones, con las fuerzas de seguridad mediante una red organizada bajo la tutela de la CIA y el Pentágono (José M. Martín Medem, Colombia Feroz, 2009, p 116).
El presupuesto del PC lo defendieron en el Congreso de EU la Casa Blanca y Lawrence Meriage, ¡vicepresidente de Occidental Petroleum! Sus palabras van al quiddel PC y de su par, la IM: El sector privado tiene enormes intereses estratégicos y vitales en juego en ese país y por eso el paquete de ayuda por mil 574 millones (de dólares) debe ser aprobado cuanto antes.
Urabá, territorio de masacres y asesinatos paramilitares, es descrito en documento de 1996 del Departamento de Estado como una de las zonas más ricas y estratégicas de Colombia y el mundo que no sólo produce el 60 por ciento de los cultivos de banano del país, sino que contiene gigantescas reservas madereras, pesqueras, oro, plata, platino, cobre, titanio, cobalto radiactivo, gigantescos recursos petroleros y una biodiversidad casi sin igual en el mundo. Ese inmenso botín es lo que está detrás del horror y terror del PC y de la IM como se aprecia enNi vivos ni muertos (2014), de Federico Mastrogiovanni, sobre desaparición forzada en México, un libro de rigor y enorme fortaleza humana, documental y analítica.
En entrevista reciente el autor puntualizó que los lugares “donde se ha registrado la mayoría de las desapariciones de personas en años recientes en México se ubican en zonas donde se planea explotar yacimientos de petróleo y gas shale y eso no es una coincidencia, sino una práctica de las grandes empresas aliadas con los gobiernos para obtener la máxima ganancia”. Mostró dos mapas superpuestos donde se ubican ambos fenómenos: las desapariciones y las extracciones de combustiblescomo muestra palpable de la coincidencia que no es coincidencia. Destacó la relación existente entre la necesidad de sembrar terror, vaciar territorios y la presencia de recursos naturales. Si pones los dos mapas, el de las desapariciones y el de los recursos como el gas y el petróleo, te das cuenta de eso. Enfatizó que dichas prácticas son muy comunes para las empresas trasnacionales en diversas partes del mundo... donde grupos de delincuentes hacen huir a la gente, luego llegan grupos paramilitares o militares que los hacen huir a ellos y luego llegan las empresas para aprovechar ese territorio explotable sin gente.
En este cruce entre negocios ygeoestrategia es vital revisar el Informe y mapas del “shale en México” del Departamento de Energía de Estados Unidos, riqueza localizada, dicen las petroleras, en zonas con problemas de seguridad por la presencia indígena, campesina y de ejidos (Expansión, 23/10/14 p 74). Para Ali Moshiri, presidente de Exploración y Producción en África y América Latina de la gigante Chevron, eso no va a ser un problema muy grande para nosotros...Tenemos ciertos procedimientos establecidos y lo resolveremos a medida que crezca la operación en México (ibidem).
De eso indagó la Comisión de la Verdad sobre la guerra sucia 1969-1979. Su presidente, Enrique González Ruiz indicó que”... hay pruebas suficientes para comprobar la responsabilidad del Estado mexicano”. Dijo también que “aplicaban tácticas de seguridad nacional de Norteamérica. “La nueva guerra suciade estos días es hija de aquella guerra sucia impune”. La Comisión ratificó la capacidad de resistencia entonces y ahora.